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Los particulares y empresas en quiebra bajaron un 27% en el segundo trimestre y marcaron el mínimo desde 2011

  • Entre abril y junio se declararon 1.426 concursos de acreedores
  • Las de particulares repuntaron en el segundo trimestre respecto al primero

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Local comercial cerrado en una calle de Madrid
Local comercial cerrado en una calle de Madrid.

Los particulares y empresas que se declararon en concurso de acreedores (la antigua suspensión de pagos) ante la imposibilidad de afrontar sus pagos y deudas bajaron un 27,1% en el segundo trimestre en relación al mismo período del año pasado. En total, se declararon 1.426 quiebras, una de las cifras más bajas desde 2011, según los datos publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

En concreto, hubo 151 particulares que se declararon en concurso de acreedores, lo que supone un descenso del 30,1% respecto al mismo trimestre de 2014, mientras que las empresas concursadas bajaron un 26,7%, hasta sumar 1.275 procedimientos de quiebra.

Si se comparan los datos del segundo trimestre con los del primero, el número de deudores concursados retrocedió un 8,6%, con un aumento del 2% en el número de familias declaradas en concurso y un descenso del 9,7% en el de las empresas concursadas.

Cataluña, Madrid y Valencia concentraron más de la mitad de las quiebras

Por tipo de concurso, 1.326 fueron voluntarios (un 27,1% menos que un año antes) y los otros 100, necesarios (un 25,9% menos).

Por comunidades autónomas, Cataluña, Comunidad de Madrid y Comunidad Valenciana concentraron el 50,4% del total de deudores concursados en el segundo trimestre.

La autonomía donde más disminuyó el número de deudores concursados fue Asturias (con una caída de 55,9% respecto a los declarados un año antes). Mientras, Aragón (8,7%) y Navarra (7,4%) fueron las únicas comunidades con aumentos interanuales de las suspensiones de pagos.

Las empresas pequeñas, las más afectadas

De las 1.275 empresas que entraron en concurso en el segundo trimestre, 191 eran sociedades anónimas (con un descenso interanual del 33,7%), mientras que 1.017 eran sociedades limitadas, un 24,3% menos que en el segundo trimestre de 2014.

El 35,4% de las empresas concursadas estaban en el tramo más bajo de volumen de negocio, es decir, tenían menos de 250.000 euros de facturación.

En cuanto al número de asalariados, más de la mitad (53,8%) de las empresas concursadas tenía menos de 6 empleados. Dentro de este grupo, el 27,7% no contaba con ningún asalariado.

Por actividad económica, el 22,4% de las empresas concursadas tenía como actividad económica principal la construcción, el 21,6% se incluían en comercio y el 12,5%, en industria y energía.

Si se analizan las empresas por su antigüedad, el 24,9% del total llevaba 20 años o más de actividad, mientras que el 14% llevaba funcionando cuatro años o menos.