Enlaces accesibilidad

Hulka, mucho más que la prima de Hulk

  • Se publica la colección de los ochenta, creada por Stan Lee y John Buscema
  • Hulka va a tener su propia serie de televisión en el Universo Marvel

Por
La Huka de John Buscema
La Huka de John Buscema

Entre las series de televisión del Universo Marvel que ha anunciado Disney, uno de los proyectos más esperados es el de Hulka (She-Hulk) porque, aunque el personaje nunca ha sido uno de los top de Marvel, se ha ganado nuestra admiración incondicional gracias a su carácter y a un par de etapas inolvidables, como cuando John Byrne hizo que sustituyera a la Cosa en Los Cuatro Fantásticos o le dio su propia serie (1989)

Ahora, dentro de su imprescindible colección Marvel Limited Edition, Panini y SD Distribuciones nos ofrecen, en dos tomos, la colección donde nació el personaje en 1980: La salvaje Hulka, obra del mismísimo Stan Lee y del dibujante más popular de la década en Marvel: John Buscema.

Ambos nos descubrieron a Jennifer Walters, la prima de Bruce Banner (Hulk), que era una brillante abogada. Cuando la joven recibía un disparo y estaba a punto de morir, Banner se veía obligado a realizar una transfusión improvisada con su sangre, lo que convertiría a Jennifer en Hulka (She-Hulk). Con la diferencia de que ella mantenía su intelecto (frente al Hulk salvaje de la época)

Portada de 'Marvel Limited Edition: La salvaje Hulka

Hulka nació gracias al éxito de la serie televisiva de Hullk

El cambio más significativo de los 70 y 80 en Marvel fue que las mujeres dejaron de ser un objeto decorativo, o meras víctimas para que las salvaran los héroes, gracias a autores como Chris Claremont (La Patrulla X), John Byrne (La Patrulla X, Los Cuatro Fantásticos, Hulka), o Frank Miller (con su Elektra para la colección de Daredevil).

Un cambio que coincidió con el movimiento femenino de la época, que exigía más igualdad en todos los aspectos de la sociedad. Eso desembocé en que, en 1977, Marvel publicó la primera colección larga dedicada a una mujer: La Capitana Marvel.

Pero, además de esos factores, en el nacimiento de Hulka fue fundamental el éxito de la serie de Hulk (protagonizada por Bill Bixby y Lou Ferrigno, que arrasaba en la televisión de la época. Como curiosidad mencionaros que Arnold Schwarzenegger se presentó al casting para hacer de Hulk pero fue rechazado por “bajito”.

Y es que en Marvel se encontraron con que si en la serie metían un personaje que se llamara She-Hulk, también se quedarían con el nombre, ya que no se usaba en los tebeos y no estaba registrado. Así que, como nos cuentan en el prólogo de este tomo, decidieron crear a Hulka de la noche a la mañana (algo similar pasaría con Spider-Woman y otros personajes femeninos de la época).

Portada del primer número de Hulka (1980)

Stan Lee y John Buscema

El propio Stan Lee preparó un guion, prácticamente de un día para otro, y se lo dio a John Buscema. Si Jack kirby fue el dibujante de Marvel de los 60, Buscema le sustituyó en los 70, de forma que se casi siempre se encargaba de los primeros números de casi todas las series, para enganchar a los lectores, y luego era sustituido por otros dibujantes menos populares.

Buscema es famoso por ser el creador de la versión definitiva de Conan en las viñetas. De hecho, él decía que no le gustaba dibujar superhéroes y que Conan era su personaje favorito. Aun así, dibujo largas e inolvidables etapas de casi todos los personajes de Marvel de la época. Y su Hulka es estupenda.

La colección fue un éxito absoluto, llegando a vender un cuarto de millón de ejemplares.

Lo malo es que Stan Lee y Buscema solo hicieron ese primer número.

Página de Hulka

Un personaje feminista

David Anthony Kraft, que firma el prólogo de este tomo, fue el guionista elegido para Hulka y nos cuenta cosas tan interesantes como que cuando oyó el nombre de Hulka por primera vez, solo se imaginaba a Kathy Bates pintada de verde. De ahí que se decidiese a dar al personaje un tono humorístico que, desde entonces, le ha acompañado en muchas ocasiones (sobre todo en la etapa de Byrne).

En la serie no faltaron personajes invitados como Iron Man que, en su primer encuentro amenazaba a Hulka, a lo que ella respondía que no se pusiera chulo porque podía romper su armadura como “una lata de sardinas”. Lo que convencía a Iron Man de que Hulka era han poderosa como su primo Hulk y, encima, tenía el cerebro de una brillante abogada..

Y es que, al igual que la colección de la Capitana Marvel, esta hizo muchísimo por avanzar en la igualdad entre hombres y mujeres, en el Universo Marvel, además de atraer a nuevas lectoras.

Pero, tras 25 números, la colección finalizó en febrero de 1982. Entonces, Roger Stern decidió integrar al personaje en Los Vengadores, subrayando su feminidad y aún más su carácter cómico. Fue allí donde la descubrió John Byrne, que se enamoró del personaje y decidió incluirla en Los 4 Fantásticos para sustituir, nada menos, que al miembro más popular del cuarteto, la Cosa (a la que dió su propia colección). Una situación que duró un par de años.

Viñeta de Hulka

Los maravillosos años 90

En los años 90 el cómic de superhéroes americanos atravesó una grave crisis durante la que los dibujantes se convirtieron en los protagonistas en detrimento de los guiones. La colección de Hulka de John Byrne fue una de las excepciones. Nació tras la vuelta de la Cosa a Los Cuatro Fantásticos.

Un cómic que fue revolucionario en Marvel por su marcado carácter feminista, romper la cuarta pared, su sentido del humor y su toque sexy. Una joya recogida en el integral Marvel Héroes: La sensacional Hulka.

Después de Byrne el personaje atravesó una época bastante floja, de la que le rescató el guionista Dan Slott, que bebía de Byrne. Y ha tenido otras etapas brillantes como la del del guionista Charles Soule y el dibujante español Javier Pulido, que incidía en su faceta como abogada.

Esperamos que la serie de televisión (para la que todavía falta mucho) sea el revulsivo que el personaje necesita para recuperar su merecida popularidad.

Portada de Hulka