Esther García recibe el Donostia de manos de los hermanos Almodóvar en la gala inaugural del Festival de San Sebastián
- La productora trabaja con Agustín y Pedro Almodóvar en El Deseo
- Walter Salles ha recibido el Gran Premio Fipresci 2025 a la mejor película del año por Aún estoy aquí
La productora Esther García ha recibido este viernes el premio Donostia en la gala inaugural de la edición 73 del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
García ha recogido el galardón de manos de los hermanos Agustín y Pedro Almodóvar, con los que trabaja en la productora El Deseo.
"Es una noche muy especial, porque además de que tenemos a Marisa Paredes (protagonista del cartel de esta edición) como la diosa que ilumina nuestros corazones vamos a premiar a Esther. La nuestra es una compañía familiar y de esa familia, indudablemente, la madre es Esther", ha dicho el director manchego, que ha terminado su discurso con un "viva el Festival de San Sebastián, viva Esther García y viva Palestina libre".
La productora ha hecho, por su parte, un emotivo discurso en el que ha reconocido que desde que le anunciaron el premio vive "entre la risa y el llanto, entre la alegría y la responsabilidad, como si estuviera dentro de una fábula".
Además, ha tenido un recuerdo para su padre, cuya "enorme austeridad, creatividad y alegría" fue suficiente para ofrecer "con muy pocos medios" un "mundo pleno a sus cinco hijos". "Es el gran referente en mi vida", ha dicho, junto a mujeres del cine como Pilar Miró, Josefina Molina, Patricia Ferreira y Cristina Güite. "Éramos muy pocas, pero peleamos y hemos seguido buscando espacio. En esta amada profesión queda mucho por hacer. Ni un paso atrás, compañeras", ha recalcado Esther García entre aplausos.
La actriz francesa Juliette Binoche también ha dedicado unas palabras a Marisa Paredes (fallecida en 2024), a la que ha definido como una "defensora de los derechos humanos", y tras agradecer al festival la oportunidad de presentar en él su primera película como realizadora, In-I In Motion, ha reconocido que "al igual que Marisa, yo soñaba con ser actriz y lo conseguí, pero nunca pensé que podría hacer una película como directora, parecía un sueño demasiado grande".
Por ello, ha destacado que "necesitamos sueños, sueños fuertes y sinceros, sueños de transformación", tras lo cual se ha unido "a quienes sueñan con poner fin a las masacres en Palestina, sueñan con terminar con el dolor y la crueldad", al tiempo que también ha expresado su deseo de que se libere a los israelíes secuestrados. "Ahora necesitamos un cambio. Ahora somos capaces de cambiar. No somos simples criaturas, somos creadores, así que despertemos", ha dicho.
Por otra parte, el director Walter Salles ha recibido el Gran Premio Fipresci 2025 a la mejor película del año por Aún estoy aquí, un reconocimiento que ha considerado "particularmente conmovedor" ya que lo recibe "en el país de Buñuel y de la inolvidable Marisa Paredes".
Apoyo a Palestina dentro y fuera de la gala en el Kursaal
La ceremonia de inauguración del festival ha estado plagada de referencias a Gaza. El apoyo a la población palestina ha tenido su lugar dentro y fuera de la gala en el Kursaal, a cuyas puertas un grupo de unos 200 manifestantes ha acompañado la llegada por la alfombra roja de los asistentes, entre quienes se encontraban los ministros para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López; Cultura, Ernest Urtasun; y Trabajo, Yolanda Díaz.
Estos dos últimos, al igual que el director del Festival José Luis Rebordinos, y el cineasta Pedro Almodóvar, llevaban además unas insignias reivindicativas en sus trajes. Tras la gala, se ha proyectado la película que abre el festival, la argentina 27 noches, de Daniel Hendler.
La gala ha estado presentada por tres actrices mayores de 50 años, como ellas mismas han subrayado en varias ocasiones con humor y en un tono reivindicativo: Silvia Abril, Toni Acosta e Itziar Ituño.
