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Fedea denuncia que en el cuarto trimestre de 2013 se han destruido 140.000 empleos netos

  • Se perdieron 1.308.862 empleos y se crearon 1.167.574 puestos de trabajo
  • Tener un contrato temporal multiplica por cinco la posibilidad de ir al paro
  • La industria es el sector con mayor estabilidad laboral

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Pérdida y acceso al empleo
Pérdida y acceso al empleo. Comparación del cuarto trimestre de 2012 y 2013.

El paro, en cifras

Tasa de paro: 26,03%

Paro juvenil: 55,06%

Paro femenino: 26,87%

Paro masculino: 25,31%

Hogares en paro: 1.832.300

Empleos destruidos: 198.900

Población activa: 22.654.500

Fuente: EPA cuarto trimestreFuente: EPA cuarto trimestre

La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) denuncia que en el cuarto trimestre se han perdido alrededor de 140.000 empleos netos, según los datos del Observatorio Laboral de la Crisis. La EPA referida al mismo periodo arrojaba un total de 198.900 puestos de trabajo destruidos en todo 2013 y 65.000 de octubre a diciembre.

El informe destaca que si bien en el segundo y tercer trimestre los nuevos contratos superaron los despidos, en el último trimestre se vuelve a producir una pérdida neta de empleo -como en el primero- porque los que han perdido su trabajo son más que los que lo han encontrado. En concreto, 1.308.862 individuos han perdido su empleo (el 7,8% del total de los ocupados) mientras que 1.167.574 parados han accedido a un puesto de trabajo (el 6,5% del total de desempleados).

Las mujeres se enfrentan a mayores obstáculos que los varones a la hora de mantenerse en el mercado laboral, no sólo porque sufren un mayor riesgo de pérdida de empleo, sino que también les es más difícil acceder a un puesto de trabajo, una constante que se mantiene a lo largo del tiempo.

Sin embargo, en el cuarto trimestre, 605.598 mujeres encontraron trabajo, una cifra ligeramente superior a la de los hombres (568.263). En el caso de la pérdida de empleo, 669.135 varones firmaron el finiquito mientras que lo hicieron 638.385 féminas. Al comparar estos datos con el último trimestre de 2012 se aprecia un ligero frenazo en la intensidad de la pérdida de empleo sobre todo en las mujeres.

Los jóvenes menores de 25 años también soportan un mayor riesgo de perder el trabajo y una vez en el desempleo, se enfrentan a mayores dificultades de acceso al mercado laboral, aunque los universitarios lo tienen un poco más fácil, los estudios superiores ejercen un cierto efecto “protector” de la pérdida de empleo a la vez que tiene un efecto “propulsor” para lograr un contrato. Es curioso que incluso "los mayores de 45 años tienen un 73% más de probabilidad de encontrar empleo que los jóvenes".

De octubre a diciembre, el tramo de edad de los menores de 25 años fue el más castigado por la precariedad laboral. La pérdida de empleo neto afectó a más de 60.000 jóvenes. De 25 a 44 años se registró una leve mejora del empleo y en el caso de los mayores de 45 años casi se equilibra el número de personas que pierden y consiguen trabajo. Con respecto a 2012 hay mejoría porque el año pasado todos los grupos acabaron con un saldo negativo.

La jornada parcial puede agudizar la precariedad

La jornada parcial aumenta su presencia en el acceso a un empleo: De cada 100 nuevos empleados, 37 han accedido a un trabajo con jornada parcial, 30 mediante un contrato temporal y 7 mediante uno indefinido. En el cuarto trimestre, el 16% de los nuevos contratos netos han sido indefinidos, el 9% a tiempo completo y el 7% a tiempo parcial.

Los economistas de Fedea permanecen atentos a la evolución de la jornada parcial. A corto plazo, "podría ayudar a repartir mejor el empleo mientras la demanda sea tenue, pero a medida que la recuperación toma pulso el uso del tiempo parcial debiera disminuir en aquellos casos en los que no es voluntario".

En caso contrario, se agudizaría la precariedad en el empleo, no solo por la temporalidad, sino también por "el subempleo que perjudicaría claramente al trabajador y a la calidad de empleo en general" a costa de aportar mayor flexibilidad al empresario.

Tener un contrato temporal "multiplica por cinco el riesgo de pérdida de empleo" entre trabajadores con la misma edad, educación, nacionalidad, género y antigüedad pero que difieren en el tipo de contrato, según el informe de Fedea.

Mayor estabilidad laboral en la industria

Los trabajadores de la industria pueden respirar más tranquilos que el resto en cuanto a la estabilidad laboral. En la construcción y la agricultura el riesgo de perder el empleo duplica al observado en el sector industrial entre individuos de similares características.

La movilidad laboral de los extranjeros es mayor que la de los españoles. De cada 100 fóraneos ocupados, 13 han perdido su empleo en el cuarto trimestre, por 7 de cada 100 españoles. A la hora de encontrar trabajo, 12 extranjeros lo han logrado por cada 6 españoles. Esto significa una mayor precariedad porque pierden su empleo con mayor facilidad, pero también que los extranjeros aceptan empleos de peor calidad y por eso se colocan antes.

En el sector privado, un 10% de los empleados han perdido su trabajo de octubre a diciembre, mientras que la contratación ha repuntado ligeramente en el sector público. En cuanto a la composición del empleo, un 75% han encontrado un puesto en el sector privado, alrededor de un 12% en el público y el resto son autoempleados.