Que hoy se pare el mundo (Los Brujos)

Es 1989 el comienzo de una variopinta década en la que, bajo el nombre de Los Brujos, Miguel Ángel Villanueva y los suyos grabarán varios trabajos en discográficas independientes. Uno de ellos, Sin ver el sol (1998), es considerado una obra maestra del pop.

De las sesiones de grabación de aquel disco, se publica más tarde como single el tema Que hoy se pare el mundo. Salió a la venta en una edición limitada de apenas 200 copias. La canción es una verdadera muestra del pop melódico español, sobre todo de ese envuelto en el catastrofismo amoroso.