Las calles de muchas ciudades se han llenado este sábado de manifestantes denunciando la violencia machisla en el Día Internacional de la eliminación de la Violencia contra la Mujer para reclamar medidas de protección y el castigo de los abusos machistas. Medio centenar de ciudades españolas han organizado protestas en sus calles. En Madrid, cientos de personas, en su mayoría mujeres, han partido de la plaza de la Villa -a poco más de medio kilómetro de metros de la Puerta del Sol- portando velas y globos negros, cada uno con el nombre de las víctimas de este año. También en Barcelona miles de personas han protestado contra esta lacra social.
Las calles de muchas ciudades se han llenado este sábado de manifestantes denunciando la violencia machisla en el Día Internacional de la eliminación de la Violencia contra la Mujer. Medio centenar de ciudades españolas han organizado protestas por sus calles, entre ellas Madrid y Barcelona. En España, en lo que va de año, 45 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas, la última este viernes en Vinarós. Además ocho niños han muerto también en crímenes machistas y 24 han quedado huérfanos. Desde que ha registros, hace 14 años, han muerto casi mil.
Tienen el ferrocarril más antiguo de España y salen a la calle para reivindicar un transporte digno. Averías, retrasos de horas, motores que terminan ardiendo son habituales para los extremeños.
Miles de personas se han manifestado este sábado por las calles del centro de Valencia para reivindicar que los valencianos son españoles y mostrar su rechazo al "nacionalismo catalanista" y a los "Països Catalans". La protesta, que se ha desarrollado sin incidentes y a la que han acudido cerca de 15.000 personas, según fuentes de la Delegación del Gobierno, ha sido organizada por la Federación Coordinadora de Entidades Culturales de Reino de Valencia (FCECRV).
Miles de personas se han manifestado en Barcelona, convocadas por Òmnium Cultural y la Asamblea Nacional Catalana (ANC) para pedir la libertad de sus dirigentes Jordi Sánchez y Jordi Cuixart y también la de los ocho miembros del Gobierno catalán destituido, todos ellos en prisión preventiva por orden de la Audiencia Nacional.
Más de 30.000 personas inundan las calles de Talavera para reinvindicar un futuro para la ciudad
