David Romero: "No me da vergüenza haber triunfado con 42 años"
- El catalánobtiene el Desplante masculino del LXI Festival Internacional del Cante de Las Minas
- “Es un reconocimiento a toda mi carrera anterior, a todo lo que llevo caminado año tras año y a tantos intentos y fracasos”
David Romero comenzó en la que sería la pasión de su vida de forma casual. Sus padres se reunían con peñas flamencas y ahí fue donde “automáticamente se fue introduciendo en mi mente el cante flamenco”. Con cuatro años comenzó a bailar la sevillana “viendo a las chicas que bailaban allí”. Derrochaba talento por lo que sus padres le apuntaron a clase y a los 14 años obtendría su primer trabajo profesional para no volverse a bajar nunca más de las tablas. A sus 42 años ha puesto la escena catalana en los más alto al alzarse como “la nueva figura de un patrimonio inmaterial de la Humanidad” tras convertirse en el mejor bailaor español. “Era algo tan inesperado, tan soñado y tan deseado que verme de repente con la realidad era algo increíble.
Años después, regresa a aquella ciudad que le vio crecer y dar sus primeros pasos. La cual abandonó para cumplir un sueño y ahora regresa con el premio Desplante 2022 del Festival Internacional del Cante de las Minas bajo el brazo. David Romero estará en emblemático Tablao Cordobés de Las Ramblas hasta el cuatro de septiembre.
Un bailaor en plena madurez
Cuando tienes talento y pasión, la edad no es un impedimento solo un número, sino que se lo digan a David Romero. El catalán ha obtenido el premio Desplante a los 42 años, una cifra que lleva con orgullo. “No me lo me da vergüenza haber triunfado con 42. La verdad es que incluso lo agradezco porque este tipo de concursos generalmente suelen despuntar de alguna forma la gente más joven”. Sin embargo, gracias a su templanza y su experiencia a la hora de defender su propuesta le han llevado a la cima. “Es un reconocimiento a toda mi carrera anterior, a todo lo que llevo caminado año tras año y a tantos intentos y fracasos”.
Su propuesta para el certamen
Como si se tratase de un puzle, David Romero ha ido uniendo todas las piezas para crear una actuación perfecta con la que coronarse como mejor bailaor de España. Tras superar la semifinal Superó la semifinal con una “solea” y en la final se coronó con el taranto, “un palo flamenco tradicional de las minas de Almería”. El bailaor quiso innovar y renovar estética a este palo, “porque estructuralmente un taranto al final es un palo de flamenco ortodoxo que lleva sus marcas estipuladas. Para su coreografía empleó “una estética limpia y fina”. La forma se refleja completamente en el estilo de baile y también la estética del vestuario, el cual fue el centro de todas las miradas. El catalán vistió unos zajones combinados con unas botas originales diseñadas en una zapatería de flamenco en la capital.