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Elena Francis, ¿quién era la voz del consultorio de sexo más famoso de España?

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El 'shock' de la verdad sobre Elena Francis
El 'shock' de la verdad sobre Elena Francis

¿En algún momento de tu vida te has preguntado qué pasaría “si supieran lo que hago”? Esa fue la pregunta que, en 1984, Mercedes Milá lanzó a la persona que desde los años 60 se transmutó en Elena Francis para resolver, desde una mirada tremendamente conservador y moralista, los problemas sexuales, amatorios y de violencia de género que sufrían millones de mujeres en España. “Yo no era más que una pequeña pieza en un gran engranaje”, contestaba.

Durante más de 30 años todo un país había escuchado su voz al otro lado del transistor, pero nadie la había visto jamás. El consultorio de Elena Francis, se difundió por las ondas radiofónicas a toda España, entre los años 1947 y 1984. En todo ese tiempo, un extraño pacto de silencio mantuvo en secreto la identidad de aquella “mujer” que radió unas 60.000 cartas de las más de un millón que recibió el programa. Más de tres décadas, primero en las ondas de la Cadena SER y más tarde en las de Radio Nacional de España, en las que Francis aconsejaba a todas esas mujeres que se dirigían a ella con la idea de solucionar los múltiples problemas a los que se enfrentaban cada día.

El consultorio que se difundió por las ondas radiofónicas a toda España, entre los años 1947 y 1984

El consultorio que se difundió por las ondas radiofónicas a toda España, entre los años 1947 y 1984

Pero bajo esa apariencia de “madre” protectora y “guía” espiritual femenina se escondía uno de los grandes instrumentos propagandísticos del franquismo. Una herramienta que marcó una pauta de conducta en la toma de decisiones sobre distintos asuntos de la vida pública y doméstica de las españolas de acuerdo con los principios morales y religiosos del régimen.

El fenómeno que desató este consultorio se aborda en Elena Francis, la primera influencer (2023), un documental que podrá verse, desde este 8 de marzo, en La 2 y que se incorpora al catálogo de RTVE Play. El programa cuenta con la colaboración de locutoras y periodistas como Pepa Fernández, Mara Torres, Macarena Berlín o Nieves Herrero. Todas ellas analizan las luces y las muchas sombras de aquella consejera sexual de las ondas españolas, un personaje ficticio al que dieron forma diferentes personas a lo largo de su emisión en antena.

¿Quién era realmente Elena Francis?

Cuando el misterio se desveló en televisión, en el programa Buenas noches que a principios de los 80 presentaba una afiladísima Mercedes Milá, la reacción del público pudo ser parecida a la del personaje de Herminia en aquel capítulo de Cuéntame cómo pasó en el que, sentada a la mesa, junto a Merces y Antonio, grito: “¡Es un hombre!”. Estupefacta comprendía entonces el engaño. “Tantos años como llevo escuchando a esta señora y ahora resulta que ¡ni es una señora ni es nada!”, clamaba la abuela de los Alcantará.

El hombre que asumía la responsabilidad del fraude aquel 16 de febrero de 1984, frente a media España, era Juan Soto Viñolo, un periodista que insistía en ser uno de tantos. “Trabajaba por encargo, contestaba aquellas cartas según un patrón, tenía muy asumido el papel del anonimato, de servicio”, se justifica en la entrevista. Un hombre, con toda su barba, que decía contestar “de mujer a mujer” y cuyos consejos estaban empapados del moralismo de la época. Su baza más repetida, era, entre otras cosas, la paciencia: Paciencia ante una infidelidad, paciencia ante un marido maltratados, ante una pareja alcohólica o ante un novio celoso. Excesiva paciencia la que recetaba Francis.

'Elena Francis, la primera influencer' en RTVE Play

'Elena Francis, la primera influencer' en RTVE Play

¿Se puede considerar un engaño? ¿Eres capaz de interpretar una filosofía de mujer desde tu cabeza de hombre?”, le apelaba de nuevo Milá. Soto Viñolo, acorralado, solo pudo contestar: “Gracias a Elena Francis soy menos machista de lo que la sociedad española cree. Me ha dado muchas vivencias y una interpretación muy humana de la mujer”. Lo cierto es que, detrás de Soto Viñolo, moviendo los hilos y supervisando las respuestas que se daban estaba un equipo formado, fundamentalmente, por sacerdotes y psicólogos, quienes censuraban aquellas que chocaban con la moral imperante en aquellos años del franquismo.

Un engaño para vender cosmética

Aunque el empuje principal venía de dos personas llamadas José Fradera Butsems y Francisca Elena Bes Calvet, propietarios del Instituto y Laboratorio de Belleza Francis, que comercializaban una serie de productos cosméticos dirigidos a la mujer. El marketing antes del marketing era este. Una emisión radiofónica que, en verdad, era un anuncio. El nombre de Elena Francis no era sino un guiño hacia su copropietaria. En un principio, el programa se nutría de miniespacios como el de la biografía de un santo o de algún personaje del que pudiera alabarse su ejemplaridad.

Para poner voz a Francis, las emisoras contrataba a varios guionistas y locutores y en especial a quien personificaba a la misteriosa Elena Francis. En 1984, en pleno gobierno socialista y con el auge de los derechos de la mujer, era ridículo y anacrónico mantener un programa con un consultorio femenino tan retrógrado. Elena Francis "murió" definitivamente sin que los oyentes supieran quién era realmente aquella señora. La influencia del programa trascendió hasta convertirse en un fenómeno de masas.