Los ucranianos refugiados en España celebran su Navidad más amarga porque se han visto obligados a abandonar su país huyendo de la guerra. Los que llevan más tiempo en España acogen a los que acaban de llegar. En una iglesia ortodoxa de Madrid se congregan personas de varias nacionalidades, sobre todo, ucranianos y rusos. La mayoría de fieles no quieren que se les distinga por su nacionalidad. El deseo de todos por Navidad es el mismo: paz y reencontrarse con aquellos que están lejos.
Foto: EFE/Rostyslav Averchuk