Quién es Carlos Soria, el alpinista de 86 años invitado a La Revuelta
- Con 12 ochomiles a su espalda, se prepara para volver al Manaslu, en el Himalaya
Es un auténtico superhombre, y lo que le queda. A sus 86 años, Carlos Soria acaba de coronar el pico más alto de América, el Aconcagua, y ha batido innumerables récords de longevidad en la alta montaña. Ha ascendido a todos y ha coronado 12 de los 14 ochomiles del mundo, diez de ellos después de cumplir los 60 años, y se está preparando para volver a subir el Manaslu, para lo cual ha pedido a David Broncano que sea su patrocinador a cambio de grabar un par de programas al pie del Himalaya.
Carlos Soria se levanta a las 5:30 de la mañana y a las 7:00 ya está entrenando en el rocódromo, “que luego va mucha gente”. Ha inculcado el amor por la montaña a sus hijas, que también practican el alpinismo y la escalada, y aún a su edad le sobra energía para responder con contundencia a la pregunta clásica de Broncano sobre el sexo: “¿en el último mes? ¡Esta tarde!”
Todos los ochomiles y todos los dedos en su sitio
Con la vitalidad que le caracteriza, el alpinista abulense ha lanzado una pulla a Broncano regalándole una figura de un cóndor del Aconcagua para intentar animarle a olvidar los sustos y volver a la montaña. “Además de intentar hacer las cosas bien, he tenido mucha suerte y mucha gente en el mundo que me quiere”, ha reconocido Carlos Soria sobre la peligrosidad de su disciplina. Y es que su último accidente grave, una fractura abierta de tibia y peroné a 7.400 metros de altitud, pudo haberle costado la vida: “De allí no ha salido nadie vivo”, ha explicado. Pero él, que ha superado los 8.000 metros en los 14 picos más altos del mundo y ha coronado 12 de ellos, ha tenido la fortuna, además, de volver "con todos los dedos de las manos y los pies”, ha celebrado.
A sus 86 años, Carlos Soria acaba de convertirse en el alpinista de mayor edad que ha coronado el Aconcagua, 14 años más que el siguiente. Una hazaña que para él no es más que una mera preparación para intentar volver al Manaslu, en el Himalaya, y celebrar el 50º aniversario de la primera expedición española. Aunque para ello tendrá que encontrar patrocinadores que costeen los 125.000 euros que necesita, y ha pedido a David Broncano que le ayude económicamente: “a ver si te vienes conmigo y hacemos un par de programas allí”. ¿Accederá el presentador a semejante invitación y desafío?
El alpinista octogenario que no conoce límites, Carlos Soria
Carlos Soria Fontán nació en 1939 en Ávila y, desde los 11 hasta que se jubiló a los 65 trabajó toda su vida como tapicero. Aunque nunca ha sido alpinista profesional, desde los 14 años se enamoró de la montaña en la sierra de Guadarrama, y ya a los 21 se adentró en la escalada y el alpinismo de alta montaña. Su primera expedición de gran dificultad fue la cara oeste de Aiguille du Dru, en el Mont Blanc de los Alpes franceses, en 1962. Posteriormente, participó también en la primera expedición española del Elbrús de Rusia, la montaña más alta de Europa, y el Denali de Alaska, la más alta de América del Norte, con 5.642 y 6.194 metros, en 1968 y 1971 respectivamente.
Sin embargo, su mayor actividad montañera llegó a partir de sus 50 años y, sobre todo, a partir de su jubilación. Con 51 coronó su primer ochomil, el Nanga Parbat de Pakistán, y con 55 conquistó el Gasherbrum II, entre China y Pakistán. Lo más llamativo de la carrera de Carlos Soria es que, desde que cumplió los 60 años, ha ascendido un total de 11 ochomiles, contando con el Shisha Pangma del Tíbet. Entre las más conocidas están Everest, K2, Lhotse y Kanchenjunga, las cuatro más altas del mundo, y la más peligrosa, la que intentó subir este invierno Alex Txikon, el Annapurna, a sus 77 años.
En 2023, el abulense sufrió un grave accidente cuando trataba de subir el Dhaulagiri, en el Himalaya, portando las cenizas de su amigo Salvador Rivas Martínez. Una fractura de tibia y peroné que le obligó a pasar en dos ocasiones por el quirófano y que habría supuesto el fin de cualquier actividad deportiva para una persona de, entonces, 84 años. Además, tiene una prótesis en la rodilla izquierda, está operado de cataratas y a principio de 2025 fue intervenido de una hernia inguinal. Pero Carlos Soria no es una persona normal y, apenas un mes después coronó el Aconcagua, la montaña más alta de América con 6.962 metros.