Els Joglars parodia la sobreprotección actual de los niños en 'V.I.P.'
- La compañía ironiza sobre la educación que crea auténticos tiranos
- En el Teatro María Guerrero de Madrid hasta el 26 de octubre
Niños que patean el asiento del autobús ante la mirada despreocupada de sus padres. Otros que en la cola del supermercado no paran de llorar y gritar hasta que sus padres les compran lo que quieren. Y algunos que son ruidosos comensales en la mesa de al lado en un restaurante y que golpean sin cesar sus cubiertos contra el plato, algo que sus padres parecen no escuchar.
Estos son solo algunos ejemplos de la educación complaciente y permisiva que se le da hoy en día a muchos niños y que a veces les puede convertir en auténticos tiranos.
A eso está dedicado el nuevo espectáculo de Els Joglars, con Ramon Fontserè al frente tras tomar el testigo de Albert Boadella, a todos esos niños que se han convertido en los reyes de la casa, que son auténticos V.I.P.
"Con V.I.P. pretendemos que se haga una reflexión sobre si con la sobreprotección, la extremada atención y demasiados miramientos los padres, la sociedad, están creando pequeños tiranos o monstruos", ha explicado Fontserè en Las mañanas de RNE.
La idea surgió de un episodio real vivido por el escritor Josep Pla que tuvo que quedarse al cuidado de una niña de dos años, aparentemente dulce, y cuando el escritor la subió en sus rodillas la niña se le acercó a la cara y sin más le mordió. Algo ante lo que Pla solo fue capaz de reprimir un grito.
"Yo soy de una generación en la que los padres y maestros tenían autoridad y a todo eso ahora se le ha dado la vuelta", continúa Fontserè. "Le hemos cogido miedo a palabras como autoridad, fracaso o esfuerzo", apunta Martina Cabanas, ayudante de dirección y encargada del espacio escénico del montaje.
Una obra con cinco actores que interpretan a más de 20 personajes. "El teatro es juego, por lo tanto, jugamos a hacer diferentes personajes y esto es muy emocionante y muy atractivo", asegura el actor y director de escena.
La marcha turca suena en muchos momentos de la obra, en la que también se oyen obras de Vivaldi, de Mahler o ritmo de timbales . "El espectáculo tiene un lenguaje propio, un poco especial, pero la gente entra en él perfectamente porque es cómico y con muchas risas".
V.I.P. se puede ver en el Teatro María Guerrero de Madrid hasta el 26 de octubre. En noviembre Els Joglars sacará a escena de nuevo El Coloquio de los perros e irá alternando ambas obras durante los dos últimos meses del año.