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La ofensiva rusa sobre Járkov, un ataque limitado que obliga a Ucrania a distribuir sus fuerzas

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Guerra en Ucrania: Un tanque ucraniano dispara contra posiciones rusas en la región de Járkov.
Un tanque ucraniano dispara contra posiciones rusas en la región de Járkov. REUTERS/Valentyn Ogirenko

La ofensiva lanzada por Rusia el pasado lunes en la región de Járkov, al noreste de Ucrania, ha pillado por sorpresa a los ucranianos y les está obligando a distribuir fuerzas que han de retirar de otros frentes, como el de Donetsk. Los rusos han logrado romper el frente y atravesar la frontera, y aseguran haber tomado una decena localidades. Los combates más sangrientos parecen estar teniendo lugar en torno a Vovchansk.

Este viernes, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha asegurado que la situación está "estabilizada", y que las fuerzas rusas habrían avanzado unos 10 kilómetros dentro de la región. El jefe de las Fuerzas Armadas ucranianas, Oleksandr Sirski, ha reconocido que la ofensiva rusa tuvo lugar antes de lo previsto por Kiev y ha expandido el frente de guerra en otros 70 kilómetros "para intentar obligarnos a utilizar un número adicional de brigadas de la reserva".

Ofensiva "limitada" para obligar a Ucrania a distribuir esfuerzos

Los soldados rusos han vuelto a cruzar la frontera y a poner el pie en territorios de los que fueron expulsados en mayo de 2022, cuando llegaron a asediar la ciudad de Járkov, capital de la región del mismo nombre y segunda población más importante de Ucrania.

La incursión terrestre ha llegado apoyada por artillería con el uso, según denuncia Kiev, de bombas de racimo (una munición prohibida por la legislación internacional) y con fuego aéreo con bombas planeadoras que lanzan aviones desde el mismo territorio ruso.

El gobierno ucraniano acusa a las tropas rusas de haber ejecutado y secuestrado a civiles en Vovchansk, una acusación que no puede ser verificada por fuentes independientes.

Fran Sevilla, enviado especial de RNE, ha comprobado que miles de personas, unas 14.000, han abandonado localidades cercanas al frente y la propia capital.

Pese a lo rápido del avance, no se trata de un ataque masivo, y el objetivo no parece ser tomar la capital regional.

Así lo aseguró este pasado jueves el general Christopher Cavoli, comandante supremo de la OTAN en Europa. "Los rusos no tienen los números necesarios para una penetración estratégica", aseguró en Bruselas. "Más aún, no tienen la habilidad y las capacidades necesarias para hacerlo, para operar en la escala necesaria para explotar cualquier ruptura como ventaja estratégica", añadió.

Cavoli reconoció que los rusos podrían conseguir avances "locales", pero esperaba que los ucranianos mantuvieran sus líneas.

"La ofensiva parece tener más por objeto diversificar los esfuerzos de Ucrania, para debilitarla, que una intención real de avanzar en esa zona y conquistar Járkov", explicaba esta semana Enrique Ayala, analista de la Fundación Alternativas y general de Brigada en la reserva, en una entrevista con Víctor García Guerrero (TVE).

El objetivo estratégico de Rusia sigue estando más al sur, en la región del Donbás, y concretamente en la localidad de Kramatorsk. "El objetivo es Kramatorsk, si cae caerá toda la provincia de Donetsk y el Donbás entero, que desde el principio es el objetivo de Rusia", consideraba Ayala.

Francisco Gan Pampols, teniente General retirado del Ejército de Tierra, coincide en que la ofensiva rusa es "muy limitada" y asegura que tiene una "triple finalidad". "Aleja la capacidad de observación y de fuego directo de Ucrania sobre la ciudad de Bélgorod [en Rusia]. También, se coloca a distancia de tiro de artillería de Járkov. Y una tercera, que es demostrar que Rusia sigue teniendo fuerza para poder retomar la iniciativa en cualquier parte del frente", ha declarado este viernes en Las mañanas de RNE.

"Al margen de la intensidad de los combates, no hay la cantidad de fuerzas necesarias para realizar una acción sobre Járkov. - continúa Gan Pampols - Está haciéndolo para que Ucrania tenga que emplear fuerzas que ahora tiene comprometidas en el sur, en la zona de Donetsk, fundamentalmente: Avdiivka, Bajmut... Tiene que moverlas, desplazarlas para ocupar fortificaciones en esa zona y detener el avance. Así que facilita su maniobra [la de Rusia] al sur".

Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - Francisco Gan Pampols: "La ofensiva rusa en Járkov es limitada" - Escuchar ahora

"Es una ofensiva limitada, como demuestra que los rusos hayan volado muchos puentes que necesitarían para seguir adelante", confirma a RTVE.es Juan Rodríguez Garat, almirante retirado de la Armada.

Sin embargo, Rodríguez Garat no cree que el objetivo principal sea distraer fuerzas ucranianas. "A cambio, Rusia tiene que desplegar fuerzas suyas, creando un frente que antes no tenía que defender porque Ucrania no podía cruzar la frontera". 

"Es, más bien, una respuesta política a los ataques de grupos rusos a Bélgorod, sin valor militar pero ofensivos para Putin - continúa el exalmirante - Si Rusia viera hueco, trataría de aprovecharlo, pero creo que son conscientes de que Járkov está por encima de sus posibilidades actuales".

Así parece confirmarlo el propio presidente ruso, quien ha afirmado que el objetivo de su Ejército no es tomar Járkov, sino crear un cinturón de seguridad que impida los ataques ucranianos a las regiones rusas fronterizas, que en las últimas semanas han causado daños y víctimas en Bélgorod, Kursk y Briansk.

Zelenski usa la ofensiva para pedir ayuda urgente

El empuje ruso ha llegado cuando Ucrania afronta el desgaste de más de dos años de guerra, con falta de personal y munición, consecuencia, entre otras cosas, del retraso en el envío de armas por parte de EE.UU.

Ante la situación creada en Járkov, el presidente ucraniano ha anulado todos sus viajes previstos al extranjero, entre ellos una visita a España.

"Es un momento crítico en el sentido de que hay una parte de lo que hace Zelenski, que es usar esta acción para demostrar que necesita con más urgencia e intensidad la ayuda", apunta Francisco Gan Pampols. "Quiere demostrar que si hay que ayudar a Ucrania este es el momento, especialmente en defensa aérea".

Washington está intentando agilizar la llegada de esas armas, sobre todo de sistemas antiaéreos (concretamente baterías Patriot) tras recibir la aprobación del Congreso. El secretario de Estado, Antony Blinken, ha visitado Kiev para dar garantías a Zelenski. Las armas podrían llegar la próxima semana.

Sin embargo, el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW, un centro de análisis estadounidense), apunta que las defensas antiaéreas solo serán efectivas si los países suministradores permiten a Ucrania usarlas para interceptar a los aviones dentro del propio territorio ruso, desde donde están disparando. Hasta ahora, los aliados occidentales han impuesto a Ucrania la limitación de no usar las armas suministradas al otro lado de la frontera con Rusia.