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Una mandíbula infantil confirma la aparición de 'Homo erectus' hace dos millones de años

  • Según un artículo publicado en Science, es uno de los fósiles más antiguos atribuidos al homínido
  • En el yacimiento también se han hallado los útiles más longevos elaborados con tecnología achelense

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Infografía sobre el hallazgo de una mandíbula infantil en Etiopía
Infografía sobre el hallazgo de una mandíbula infantil en Etiopía

El análisis de una mandíbula infantil hallada en un yacimiento de Etiopía ha confirmado la aparición de Homo erectus. Según un estudio publicado en Science, constituye uno de los fósiles más antiguos atribuidos al homínido, que se habría expandido desde las sabanas Africanas para adentrarse en regiones de gran altitud.

El fósil en cuestión fue descubierto por primera vez en 1981, pero la nueva investigación ha aportado conocimientos adicionales sobre la evolución, migración y capacidad de adaptación de los primeros antepasados humanos. En estos descubrimientos han participado centros como la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de Vigo.

El resto analizado procede concretamente del yacimiento etíope de Garba IV, en el área arqueológica de Melka Kunture, y es la primera vez que este tipo de fósiles aparece junto a herramientas líticas elaboradas con tecnología olduvayense.

La olduvayense fue la primera tecnología desarrollada por la humanidad y se caracterizaba por útiles de pequeño formato. Ahora, el nuevo hallazgo permite corroborar que Homo erectus la usó.

Hallan los útiles achelenses más antiguos

En el yacimiento también se han hallado los útiles más antiguos elaborados con tecnología achelense, de hace unos 1,95 millones de años.

Eso implica unos 200.000 años antes de lo considerado hasta ahora y lo hace prácticamente coincidente con la aparición del Homo erectus en el escenario evolutivo, lo que es de gran trascendencia para la comprensión de la evolución humana.

La tecnología achelense ha perdurado en el registro arqueológico a lo largo de 1,8 millones de años, desde África hasta el sudeste asiático y parte de Europa, lo que hace de ella la más universal de la humanidad, ha destacado por su parte la científica Susana Rubio-Jara.

Las "fundamentales" tierras altas de África oriental

El estudio de la tecnología lítica empleada por Homo erectus en el yacimiento de Garba IV se ha desarrollado a partir del análisis de los restos hallados en los diferentes niveles arqueológicos.

Eso ha permitido comprender la evolución de las variaciones empleadas en la elaboración de herramientas entre el olduvaynse y el achelense, que es “una de las mayores cuestiones pendientes en el estudio de la evolución humana”.

El registro fósil de homínidos está dominado por los descubrimientos en elevaciones bajas y medias del valle del Rift (hasta 1.500 metros sobre el nivel del mar) y en depósitos de las cuevas de Sudáfrica.

Sin embargo, los restos hallados en Melka Kunture está a más de 2.000 metros, lo que demuestra que las tierras altas de África oriental, con un paleoambiente diferente, “son fundamentales” para comprender el comportamiento de los primeros humanos ‘sensu stricto’.

Para la reconstrucción paleoecológica se han identificado las distintas especies de los restos óseos hallados en esos yacimientos, de los que se han podido inferir los ecosistemas a los que estaban adaptados, información que completó con análisis isotópicos de 14 dientes fósiles, y con análisis palinológicos