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Cumbre de la OTAN

Rota se consolida como el pilar marítimo del escudo antimisiles de la OTAN tras 70 años de presencia de EE.UU.

  • España y EE.UU. han pactado ampliar de cuatro a seis los destructores estacionados en la base naval gaditana
  • La localidad estima que la inyección económica rondará los 200 millones anuales | La cumbre de la OTAN, en directo

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Una playa de Rota, con los buques estacionados en la base naval al fondo
Una playa de Rota, con los buques estacionados en la base naval al fondo

El acuerdo entre España y Estados Unidos para ampliar de cuatro a seis los destructores estacionados en Rota, cerrado entre Pedro Sánchez y Joe Biden en vísperas de la cumbre de la OTAN en Madrid, supone la consolidación de la base naval como el pilar marítimo del escudo antimisiles de la OTAN y como el principal destacamento de Washington en territorio español, casi 70 años después de un desembarco que cambió por completo a la localidad gaditana y a toda la comarca.

La instalación de la base naval en Rota fue una de las contrapartidas de los Pactos de Madrid, suscritos en 1953 entre España y Estados Unidos: el régimen dictatorial de Francisco Franco obtenía apoyo económico y reconocimiento internacional para salir de su aislamiento, mientras Washington se aseguraba otro aliado frente a la Unión Soviética, aprovechando su posición geoestratégica para colocar cuatro bases militares.

Dos de ellas, las bases aéreas de Torrejón de Ardoz y Zaragoza, revirtieron a manos españolas y ya solo operan para el Ejército del Aire; otras dos, la aérea de Morón de la Frontera y la naval de Rota, se mantienen como bases de uso compartido. En cualquier caso, ninguna de ellas alcanza la relevancia de la base gaditana, como demuestra el interés de Estados Unidos por ampliar su presencia.

El mayor destacamento estadounidense en suelo español

La base de Rota ocupa cerca de 2.500 hectáreas en el norte de la bahía de Cádiz; el suelo es español y solo ondea la bandera española, ya que está bajo el mando de un vicealmirante de la Armada. España es responsable de la seguridad exterior y allí fondean las seis fragatas de la clase Santa María, que conforman la 41ª escuadrilla de escoltas de la Armada.

Refuerzo del escudo antimisiles - Ver ahora

Sin embargo, el uso de las instalaciones -que incluyen 2.400 metros lineales de muelles y un aeródromo con una pista de 3.700 metros- es compartido y más del 80% se destina al destacamento estadounidense. El Convenio de Cooperación para la Defensa entre España y Estados Unidos, firmado en 1988, establece que Washington puede desplegar hasta 4.250 militares y un millar de civiles, así como 31 aeronaves. En 2012, además, Madrid y Washington acordaron el despliegue de cuatro destructores de la clase Arleight Burke.

Estos barcos están dotados con sistema de radar AEGIS y misiles defensivos -sin carga explosiva- y son esenciales para el 'escudo antimisiles' que la OTAN desplegó a partir de 2010. Este sistema de interceptación de misiles balísticos, que se coordina desde la base aérea de Ramstein, en Alemania, se basa en un radar de alerta temprana ubicado en Turquía y en dos bases de lanzamiento en tierra, ubicadas en Deveselu (Rumanía) y Rezikowo (Polonia), así como en el 60 Escuadrón de Destructores de la Sexta Flota estadounidense, estacionado en Rota.

Pendiente del trámite parlamentario

Los buques estadounidenses patrullan desde el mar Mediterráneo hasta el mar Ártico y completan la capacidad defensiva de un sistema que vuelve a ganar relevancia ante la invasión de Ucrania y la amenaza de Rusia, el viejo enemigo, ahora recuperado, de la Alianza. De ahí el interés de Washington por ampliar su presencia en Rota con dos destructores más, pese a que la petición parte de muchos meses atrás, bajo la presidencia de Donald Trump.

Ahora, tras el pacto cerrado entre los Gobiernos, el acuerdo debe pasar por el Consejo de Ministros y, sobre todo, superar en el Parlamento la modificación del convenio de defensa, un trámite para el que los socios de gobierno y de investidura de Pedro Sánchez ya han mostrado sus reticencias. La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha dejado caer este miércoles, en un corrillo con periodistas, que esa tramitación probablemente no se produzca hasta 2023, toda vez que Estados Unidos, de donde parte la iniciativa, tiene que concretar el calendario del despliegue.

El aumento de la presencia militar de EE.UU. en Rota suscita dudas en Unidas Podemos y los socios de investidura

Por el momento, en Rota están estacionados cuatro destructores (USS Paul Ignatius, USS Ross, USS Porter y USS Roosevelt) y el personal desplegado por Estados Unidos supera las 3.000 personas, entre militares y civiles. Si finalmente se aprueba la llegada de otros destructores, otras 600 personas podrían incorporarse al destacamento.

Expectación en Rota

Un incremento que ya prácticamente celebran en Rota, donde el 60% de la economía local depende de la base naval. "Llevamos ya casi 70 años conviviendo sin ningún problema", contaba este miércoles a Efe su alcalde, José Javier Ruiz Arana, que no duda de los beneficios para el municipio.

"Es una oportunidad porque, al final, no es sólo la presencia de dos barcos más, es el beneficio económico que reporta en muchos ámbitos, desde el alquiler de casas, los contratos de mantenimiento, el consumo en bares, restaurantes y en otros negocios locales", explica.

Rota cuenta con 30.000 habitantes censados y el 10% de esos vecinos son militares, trabajadores civiles y familiares vinculados a la instalación militar. Su alcalde asegura que es difícil calcular el impacto económico de la base, pero la estimación del ayuntamiento ronda los 200 millones de euros al año, una cifra que incluye los sueldos del millar de españoles que trabajan para los estadounidenses en contratas de construcción, mantenimiento y otros servicios.