Enlaces accesibilidad

F.Ibáñez: "Me gustaría que otros autores continuasen Mortadelo y Filemón"

  • "Mis personajes son calvos ¡Por el parecido con el autor!"
  • "Siempre admiré a Vázquez, ha sido uno de los mejores humoristas"
  • "Rompetechos es mi personaje preferido, quizá porque somos parecidos"

Por
Viñetas de 'Marrullería en la alcaldía', de F. Ibáñez
Viñetas de 'Marrullería en la alcaldía', de F. Ibáñez

Francisco Ibáñez (Barcelona 1936)

Con 20 años ingresó en el Banco Español de Crédito, donde realizó una carrera fulgurante: al cabo de un año estaba en la calle. Allí no pintaba nada, aunque dibujase mucho en la oficina. A sus 21 años decidió dedicarse a la historieta de humor; pero todas las publicaciones en las que colaboraba se iban inevitablemente a la bancarrota: 'Chicolino', 'La Risa', 'Paseo infantil'... En 1957 entró en Bruguera y el 20 de enero de 1958 Mortadelo y Filemón aparecieron por primera vez en 'Pulgarcito'. Después les seguirían, 'La familia Trapisonda', 'El botones Sacarino', '13 Rue del Percebe', 'Rompetechos', 'Pepe Gotera y Otilio'... Y muchos más gracias los que se ha convertido en el historietista español más conocido en el mundo.

"Me gustaría que otros autores continuasen Mortadelo y Filemón cuando yo no esté. No  estoy de acuerdo con esos autores que dicen: cuando yo desaparezca, los  personajes conmigo. No soy como aquel hindú que decía: "cuando yo muera la  viuda a la hoguera". Me gustaría que continuasen en manos de otros autores". Así de categórico responde Ibáñez cuando le preguntamos por el futuro de Mortadelo y Filemón.

"Además pueden seguir perfectamente porque en este país hay una  cantidad de dibujantes fabulosos,  todos muy superiores a mí, que cuando  cogen el lápiz hacen verdaderas obras de arte, con dibujos que podían  figurar en el Louvre o en la National Gallery".

"Sin embargo otra cosa es el guión, el guión es muy particular, muy privado de  cada autor. Eso es más dificilillo. Pero encontrando un guionista bueno,  y con los magníficos dibujantes que tenemos, Mortadelo puede seguir  durante muchísimos años". Y afortunadamente, de momento, seguirá en manos del propio Ibáñez.

"Seguiré con Mortadelo mientras le guste al público"

"Quiero seguir con Mortadelo y Filemón mientras le  guste al público. El único sistema que tengo de medir eso son las firmas  que hago al año por toda España, en librerías, ferias, salones,  centros comerciales... y afortunadamente, hoy por hoy, la gente se  vuelca. Hace unos días estuve firmando en Córdoba y en Jerez. Y las  colas salían a la calle. Eso en un género como el cómic, que ha  desaparecido de los kioskos y casi de la cultura popular, es mucho. Es  de agradecer".

"Yo estoy volcado con Mortadelo y Filemón, y detrás de un álbum aparece otro y  otro... hasta que el lector diga que basta. Pero de momento hay que  seguir"

De momento,  Ibáñez no necesita relevo. A sus 74 años sigue dibujando tres álbumes de Mortadelo y Filemón al año.  "No me dejan jubilarme, alguna vez lo propongo y les digo: "que ya tengo  un montón de años, que me quiero jubilar"; pero no me dejan ni acabar la  frase, me dicen mira el planning de este año y del que viene y el otro. Nos liamos ya en el secundo cincuentenario de Mortadelo y me parece que  en el tercero seguiremos ahí.

"Marrullería en la alcaldía"

El último de Mortadelo es Marrullería en la alcaldía (Ediciones B), sobre el que le hemos preguntado.

"Como hago tantos álbumes al año, en cuanto acabo con uno lo borro completamente para no armarme un lío, te puedo hablar del que estoy trabajando ahora y que, como siempre, es sobre un tema de actualidad, porque me gusta que el lector se encuentre cosas frescas. Y en este caso va sobre el reciclaje".

Aunque, haciendo un poco de memoria, nos comenta de que va Marrullería en la Alcaldía: "Va sobre el "pollo" que hay en cuarenta mil municipios del país donde gobiernan tipejos raros "sin escrúpulos". Pero no, directamente no se reconoce a ningún alcalde ni nada. Hablo en general"

"Mis personajes son calvos, ¡Por el parecido con el autor!"

Le preguntamos una duda que siempre nos ha reconcomido: ¿Por qué tantos de sus personajes son calvos? "¡Por el parecido con el autor!" (Bromea).

"No, es simplemente porque es más fácil. Tenía que hacer tantísimas páginas... en esto del cómic hacer 5 páginas a la semana es normal, hacer 10 ya es de locura, una heroicidad, y hacer 15 es impensable completamente... Pues hubo un tiempo en que yo hacía 20 páginas semanales. Había que eliminar todo lo superfluo y una de las cosas superfluas era el pelo".

"Cuando rompí con Bruguera, cree personajes nuevos,  Chicha Tato y Clodoveode profesión sin empleo; que, por cierto, hoy seguirían muy de actualidad. Y como eran jóvenes los hice muy peludos: uno a lo afro, con el pelo muy rizado; la chica con una cresta; el otro un melenudo... A la tercera página ya me estaba dando de bofetadas y me decía "pero que has hecho desgraciado". Pero en fin, ya estaba y hubo que continuar. Afortunadamente eso se acabó y sigo con mis peloncetes, Mortadelo y Filemón. Aunque Filemón tiene un par de pelos. Algún día se los quitaré también"

"Siempre admiré a Vázquez"

Recientemente, esa época de Bruguera se ha visto reflejada en la película El Gran Vázquez y en el cómic El invierno del dibujante, en dónde Ibáñez aparece retratado como un personaje más. "Me hace recordar aquellos tiempos ya pasados", asegura.

"Es bonito. Me siento más jovencillo, con menos achaques... recuerdo los tiempos en los que estabamos todos. Una cantidad de amigos y de grandes dibujantes que han ido desapareciendo. Aunque la película no refleje exactamente la vida en la editorial te hace ilusión recordar aquellos tiempos".

"Admiro a todos los dibujantes. Y no lo digo por quedar bien, todos tienen algo de los que aprendí. Siempre admiré a Vázquez por la agilidad que tenía para dibujar. Es uno de los historietistas que ha tenido más gracia de este país, más coña; el que más gags sacaba en cada página... Siempre ha sido fabuloso".

"Y admiraba a otros por la perfección de sus dibujos como Raf (Sir Tim O'TheoMartz Schmidt (El doctor Cataplasma, El profesor Tragacanto)... A todos ellos".

"Yo no soy maestro de nadie, soy discípulo"

Aunque en el reciente Expocómic, muchos dibujantes nos reconocían que Ibáñez era una de sus influencias, él se quita importancia. "Yo no soy maestro de nadie, yo soy discípulo. Yo miro las cosas de  otros dibujantes y se me cae la baba hasta los tobillos. Yo puedo saber  lo que es la historieta, que es dibujo y ante todo y sobre todo, guión".

"Una historieta sin guión no tiene importancia. De ahí el fracaso de tebeos que son una maravilla en la parte gráfica pero que fracasan  porque el lector dice para ver obras de arte me voy al Prado, lo que  quiero es divertirme. Y para eso está el guión. Ahí es donde hay que dar  el máximo"

"Yo me río de mi mismo muchas veces. Hay gente que piensa "que tipo más genial, cómo se refleja él mismo en las viñetas". Pero no es genialidad... a veces es simplemente un lapsus. Estás con el papel delante, en blanco, y dices ¿Qué pongo? No se me ocurre nada y digo, "pues yo mismo", a la gente le gusta cuando salgo. Así que me dibujo, supero ese momento de indecisión, salgo yo, la gente contenta y todos felices".

"Rompetechos es, quizá, mi personaje más querido"

"No tengo tiempo para recuperar otros personajes porque Mortadelo y Filemón me absorben. Últimamente conseguí recuperar un personaje muy querido por mí, quizá más que Mortadelo y Filemón, que es Rompetechos. Ahí si que se cumple el tópico de que el personaje se parece al autor. A cualquiera de los dos nos quitan las gafas y nos tienen que llevar a casa de la mano"

"Rompetechos me gusta horrores. Ten en cuenta que mis personajes son siempre por parejas o por tríos, pero Rompetechos era uno solo, y además chiquitajo. Cundía mucho, te ventilabas la historieta en un momento.  Ha sido siempre mi personaje favorito".