Enlaces accesibilidad

El árbol de Gernika

  • La tradición dicta que el próximo Lehendakari asumirá su cargo ante este roble.
  • Su sombra se proyecta desde el actual estatuto de autonomía hasta la edad media.

Por
Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - El árbol de Gernika

Sea cual sea el resultado de las elecciones de este domingo en Euskadi, el roble observará la toma de posesión del Lehendakari. Este símbolo reunirá aquí de forma extraordinaria aquí a los diputados elegidos en las urnas, cuando hayan investido antes al próximo jefe del Ejecutivo autonómico en la sede del Parlamento Vasco, en Vitoria-Gasteiz. La Casa de Juntas de Gernika custodia el árbol y su historia. La del roble actual, que apenas ha cumplido aún una legislatura. Y la de su bisabuelo, el tricentenario, que se conserva en estos jardines ya como un tronco seco, entre las columnas de un templete circular.

Ana Alberdi junto al árbol de Gernika

Ana Alberdi junto al árbol de Gernika rne

“No es el primero sino el más antiguo que ha llegado hasta nosotros”, explica ante el monumento Ana Alberdi, técnico de la Casa de Juntas. “La siguiente generación de ese árbol es el ejemplar que sobrevivió intacto al bombardeo y que permaneció hasta 2004. Su sucesor tuvo problemas de salud y fue sustituido por el actual, que tiene veinte años y está aquí desde hace cinco”. Antes que todos ellos hubo aquí un árbol de Gernika que vio a Fernando el Católico jurar los fueros de Vizcaya el 30 de julio de 1476. En la solemnidad y el recogimiento de la sala de plenos hay destacado un cuadro que representa aquel instante.

Fernando el Católico jurando los fueros de Vizcaya en 1476

Fernando el Católico jurando los fueros de Vizcaya en 1476 rne

“Estamos asistiendo al momento posterior del juramento”, precisa Alberdi “Fernando el Católico, como señor de Vizcaya que era por ser rey consorte de Castilla, jura los fueros y uno de los vizcaínos le besa la mano reconociendo su autoridad”. También se juraron los fueros en Guipúzcoa y en Álava, además de en Vizcaya —los tres territorios históricos que componen hoy la Comunidad Autónoma del País Vasco—. Pero, con el paso del tiempo, el árbol de Gernika va cargándose de significado para el conjunto de Euskadi.

La casa de juntas de Gernika

La casa de juntas de Gernika rne

Aún existe una placa en la calle montera de Madrid que recuerda el año de 1856 en el que el bardo guipuzcoano José María Iparraguirre estrenó en el café San Luis su canción “Gernikako arbola”. Prácticamente desde entonces se tomó como un himno no oficial. Era la época del romanticismo y la abolición de los fueros. Ya en los primeros meses de la guerra civil, José Antonio Aguirre escoge el árbol de Gernika para asumir su cargo de Lehendakari. Y en nuestro periodo democrático se aprueba en referéndum el estatuto de autonomía vigente en Euskadi, que se elabora y se firma en este lugar, y que recibe ese nombre de Estatuto de Gernika. A Aguirre bajo el roble le han seguido desde entonces Garaikoetxea, Ardanza, Ibarretxe, López y Urkullu.

La casa de juntas de Gernika

La casa de juntas de Gernika rne

“Las raíces, si no se renuevan, pueden ser un elemento que no te permita avanzar”, concluye Alberdi. “El roble es el símbolo de cómo tenemos que construir nuestra realidad institucional y de cómo tenemos que ir acomodándola a los nuevos tiempos”.