El jefe de los Mossos y los presidentes de ANC y Omnium han declarado este viernes en la Audiencia Nacional, como investigados por un presunto delito de sedición. Los tres han salido sin medidas cautelares aunque la fiscalía ha aportado nuevas pruebas por lo que tendrán que volver a declarar.
El major de los Mossos, Josep Lluís Trapero, y la intendente Teresa Laplana comparecerán este viernes en la Audiencia Nacional investigados por un delito de sedición por el asedio de la Conselleria de Economía de la Generalitat el pasado 20 de septiembre, mientras las fuerzas de seguridad llevaban a cabo un registro y detenciones en su interior.
Los Mossos han asegurado que los dos mandos aportarán "toda la información sobre las actuaciones que el cuerpo realizó en el dispositivo" para mantener el perímetro de seguridad en el edificio del Govern mientras duraba la actuación del Instituto Armado.
Desde Pineda de Mar, han salido los 400 policías nacionales que estaban alojados en dos hoteles después de que hayan finalizado los contratos con los hoteles.
Los agentes se han despedido de los Mossos que cortaban la calle del hotel.
En la calle, dos grupos se han concentrado: unos que están en contra de su presencia y en el otro lado de la calle, un grupo de personas despide con aplausos a los agentes.
Los policías y guardias civiles que abandonan los hoteles se trasladan a cuarteles y a otros alojamientos de distintos puntos de Cataluña.
Por otro lado, el Ministerio de Interior ha asegurado que emprenderá acciones legales contra quienes atenten contra los derechos de policías y guardias civiles.
El portavoz de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), Juan Fernández, afirma en Las mañanas de RNE que "hay muchos mossos que quieren volver a la Benemérita y que sienten vergüenza de haber traicionado a España". Reconoce que la situación se está reconvirtiendo y que les están llegando muchas muestras de cariño. La masa que ha permanecido silenciosa ahora se mueve para apoyar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, dice.
El mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, tendrá que declarar el próximo viernes en la Audiencia Nacional, investigado por un presunto delito de sedición. También están citados el presidente de la Asamblea Nacional Catalana, el de Òmnium Cultural y la número dos de Trapero. La juez investiga el asedio a la consejería de Economía del pasado 20 de septiembre, mientras la Guardia Civil registraba las instalaciones.
Trapero alegará ante la juez que ha cumplido "estrictamente" las órdenes judiciales y de la Fiscalía en sus actuaciones sobre el referéndum del 1-O.
Por su parte, el presidente de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sànchez, ha denunciado que "el Estado definitivamente ha enloquecido" y ha explicado que está meditando si debe acudir a declarar como investigado ante la Audiencia Nacional.
Agentes uniformados de los Mossos d'Esquadra han empezado a acudir desde las 14:00 horas de este viernes a edificios públicos o de uso público designados como colegio electoral con la orden de cerrar los locales para que no puedan acoger la votación e identificar a las personas que preparen el referéndum independentista del 1-O suspendido por el Tribunal Constitucional. Mientras, en muchas de las escuelas designadas como puntos electorales, grupos de padres, madres, profesores y alumnos tienen previsto pasar la noche en acampadas en el patio y las aulas, tras cenas de hermandad y 'fiestas de pijamas' organizadas para mantener el colegio activo y tratar de impedir la actuación policial ordenada por el TSJC.
