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11 dibujantes ilustran el 'Apocalipsis según San Juan'

  • "Si Crumb hizo el Génesis', nosotros 'El apocalipsis', asegura Darío Adanti
  • Su variedad de estilos es el principal aliciente de este arriesgado trabajo

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Fragmento de una viñeta de Darío Adanti para 'El Apocalipsis según San Juan'
Fragmento de una viñeta de Darío Adanti para 'El Apocalipsis según San Juan'

El Apocalipsis según San Juan es el último libro del Nuevo Testamento, considerado por la mayoría de los eruditos el único de carácter exclusivamente profético. Quizá sea el texto más rico en símbolos de toda la Biblia, lo que dificulta su estudio y provoca que haya sido motivo de numerosas investigaciones, interpretaciones y debates a lo largo de la historia.

Ahora 11 dibujantes se han propuesto el reto de ilustrarlo para devolver ese poder, esa fuerza, esa poesía... que tenían los símbolos del libro y que se ha perdido, tras 2000 mil años de interpretaciones, muchas de ellas catastrofisticas.

"Robert Crumb hizo El Génesis (La Cúpula) y nosotros hemos hecho El Apocalipsis según San Juan (EDT)" -asegura el coordinador del libro, el dibujante argentino Dario Adanti-.

"Teníamos el reto de liberar al Libro del Apocalipsis del uso intimidatorio que conocemos desde niños -comenta Javier Vázquez, otro de los dibujantes-. Y nos hemos quedado con la parte literaria, que tiene unos textos y una parafernalia de símbolos realmente alucinantes. Muchas veces tendemos a asociarlo al uso político, pero es un argumento fabuloso".

"No tenemos miedo de ir al infierno"

"Hemos necesitado 11 autores jóvenes para equipararnos a Robert Crumb (Génesis) y hacer esta obra -comenta Dario Adanti-. Hay un punto de novela postmoderna que te describe los monstruos del Apocalipsis muy en la línea de H. P. Lovecraft, y no lo terminábamos de ver. Lo que hemos pretendido es hacer un libro mucho más entretenido que el original: Y como el lenguaje es muy arcaico, la única forma de modernizarlo era hacerlo en tebeo para que fuese más ameno".

"A nivel visual cada uno ha hecho lo que ha querido -continúa Adanti-, pero hemos respetado el texto y si lees este libro puedes decir que has leído El Apocalipsis.  Dios se lo dictó a San Juan y nosotros hemos querido hacer una versión más asequible, para casi todos los públicos".

"Tengo que confesar que no lo había leído y que antes pensaba que el 666 era el prefijo de teléfono de la época -bromea Adanti-, creía que no existía realmente en el libro. Pero ahí está, en muchos capítulos. Y al leerlo tengo que confesar que me vino ese niño que tengo dentro".

Dario asegura que han sido muy respetuosos con el texto y que piensa que el libro no va a molestar a nadie, pero también que: "Los autores del libro no tenemos miedo de ir al infierno porque sabemos que vamos a ir".

Un proyecto que surgió de una fiesta

"Lo que más me gusta del proyecto -asegura Antonia Santolaya- es que surgió en una fiesta en el salón del cómic de Cáceres, habando de lo que se nos venía encima. Todo empezó como una broma, pero cuando nos decidimos a hacerlo y se repartieron los 22 capítulos me costó enfrentarme a ellos. Siempre se ha presentado El Apocalipsis como una historia de acción y quería ofrecer una visión distinta".

"Personalmente lo afronté desde la perspectiva de que no hay un final, sino una transformación -continúa Antonia-. Lo mejor del proyecto es que ha sido muy enriquecedor ver la lectura que ha hecho cada uno del libro. Personalmente fuí muy respetuosa con el texto y sólo he cortado una frase, por motivos obvios: "Estos son los que no se contaminaron con mujeres,  pues son vírgenes" (del capítulo 14).

"Estoy muy contenta con el resultado -aclara Antonia- tanto que se lo voy a mandar a una tía mía que es monja, para ver el feeling".

"Me pareció una gran idea"

Enrique Flores es otro de los ilustradores que ha participado en el proyecto: "Me pareció una idea estupenda, pero luego me dí cuenta de que me metía en un embolado. Parecía fácil, veintidós capítulos y once dibujantes, a dos capítulos y ocho páginas por cada dibujante. Por cierto que los capítulos se sortearon al azar. Pero luego, al empezar a trabajar, me dí cuenta de que hay mucha información y ha sido muy duro condensarla".

"En mis dos capítulos opté por una técnica inversa, el primero lo dibujé en negativo, con muchos negros, y el segundo en positivo".

Un libro original y divertido, que nos da una nueva visión de uno de los escritos más famosos de la historia y cuyo mayor atractivo está en los diferentes estilos de los dibujantes, que nos ofrecen una nueva visión de un texto que todos creemos conocer pero que muy pocos hemos leído.