Enlaces accesibilidad

Las cajas ganaron 580 millones de euros, un 71% menos, en 2011

  • Las entidades han dotado con 8.300 millones el deterioro de activos
  • CatalunyaCaixa perdió 1.335 millonesy Novagalicia 169 millones
  • No se incluyen las dos entidades subastadas, UNNIM y CAM

Por

Las cajas de ahorros cerraron el año 2011 con un desplome en sus beneficios del 71% hasta los 580 millones de euros, tras el fuerte incremento de dotaciones por valor de 8.300 millones para afrontar el deterioro de activos. El beneficio de las entidades financieras se ha visto lastrado además por CatalunyaCaixa, que perdió 1.335 millones, y Novagalicia, con 169 millones de euros.

Según datos de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), en estos resultados -en los que no se incluyen las dos entidades que han sido subastadas, UNNIM y CAM- pesó también el fuerte incremento en las provisiones, que sólo en el último trimestre restó 4.035 millones al sector.

El Estado, a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha iniciado la subasta de Catalunya Banc, y espera que el proceso se encuentre cerrado para el verano.

Para hacer frente a los requisitos de saneamiento financiero del real decreto ley aprobado por el Gobierno en febrero las cajas de ahorros han dedicado de forma anticipada 6.379 millones de euros en 2011 a provisiones por deterioro de activos financieros, y 1.893 millones por pérdidas de activos no financieros.

La CECA ha destacado el fuerte aumento en las dotaciones realizadas en el cuarto trimestre (4.035 millones), lo que pone de manifiesto que las entidades han anticipado total o parcialmente los saneamientos adicionales requeridos por ley para afrontar el riesgo al sector inmobiliario.

Dificultades de acceso a financiación mayorista

El margen de intereses se hundió un 20%, hasta 11.049 millones de euros, lo que pone de manifiesto las dificultades de acceso a la financiación mayorista, y los resultados de operaciones financieros se desplomaron un 32,2% debido a la tendencia bajista en los mercados bursátiles durante todo el año y marcaron 1.875 millones.

La patronal de cajas destacó que el importante proceso de reestructuración y reducción de capacidad instalada se refleja en los gastos de explotación, con un descenso en los de personal del 4,9% y los de administración (-3,9%) y amortizaciones (-16,1%). El margen de explotación cayó un 28,2%.

El número de oficinas se ha reducido en 4.264, lo que supone un 17% menos desde la máxima densidad registrada en el tercer trimestre de 2008 y ahora totaliza 20.787 sucursales, mientras que el número de empleados ha adelgazado un 14,3%, lo que se traduce en 19.415 trabajadores menos y sitúa el total en 116.000.