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Hungría aprueba la detención sistemática de migrantes, incluídos niños, pese a las críticas de la ONU

  • Se aplicará a recién llegados y a los solicitantes de asilo ya residentes en el país
  • Serán internados en "zonas de tránsito" hasta que se resuelva su solicitud
  • Hungría abolió una medida similar en 2013 por presiones internacionales

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Imagen de archivo de solicitantes de asilo en el pueblo Ásotthalom, cerca de la frontera entre Hungría y Serbia después de que cruzaran la frontera ilegalmente.
Imagen de archivo de solicitantes de asilo en el pueblo Ásotthalom, cerca de la frontera entre Hungría y Serbia después de que cruzaran la frontera ilegalmente.

El Parlamento de Hungría ha aprobado este martes por una amplia mayoría la detención sistemática de todos los migrantes que entren en el país, una medida criticada por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

La controverdida ley, aprobada con 138 votos a favor, 6 en contra y 22 abstenciones, establece que los demandantes de asilo solo podrán presentar sus solicitudes en "zonas de tránsito" situadas en la frontera con Serbia y Croacia, donde serán ingresados en centros de internamiento hasta la finalización de los trámites de sus solicitudes de asilo. En el caso de ser rechazados, sólo tendrán la posibilidad de regresar a Serbia.

La medida se aplicará tanto a los recién llegados como a los solicitantes de asilo ya residentes en el país, que según las autoridades húngaras alcanzaron los 586 en febrero.

Hungría, al igual que el resto de países europeos, contaba hasta ahora con centros abiertos y los refugiados podían moverse libremente por el país mientras se resolvía su caso. La normativa reintroduce una práctica que se abolió en 2013, cuando llegaban muchos menos refugiados, y a la que se puso fin por la presión de la Comisión Europea, la ONU y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Hungría solo permite que 25 personas entreguen cada día sus solicitudes de asilo en las zonas de tránsito y, después de presentar sus demandas de protección, la mayoría de ellos sigue su camino a otros países de la Unión Europea (UE) sin esperar el resultado de sus solicitudes

El Gobierno planea construir dos o tres campos en su frontera sur, según explicó la semana pasada el jefe del gabinete del primer ministro Viktor Orban, Janos Lazar. Lazar, también afirmó hace un mes que los migrantes serían alojados en contenedores convertidos en viviendas.

Solicitantes de asilo esperan, custodiados por la policía húngara, un autobús que les traslade al campo de refugiados de Röszke, en la frontera entre Hungría y Serbia.
Solicitantes de asilo esperan, custodiados por la policía hú

Solicitantes de asilo esperan, custodiados por la policía húngara, un autobús que les traslade al campo de refugiados de Röszke, en la frontera entre Hungría y Serbia. AFP PHOTO / CSABA SEGESVARI

Norma contraria al derecho europeo

Según ha reconocido el propio Orbán, la normativa es contraria al derecho europeo y su aplicación "iría abiertamiente en contra de la Unión Europea". En su discurso, Orbán ha criticado a la UE, al asegurar que Hungría no puede contar "con Bruselas (en la defensa de las fronteras), ya que ellos hacen más difícil el trabajo", sin concretar más.

El derecho internacional y las normas comunitarias solo prevén la detención de refugiados y solicitantes de asilo en circunstancias excepcionales, y siempre y cuando las autoridades hayan considerado medidas menos coercitivas para alcanzar los objetivos buscados.

Según Orbán, "la emigración es el caballo de Troya del terrorismo" y ha reiterado que actualmente "centenares de miles de personas están planeando partir hacia Europa". En 2016, 29.432 migrantes solicitaron asilo en Hungría antes de que la inmensa mayoría continuara hacia el oeste de Europa, sólo 425 recibieron asilo.

Esta legislación estará vigente sólo cuando en el país esté activo el "estado de alerta" por emigración masiva, un estado decretado a finales de 2015 y que por el momento se ha prolongado hasta hasta septiembre de este año.

Hungría, que se ha comprometido a construir una segunda valla contra refugiados, ha recibido desde el 1 de enero de este año a 345 migrantes según el Ministerio del Interior.

Migrantes ilegales camino del pueblo de Ásotthalom, cerca de la frontera entre Hungría y Serbia.

Migrantes ilegales camino del pueblo de Ásotthalom, cerca de la frontera entre Hungría y Serbia. AFP PHOTO / CSABA SEGESVARI

Alarma en la ONU

La portavoz de ACNUR, Cécile Pouilly, ha criticado desde Ginebra que esta nueva legislación "viola las obligaciones de Hungría con respecto al derecho internacional y las normas de la Unión Europea". La portavoz de ACNUR ha señalado que esta medida tendrá "terribles efectos psicológicos y físicos en mujeres, niños y hombres que ya han experimentado grandes sufrimientos".

La ley ya fue descrita por diferentes ONG como inhumana y contraria a las leyes del país. Amnistía Internacional y el Comité Helsinki, entre otras, han denunciado que la ley niega la protección infantil a los menores de entre 14 y 18 años, algo "sin precedentes en Europa", ya que estos menores tendrían que esperar detenidos en las zonas de tránsito.

Este es solo el último paso, hasta ahora, de las políticas antimigratorias de Orbán que han incluido la construcción de vallas y la aprobación de leyes que criminalizan la entrada irregular en el país y que dificultan la concesión del estatus de refugiado.

Hungría cerró su frontera sur en septiembre de 2015 con una valla -cuando cientos de miles de refugiados utilizaban la ruta balcánica para llegar a la UE- y hace poco se iniciaron las obras de una segunda, en paralelo a la primera.

El Parlamento también ha adoptado una legislación que prevé penas de hasta cinco años de cárcel por cruzar de forma ilegal la frontera y en octubre se organizó un referéndum sobre el sistema europeo de reubicación de refugiados. Aunque en esa consulta popular no se alcanzó el umbral del 50% de participación para que fuera válido, el Gobierno comunicó como un éxito que la gran mayoría de los más de tres millones de votantes rechazaron el sistema europeo de reubicación.