Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha sido categórico en la réplica: "No tuve el desglose del déficit hasta que no llegué al Ministerio. Lo quiero dejar aquí dicho con toda rotundidad y claridad. Sí que lo sabían el anterior Ejecutivo y algunos diputados socialistas, como el señor Rubalcaba", ha aseverado.

"¿Y si lo saben, y si saben la desviación, por qué no hacen propuestas para corregirlo?", se ha preguntado Montoro. "Estamos donde sabíamos que íbamos a estar: con descalificaciones gratuitas y sin su apoyo", ha afirmado el ministro al PSOE.

El portavoz del PSOE, José Antonio Alonso, ha reconocido "la dureza de la crisis", pero ha calificado el ajuste como "injusto" e "ineficiente para la economía española". Tras afirmar que "el traspaso de poderes fue modélico", Alonso ha reconocido que "puede ser cierto que haya exceso de déficit", pero ha exigido que el actual Ejecutivo "deje claro" que no proviene de la administración del Estado, que ha cumplido "básicamente" con las cuentas. "Viene de las comunidades autónomas, algo que ustedes sabían ya porque gobiernan en la mayor parte de ellas, (...) tal y como ha reconocido el señor Rajoy en una entrevista", ha aseverado.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha declarado este martes a la Agencia Efe, en su primera entrevista desde que asumió el cargo, que la subida del IRPF aprobada por su Gobierno es "dura y dolorosa, pero absolutamente imprescindible". "No quedaba otra opción" ha aseverado, para decir que la decisión es "desagradable" pero que el Gobierno ha intentado ser "justo y equitativo".

Mariano Rajoy asegura que en el debate de investidura no sabía que el déficit llegaría al 8 por ciento en lugar del 6 previsto. Dice que lo supo el 27 de diciembre. Tres días después, el Gobierno aprobó sus primeras medidas económicas, con recortes y las subidas de algunos impuestos. En una entrevista con la agencia EFE el presidente asegura que esas medidas son duras, pero imprescindibles y se muestra dispuesto a dar la cara frente a la situación económica.

España tiene que hacer frente a un ajuste del orden de 40.000 millones de euros en 2012 para cumplir el objetivo de déficit establecido según la agencia de calificación crediticia Moody's, que considera necesarias más medidas de austeridad para "devolver a las finanzas públicas españolas a una senda sostenible". Tras las medidas anunciadas por el Gobierno de subida de impuestos y reducción de gastos, aún quedan casi 25.000 millones que hay que ahorrar, según señala Efe, un "esfuerzo sin precedentes".

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha reconocido que se han pedido ya muchos sacrificios a los ciudadanos, pero les ha solicitado "un esfuerzo más" para salir de la crisis y crear empleo y les ha garantizado que "no será en vano". Sáenz de Santamaría ha pronunciado estas palabras en la toma de posesión de los nuevos miembros del Ministerio de la Presidencia, que ha reducido a la mitad sus directores generales. A su juicio, los ciudadanos a los que el Gobierno les pide nuevos esfuerzos deben ver que la administración es capaz de "trabajar con austeridad y hacer las horas que hagan falta para ahorrar del erario publico y dirigir las profundas reformas que necesita este momento".