El ministro de Sanidad de la Autoridad Palestina y exalcalde de Ciudad de Gaza, Maged Abu Ramadán, denuncia el "infierno en la tierra" en el que se ha convertido la vida en la Franja. Desde su Ministerio en Ramallah, en la Cisjordania ocupada, pagan al personal sanitario de la Franja. Intentan proporcionar vacunas y medicamentos a un sistema desmantelado, deficitario en casi todo. Abu Ramadán asegura que "las víctimas de los ataques son muchas más de las que pensamos". "Hay que actuar ya. El objetivo de Israel es hacer de Palestina un territorio inhabitable", denuncia.
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Gaza ha sido uno de los escasos puntos de desacuerdo en la reunión de este jueves entre el primer ministro británico, Keir Starmer, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Al republicano le molesta que más Gobiernos, entre ellos el de Starmer, decidan reconocer el Estado palestino. Pero pese a este desencuentro, la cumbre entre ambos se ha sellado con un gran acuerdo económico bilateral.
Cada tono en el teléfono es para Yousef una eternidad. Espera impaciente una respuesta al otro lado. Lleva cuatro días sin saber de su familia en Gaza por los cortes de comunicación que sufre la Franja. Tras un minuto interminable, le responde su sobrino Mohamad. Le habla sobre los bombardeos, el hacinamiento y la hambruna.
En enero, Yousef ya perdió a un hermano y a la familia de este. Nunca le pudieron enterrar. Tiene miedo que algún día no reciba respuesta de aquellos que le quedan en Gaza. "Ponte tú en mi lugar e imagina que estás viviendo así desde hace dos año", lamenta Yousef.
Mientras Israel sigue atacando la Franja de Gaza, ya piensa en repartirse con Estados Unidos lo que quede de ella tras la ofensiva. Un polémico plan que desveló el miércoles el ministro israelí Bezalel Smotrich, uno de los más radicales del gabinete de Benjamín Netanyahu, sancionado por España o Reino Unido y también en la lista de Bruselas. "La fase de demolición, la más costosa, está hecha y ahora hay que construir", aseguró.
El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, ha autorizado una investigación para determinar si las acciones de Israel en la Franja de Gaza constituyen "graves violaciones" del Derecho Internacional de los Derechos Humanos y Humanitario, lo que podría suponer crímenes previstos en los artículos 607 y siguientes del Código Penal —entre ellos el genocidio—, según el decreto de la Fiscalía. En la investigación, que había sido solicitada el 28 de julio por la fiscal de Sala coordinadora de Derechos Humanos y Memoria Democrática, Dolores Delgado, el fiscal acuerda que estará involucrado también el Fiscal Jefe de la Audiencia Nacional, Jesús Alonso. El Gobierno ha mostrado su apoyo a la decisión del fiscal como medida de "presión" a Israel, mientras que el PP ha insistido en pedir su dimisión por la apertura de juicio oral contra él por un presunto delito de revelación de secretos en el caso de presunto fraude fiscal de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso. Foto: REUTERS/Mahmoud Issa.
El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, ha adelantado este jueves que el Consejo de Ministros aprobará el próximo martes el decreto para hacer efectivo embargo de armas a Israel o la importación de productos provenientes de los territorios ocupados que anunció el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, la pasada semana para hacer frente al "genocidio" en Gaza. "Estamos finalizando la redacción de la medida y lo que hará es cristalizar en un Real Decreto-ley lo que venimos haciendo en materia de prohibición de exportaciones", ha señalado el ministro en una entrevista en La Hora de la 1 de TVE.
El titular de Economía ha celebrado la posición de "liderazgo" de España en este ámbito y ha reivindicado que también entre los Veintisiete se estén "dando pasos" en la misma dirección. Cuerpo se ha referido así al plan aprobado este miércoles por la Comisión Europea para suspender parcialmente el acuerdo de libre comercio con Israel como respuesta a la masacre en Gaza, que espera que salga adelante. Foto: EFE/Ana Escobar
El ex alto representante de la Unión Europea Josep Borrell ha calificado de "broma" las medidas de los Veintisiete contra Israel. En su opinión, "llegan 40.000 muertos tarde".
Bruselas ha propuesto limitar las ventajas comerciales a Tel Aviv y otras sanciones, pero necesitará el respaldo de los países miembro. En esta línea, el político español minimiza el impacto de los anuncios: es, en sus palabras, un recorte comercial de 220 millones de euros al año.
Igualmente, Borrell ha respondido a las críticas de su sucesora, Kaja Kallas, que señaló su falta de efectividad contra Israel cuando estuvo en el cargo: "No consiguió nada de nada". El diplomático español ha reconocido que no consiguió una acción de la Unión contra el país de Oriente medio. Sin embargo, cree que él "al menos se lo propuso al Consejo europeo".
En ese aspecto, apunta a la líder al frente del Colegio de comisarios y cabeza visible de los Veintisiete: Ursula von der Leyen. En La noche en 24h le ha interpelado: "¿Cuándo descubrió que lo que hacía Israel era intolerable?, ¿el día antes del debate de la Unión?". Por eso, cree que Von der Leyen "ha estado quince meses sin hacer caso a los que le decíamos que había que tomar medidas".
El Ejército israelí sigue forzando a los palestinos que viven en Ciudad de Gaza ha desplazarse a otras zonas de la Franja igual de inseguras y saturadas de personas. Este miércoles, el ministro de Economía israelí ha asegurado que ya están negociando con Estados Unidos el reparto de la Franja.
En España, si no hay imprevistos, el embargo de armas contra Israel se aprobará el próximo martes. El decreto se ha caído de los dos últimos Consejos de Ministros, supuestamente por su complejidad técnica.
Oficialmente, la Moncloa no da detalles, pero algunas fuentes describen varios retos. España tiene una ley que regula el comercio de armas, pero no los embargos a gran escala. El texto del decreto tendría que evitar el choque con la legislación internacional.
El Ejecutivo trabaja en definir el alcance del embargo para controlar su impacto económico en España. Si afecta a contratos nuevos o también en vigor, o a qué productos concretos implicaría, o si se diferencia entre armas y munición y otros componentes tecnológicos no letales o de seguridad. Algunos de ellos importantes para nuestras fuerzas armadas, pero también para el sector privado.
Sobrevivir en Ciudad de Gaza, asediada por tierra y por aire, es más difícil cada día. Nos llegan continuamente imágenes de un éxodo desesperanzado y dramático. Los periodistas internacionales siguen sin poder entrar a la Franja por la prohibición de Israel y las comunicaciones son cada vez más difíciles.
Refaat Al Atamma, médico anestesista y reportero en Gaza con pasaporte boliviano, denuncia los desplazamientos forzados "bajo fuego y bombas" a los que los gazatíes se ven obligados y la falta de alimentos como el queso, las frutas o la carne por el bloqueo israelí a la ayuda humanitaria.
En España, las polémicas en torno al apoyo público a Palestina se extienden. Los profesores de Marea Palestina denuncian que en la Comunidad de Madrid se está prohibiendo exhibir la bandera palestina en centros públicos. Además, según cuentan, han recibido más de una decena de quejas y no descartan emprender acciones legales.
El portavoz de Marea Palestina, Carlos Díaz, denuncia que "lo más preocupante es que se han prohibido actividades que estaban ya programadas y acordadas por los claustros para explicar el genocidio que se está cometiendo en Palestina".
Desde Más Madrid señalan que la oposición al gobierno autonómico recuerda que sí se permitieron banderas y mensajes de apoyo a Ucrania. Por otro lado, Ayuso niega que se haya prohibido específicamente: "Pido que dejen de intentar adoctrinar en los colegios y llevar las refriegas políticas, y más esta que está promoviendo el presidente del Gobierno para tapar su corrupción".
En el Bernabéu, se retiraron banderas palestinas este martes. La UEFA no permite exhibir banderas que no sean las de los equipos, aunque durante la noche del martes algunos asistentes se saltaron la norma en San Mamés y podrían ser sancionados.
Además, la ola de apoyo a Palestina también se siente en las universidades. Por ejemplo, en la del País Vasco han renunciado a participar en proyectos con instituciones israelíes por valor de 247 millones de euros. Piden que Europa y España hagan lo mismo.