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Radiografía del BNG

El BNG va a por todas con Ana Pontón: de salvar al soberanismo gallego a disputar al PP la Xunta

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Ana Pontón, candidata del BNG a la Presidencia de la Xunta
Ana Pontón, candidata del BNG a la Presidencia de la Xunta EUROPA PRESS

El Bloque Nacionalista Galego (BNG) dio la campanada en las pasadas elecciones autonómicas de Galicia y se colocó como la segunda fuerza más votada, por detrás del todopoderoso PP gallego. En una jornada histórica para el nacionalismo gallego, ascendió hasta el partido líder de la oposición, pasando de seis a 19 representantes en el Parlamento y tocó su techo electoral. Pasó de cuarta a segunda fuerza y triplicó sus escaños.

Fue una noche de total éxito para Ana Pontón, que se presentaba por segunda vez como candidata. No solo superó al PSdeG-PSOE, sino que se comió literalmente el voto de En Marea, la marca de Podemos que se quedó sin representación en el Parlamento gallego y que cuatro años antes se había colocado como segunda. Pontón repite en las urnas y ahora, a la tercera, va a por más. Quiere hacer historia como la primera mujer en presidir la Xunta de Galicia y augura "aires de cambio".

No hay sondeo que no sitúe al BNG como segunda fuerza más votada, detrás del PP y consolidando ese liderazgo en la izquierda gallega, por delante de los socialistas.

Pero la clave en las elecciones del 18F está en si el PP mantiene su hegemonía en Galicia y firma su quinta mayoría absoluta, esta vez con Alfonso Rueda, o si los 'populares' ganan, pero no consiguen la absoluta con la cifra mágica de los 38 diputados.

Según el promedio de encuestas elaborado por DatosRTVE, el PP seguiría gobernando pero con una mayoría ya no tan aplastante. El CIS plantea incluso un escenario más abierto con la posibilidad de que Rueda pierda la mayoría y puedan sumar el BNG con el PSdeG, e incluso con Sumar, si entra en el Parlamento.

Pontón, con esos 19 escaños de 2020, superó la marca en unas elecciones gallegas del histórico del BNG Xosé Manuel Beiras en el año 1997, cuando consiguió por primera vez, con 18 diputados, superar al PSdeG. Ahora el nacionalismo gallego quiere consolidar ese 'sorpasso' que le convirtió en la fuerza hegemónica de la izquierda y en el contrapeso al PP gallego.

El BNG ya gobernó entre 2005 y 2009 con un bipartito entonces pilotado por el PSOE de Emilio Pérez Touriño, pero ahora las tornas han cambiado, intercambiando papeles en relevancia con los socialistas.

La encuesta preelectoral del CIS pone de manifiesto que el BNG es el favorito en cuestiones más relacionadas con la identidad gallega. Y ante la pregunta qué partido es el que mejor representa los intereses de Galicia, el BNG es la formación señalada por el 41% de los encuestados. El porcentaje se dispara al 63% en la pregunta de cuál es el partido que defiende mejor la identidad, la cultura y el idioma gallego.

Pero el BNG y su candidata son conscientes de que para ensanchar su base electoral deben combinar las reivindicaciones soberanistas con un discurso marcado de izquierdas y feminista y en eso Pontón se está empleando para arañar voto del PSOE y a la izquierda del PSOE.

Frente común del nacionalismo gallego contra el PP

En las elecciones de 2012 el BNG sufría una grave crisis en su seno que le hizo perder casi la mitad de sus representantes y quedarse en siete. La formación llegaba tocada tras un periodo de rupturas y escisiones que se adueñaron del nacionalismo.

Xosé Manuel Beiras, referente histórico en el nacionalismo gallego, había dejado el BNG para fundar Anova y se presentó a esos comicios con la marca Alternativa Galega de Esquerda (AGE) junto con IU, llegando a la tercera plaza y dejando al BNG como cuarta fuerza. Esa noche electoral Beiras comparecía junto con una desconocida Yolanda Díaz para celebrar su entrada al Parlamento superando a sus excompañeros del BNG. En las elecciones de 2016 el BNG se hundió aún más hasta los seis escaños.

Poco a poco Pontón, que es además portavoz nacional del BNG, fue reflotando al partido hasta llevarles a la segunda posición hace cuatro años.

De forma más que simbólica, Pontón y Beiras se unen de nuevo ahora para dar más fuerza al proyecto del BNG en estas elecciones del 18 de febrero.

El BNG y Anova se han reconciliado y, de cara al 18F, han firmado un acuerdo de colaboración para que el soberanismo gallego pelee junto con un único objetivo común: echar al PP de la Xunta. Dicho acuerdo recoge esa petición expresa de canalizar los apoyos electorales hacia el Bloque para propiciar el cambio en Galicia, gobernada por el PP en 38 de los 43 años de autonomía.

La decisión de Anova de apoyar al BNG podría hacer mella además en el espacio a la izquierda del PSOE ya que Anova formó parte de la coalición Galicia en Común, la marca de Podemos en 2020, que no consiguió representación en el Parlamento. A su vez ese espacio antes 'morado' se fragmenta más y más ya que en estos comicios Podemos y Sumar concurren por separado, y para rizar más el rizo el exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, llegó a pedir en diciembre el voto para el BNG, antes de decidir Podemos concurrir en solitario.

El BNG aprovechará el lío en el espacio que conformaron 'las mareas' para pescar en ese caladero de votos llamando al voto útil y aprovechando su actual fortaleza como líder de la oposición.

El BNG pide concentrar todo el voto de izquierda y nacionalista

Así, el BNG compite muy unido este 18F y pide concentrar todo el voto de izquierda y nacionalista en esta formación para hacer un frente común contra el PP de Alfonso Rueda.

La candidata ve un escenario "más abierto que nunca" y dice que la posibilidad de cambio es "real". Aunque en campaña el BNG y el PSOE están marcando alguna distancia, hay poca duda de que pactarán si tienen posibilidad de acabar con la hegemonía 'popular' en Galicia. En el Congreso de los Diputados el único diputado del BNG, Néstor Rego, forma parte del bloque parlamentario que sostiene a Pedro Sánchez en el Gobierno.

"Son las elecciones más abiertas de los últimos 15 años. Mucha gente ve que frente al PP hay una alternativa sólida que puede gobernar mejor", ha afirmado Pontón, que en estos primeros días de campaña está siendo muy crítica con el desembarco de líderes nacionales en Galicia, para dejar claro que estos comicios gallegos no son escenario "de batallitas madrileñas".