El Santander mantendrá sus beneficios pese a la crisis de deuda y frenará sus adquisiciones

• Emilio Botín defiende la rentabilidad de las acciones de su entidad
• Anuncia que mirará "con lupa" sus negocios para dar solidez al banco

Los indignados reprochan a Botín los elevados sueldos y primas de los directivos

El Banco Santander, propiedad de Emilio Botín, prevée para 2011 unas ganancias de unos 8100 millones de euros. Estos beneficios resultarían similares a los de 2010. Hay que recordar que, para la entidad, estas ganancias supusieron un 8,5% menos de beneficios con respecto a 2009.

La entidad generó buenos resultados en el primer semestre de este año y en el segundo semestre se ha mantenido esta tendencia.

Sin embargo, para Emilio Botín, el comportamiento de valor de sus acciones no se corresponde con los resultados de los últimos años ni con la solidez de su balance. Dice que su entidad se ve penalizada por los problemas de confianza que pesan sobre la Eurozona, así como por el castigo a los valores financieros.

Defiende la rentabilidad de sus acciones

La acción mantendrá su dividendo de 0,60 euros. Este jueves, la entidad acordó abonar desde el 1 de agosto el primer dividendo  a cuenta del ejercicio 2011. Esto supone unas ganancias de 0,13 euros por acción, igual que el  pagado en 2010.

La acción, con una rentabilidad por dividendo a los precios  actuales  del 7,5% es claramente una excelente oportunidad de  inversión", ha asegurado  Botín. Entre otros objetivos, el grupo profundizará en  la diversificación  geográfica del negocio y la fortaleza de balance.

"Estoy convencido de que el potencial real de resultados del banco  se verá reflejado en importantes tasas de crecimiento de nuestros  beneficios en los próximos años", aseguró el presidente del primer  banco español. El porcentaje de beneficio para los accionistas se mantendrá en torno al 50%, agregó.

Botín ha aclarado que el banco analizará las oportunidades de  adquisición "con lupa". Solo barajarán aquellas que encajen en su modelo de negocio y supongan  una aportación de valor clara para los accionistas a medio plazo.  El objetivo para la entidad es obtener más solidez y rentabilidad.

Estas declaraciones se producen un día después de que la Audiencia Nacional anuncie que investigará a la familia Botín por la posible irregularidad de sus cuentas en Suiza.