Agustín 'Tato' Abadía: "España volverá a ganar"

• El exfutbolista cree que España necesita un nuevo líder, "un nuevo Xavi o Casillas"
• Actualmente, Abadía regenta una tienda de quesos y espera volver a entrenar
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Agustín 'Tato' Abadía, en su tienda de quesos en Logroño.

Logroño, calle San Agustín. Un hombre delgado, calvo y con bigote trabaja en su tienda de quesos. Apenas una foto de su mujer entre aficionados del Logroñés atisba el pasado del personaje en cuestión. Agustín Abadía, exjugador del club rojiblanco y uno de los iconos del fútbol de los ochenta y noventa en España, atiende con esmero su negocio sin esquivar, eso sí, una buena conversación sobre fútbol.

"Soy tímido pero cuando la gente me habla de fútbol soy pesado", admite Abadía, que trabaja para sacar adelante su quesería sin cerrar la puerta a un regreso al fútbol. Su último trabajo fue en la SD Logroñés, donde acabó su etapa como entrenador hace más de un año. Pero Abadía no tira la toalla, es un apasionado del fútbol y seguirá intentando tener una oportunidad. España, mientras tanto, prepara en la capital riojana su penúltimo partido de clasificación para la Eurocopa 2016.

Pregunta: Se le ve concentrado con su negocio, ¿ha renunciado a vivir del fútbol?

Respuesta: Llevo un año sin entrenar y está complicado, somos tantos y cada vez con gente más preparada que es difícil, además no hay dinero y a veces lo que te ofrecen no te da para poder vivir. Pero, sin embargo, creo que es un muy buen momento para el entrenador español, aunque a mi me cuesta mucho relacionarme, ese es mi handicap, porque mis números y mi currículum están bien. Tengo paciencia, siempre me ha costado todo mucho, me ha costado jugar, entrenar...

Pregunta: ¿Qué le ha dado este deporte?

R.: Yo he estado 23 años callado, luego el fútbol hace que me abra y que diga lo que yo pienso, he aprendido a hablar, relacionarme, sobre todo hablando de fútbol.

P.: ¿En qué entrenador se fija? ¿Tiene algún referente?

R.: Yo era muy crítico con mis entrenadores, veía una falta enorme de preparación, y eso ha cambiado mucho. Discutía mucho con David Vidal, y con Fernando Vázquez en el Compostela me tiraba los viajes hablando con él de fútbol, en el avión hablábamos muchísimo. Congenio mucho con él, no en su forma de entender el fútbol, pero sí en como se explicaba, fue el primer entrenador que tuve que asumía sus responsabilidades. Íbamos a Valencia y te decía que íbamos a ir para arriba, y luego te metían cinco. Pero luego él asumía los goles, y al domingo siguiente te ponía otra vez. En ese sentido me siento muy identificado con él.

P.: ¿Y de los actuales?

R.: Yo me vería reflejado en Paco Jémez. Empezó con su filosofía en el Córdoba, ahora en el Rayo y lleva varios años aguantando bien, porque lo transmite bien. La idea es buena, la ejecución depende de los jugadores. Un entrenador asi me encanta, por eso adoro tanto a Guardiola... y si conocieras a Setién, es peor que Guardiola, no te concede nada, lo primero es no perder el balón. Le puedes decir misa, le da igual que esté en el Lugo que en el Bayern.

P.: Hoy juega la selección en Logroño, ¿qué opina de Del Bosque?

R.: Vicente es como el baloncesto yugoslavo, permite un juego libre, pero no es tonto, es muy inteligente. Da un margen para que se exprese el futbolista. Aunque no te lo diga como pueda hacer Guardiola, tiene todo pensado. Él ve como lo puede ver Guardiola. Por ejemplo, si pone a Pedro es porque cree que va a hacer daño. Es como Molowny y Muñoz, que decían que no hacían nada pero luego los futbolistas estaban encantados, porque sabían expresar bien lo que querían. La gran virtud de Del Bosque es que sabe colocar un escenario al futbolista para que sea capaz de tomar decisiones sin miedo a equivocarse, le pone una autopista y luego ya él decidirá.

P.: Usted, con su imagen bregando en el barro de Las Gaunas, pasa por ser uno de los iconos del fútbol ochentero en España, ¿cree que el fútbol ha cambiado para bien o para mal?

R.: El fútbol ha cambiado a mejor, el futbolista es ahora mejor, mucho mejor. Eso sí, ellos tienen una ventaja, los campos son muchísimo mejores. Entonces había muchas dificultades y no podías jugar tan rápido, antes tenías que desarrollar otros recursos, como la habilidad por si te daba un mal bote. Ahora puedes jugar al primer toque pero antes era imposible.

P.: ¿Le gustaría haber jugado en esta época?

R.: Sí, sin duda. Lo primero, por los entrenamientos, son mucho mejores.

P.: Jugador luchador, defensivo, todo brega y pundonor. ¿Le pega esa definición al Abadía futbolista?

R.: Yo era técnico, aunque no tenía habilidad, que es parte de la técnica, pero era muy rápido y muy ofensivo. Tenía la etiqueta de jugador defensivo y me fichaban por eso, pero luego me veían y era diferente. Querían que chocase pero yo no quería, con Simeone hubiera tenido problemas. Fue uno de mis handicaps en mi etapa en el Atlético con Clemente. Ya me lo decía antes Irureta, se enfadaba mucho porque no entraba, no chocaba. Con Aimar, en cambio, me decía que presionara pero que no entrara. Yo tenía una idea de como era de jugador y puede que no fuera lo que transmitiera. Eso sí, si me ponían mal o bien, nunca me quejaba, yo siempre encantado.

P.: ¿Es cierto que Clemente le estuvo siguiendo para la selección?

R.: No estuve cerca de ir a la selección. No tenía recursos físicos y me faltaba algo de gol. Yo llegaba mucho arriba pero me preocupaba tanto del juego que me olvidaba de mí, era muy responsable.

P.: Después de la época más gloriosa de su historia ¿cómo ve el relevo en la selección?

R.: Yo creo que volveremos a ganar, pero tenemos que encontrar a un Casillas y a un Xavi que se conviertan en líderes, pero no que los nombremos, que por sí mismos se conviertan en líderes.

P.: ¿Como ve a Thiago Alcántara? regresa a la selección y hay muchas esperanzas puestas en él.

R.: A Thiago lo veo como a Iniesta, es muy bueno pero no lo veo como un líder, aunque todavía es pronto para decirlo, es muy joven.

P.: ¿Qué jugadores le sorprendieron en su época?

R.: Como compañeros me sorprendió Quique Setién o Madina, que estaba muy poco valorado, pero me parecía un jugador impresionante. También Donato, que fue un jugadorazo. Pero sobre todo Nacho. Hizo dos años en el Compostela en los que hacía todo con la gorra. No he visto a una persona hacer tanto y tan bien como a ese jugador. Fabiano era bueno, pero Nacho era mentalmente más fuerte, tenía una personalidad tremenda, resistente, rápido... si había que ponerle un pero es que no iba bien de cabeza.

P.: ¿Y como rivales?

R.: Me fastidiaban mucho los futbolistas a los que no les podía ganar la espalda. Lopez Rekarte, que era potente y con las piernas como Chendo, o el 'Nanu' Soler, que me costaba mucho, no se me daba nada bien. Aunque hubo uno, por encima de todos, el francés Tigana, del Girondins, sin duda fue el que más me llamó la atención, me recodaba mucho a Iniesta.

P.: ¿Cómo ve a Iniesta?

R.: Siempre estoy enfadado porque creo que puede hacer mucho más pero nunca muestra que quiere ser el mejor y en eso me recuerda a Tigana, que estaba en un segundo plano con Platini. Con un poco más de ambición, Iniesta podría haber sido el mejor jugador, no solo de España, sino del mundo.

Apasionado en su discurso sobre su manera de ver el fútbol dejamos a Abadía, un enamorado de este deporte que confiesa que no irá a ver a España a Las Gaunas porque tiene que atender su negocio. La misma pasión que le puso al fútbol se la pone ahora a su quesería, su club particular: "si no, esto no sale adelante, yo soy así. Eso sí, aunque ahora no veo mucho, siempre que puedo intento ver todo el fútbol posible".