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El PIB de Ucrania se contrajo un 7,5% este año, el "período más difícil" desde la II Guerra Mundial

  • El banco central apunta a desequilibrios económicos y a la guerra con Rusia
  • La inflación se disparó en noviembre hasta el 21%

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Mercadillo de Navidad enfrente de la Catedral de Santa Sofía en la capital ucraniana, Kiev
Mercadillo de Navidad enfrente de la Catedral de Santa Sofía en la capital ucraniana, Kiev.

La economía ucraniana se ha contraído un 7,5% en 2014, según los cálculos preliminares del Banco de Ucrania, el peor dato desde la crisis financiera de 2009 cuando el PIB cayó un 15%.

"En la historia de nuestro país no hubo un período tan difícil desde la II Guerra Mundial", ha señalado la gobernadora del banco central, Valeria Góntareva, quien también ha explicado que la inflación alcanzó el 21% entre enero y noviembre debido al "rápido deterioro" del nivel de reservas de oro y divisas de la institución que dirige.

En la historia de nuestro país no hubo un período tan difícil desde la II Guerra Mundial

Detrás de esa intensa recesión, se encuentran "enormes desequilibrios macroeconómicos" y la situación de guerra abierta con Rusia, ha indicado la responsable del organismo estatal. "Primero fue la anexión de Crimea, y luego, una sangrienta guerra en el Donbass [zona geográfica que incluye las rebeldes regiones prorrusas de Donetsk y Lugansk]", ha añadido Góntareva.

Sin embargo, la economista se ha mostrado optimista de cara a 2015 y ha destacado su creencia de que "lo que ha vivido el país este año no se reproducirá nunca".

Un presupuesto austero para asegurarse la ayuda del FMI

Estas declaraciones de la gobernadora se producen al día siguiente de que el Parlamento ucraniano haya aprobado un presupuesto muy austero, condición impuesta por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y otros acreedores internacionales para mantener la ayuda financiera que necesita para tratar de salir de la grave crisis generada por la guerra en el este, la principal zona industrial del país.

Así, las cuentas para el año que viene aumenta los gastos de defensa y seguridad, mientras que recorta las ayudas sociales.

Otra de las condiciones del FMI ha sido que el banco central dejase de respaldar la divisa ucraniana, la hryvnia (que se cambiaba este martes a 15,82 por cada dólar, frente a las 8,24 de principios de año), un proceso en el que ha empleado parte de sus reservas.

Entre ese apoyo a la moneda y la financiación de la campaña bélica, Ucrania ha gastado este año más de la mitad de sus reservas de divisas, que se sitúan por debajo de los 10.000 millones de dólares por primera vez en diez años.