El presidente ruso, Vladímir Putin, y el estadounidense, Donald Trump, se han reunido este viernes en la base aérea Elmendorf-Richardson, a las afueras de Anchorage (Alaska). En la rueda de prensa posterior al encuentro, ambos han calificado su reunión como "productiva", aunque no se han anunciado los temas principales de la cumbre, incluida la posible implementación de un alto el fuego en Ucrania.
Trump ha señalado que los pocos datos públicos de la reunión han dejado abierta la posibilidad de una nueva negociación en las próximas semanas que pueda arrojar luz sobre los asuntos todavía "pendientes de resolver" y que podría desarrollarse en Moscú. El mandatario republicano ha añadido que llamará a la OTAN y a Zelenski para ponerles al día de todos los temas que han tratado en la reunión.
Por su parte, Putin ha asegurado que quiere una solución "a largo plazo", solicitando a los países europeos y a Kiev “no obstaculizar" el camino hacia la paz que, según ha señalado, "comienza a verse". La enviada especial a Alaska, Raquel González, explica algunas de las claves tras el esperado encuentro.