Las demandas de los famosos: de las Kardashian a los Beatles
- Los motivos son muy variados, desde compartir nombre con otra famosa a la celebración de un gol
¡Lo que les gusta a los famosos una demanda! Y los motivos, muy variados. El nombre de la hija mayor de Beyoncé, una modelo parecida a Ariana Grande, compartir nombre con otra famosa, o la celebración de un gol son algunos de los motivos que les han llevado a los juzgados.
Beyoncé ha iniciado una batalla judicial contra una empresa de bodas que ha usado el nombre de su hija mayor, Blue Ivy. La cantante no permite que nadie utilice ese nombre porque considera que su pequeña es un icono cultural. La empresa, en cambio, argumenta que la marca se creó cuatro años antes del nacimiento de la menor.
Algo parecido le pasa a Ariana Grande. Ha denunciado a una marca de ropa por nueve millones de euros por contratar a una modelo que se parece mucho a ella. Considera que se han aprovechado de su fama e influencia para lucrarse.
Las Kardashian también tienen líos legales. La hermana manor, Kylie Jenner no podrá registrar su nombre para vender cosméticos y moda debido a la demanda que le ha interpuesto Kylie Minogue. Dice que ella ya lo utilizaba antes para promocionar sus espectáculos y que eso confunde a la gente. Añade que ella es toda una artista internacional y define a la otra Kylie como “un personaje secundario de un reality-show”.
Además, su hermana Kim la lio al llamar “kimono” a su línea de ropa interior reductora. En Japón consideran que es una apropiación cultural y Kim ha tenido que dar un paso atrás.
Está claro que se puede registrar todo. El futbolista del Real Madrid Gareth Bale ha patentado su famoso “once de corazones”. Un símbolo en forma de corazón que dibuja con las manos cada vez que mete un gol. Es una manera de dedicárselo a su mujer y a sus hijas.
Los Beatles también defiendes sus derechos y su identidad, y por eso no han dejado que una marca holandesa de sillas de ruedas utilice la palabra mágica de los cuatro de Liverpool para vender estos productos.
La empresa que gestiona el patrimonio de Prince quiere patentar el color púrpura para poder reclamar los derechos por el uso de este pigmento. Este color era el favorito del cantante y formaba parte de su identidad.
Pero el rey del rock también tiene lo suyo. Es el famoso que más dinero sigue generando después de su muerte. Tiene decenas de productos asociados a su nombre como marca, menos el “zumo de Elvis”, empresa de cervezas fundada tras el fallecimiento del cantante. Por tanto, tiene libertad para usar su reputación.
