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Literatura

Así es la mejor biblioteca pública del mundo

Noticia Página Dos

  • Página Dos visita la la Deichman Bjørvika de Oslo, galardonada por la Federación Internacional de Bibliotecarios y Bibliotecas
  • Cuenta con cine, auditorio, sala de prensa, cafetería y restaurante
  • Se inauguró en 2020, tiene un fondo de 450.000 ejemplares y espera recibir dos millones de visitantes año

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Así es la mejor biblioteca pública del mundo

Borges dijo que imaginaba el paraíso como algo parecido a una biblioteca; Neil Gaiman argumenta que Internet te puede ofrecer cien mil respuestas, pero un bibliotecario te dará la exacta. Precisamente el fundador del buscador más usado del mundo, Sergey Brin, explica que prefiere investigar empleando libros que con su propia invención, Google. A todos nos gusta encontrar, pero los bibliotecarios —como los científicos y los filósofos— escogen un oficio en el que disfrutan buscando.

Página Dos viajó hasta Oslo para charlar con Knut Skansen, director de la biblioteca Deichman, considerada el equipamiento público de lectura más sobresaliente del mundo. Él lidera a un equipo de 300 profesionales repartido en seis plantas y 13.500 metros cuadrados. En el edificio, cerca de la Ópera de Oslo y la Estación Central, abunda una preciosa luz natural nórdica. En la Deichman se puede ver películas en el auditorio, grabar podcasts, aprender a tocar un piano, usar impresoras 3D, confeccionar un vestido con las máquinas de coser o, por supuesto, disfrutar de la lectura de uno de los 450.000 títulos del fondo.

En estos meses de pandemia el aforo máximo es de mil personas diarias, frente a las tres mil que se espera en un futuro. Skansen (que conversó con Página Dos en un perfecto español) cree que se debe superar esa antigua idea de la biblioteca como un almacén, porque en realidad es un punto de encuentro y aprendizaje de una comunidad. Él ve a los bibliotecarios como anfitriones que deben ayudar y orientar a los visitantes a intuir qué les puede gustar más. La prueba del éxito de este enfoque es que en los últimos siete años las bibliotecas públicas noruegas han registrado un aumento de usuarios de un 40%. Hay una alta cifra de visitantes de las siete de la tarde a las once de la noche, cuando hay vigilancia pero no personal, y el usuario se autogestiona ayudado por la tecnología del centro.

La biblioteca puede hacer las veces de hogar, y tiene la misión más sagrada de todas: crear y fidelizar lectores. «Son plataformas democráticas para el debate y la cultura pública».

Con su apertura en 2020 Deichman pasa a formar parte del exclusivo club de las bibliotecas más populares del mundo: la del Trinity College en Dublín, la General Histórica de la Universidad de Salamanca, el Real Gabinete Portugués de Río de Janeiro, la austríaca Abadía de Admont, la Palafoxiana en México o una de las más cinematográficas, la de Nueva York. Todas ellas catedrales del saber, que sin embargo no pueden competir en encanto e importancia con las pequeñas bibliotecas de barrio, las rurales, las de los hospitales, las móviles y las improvisadas, que acercan la lectura a todos los rincones del mundo.