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Mujeres que luchan por desterrar mitos y ser una más en trabajos 'de hombres'

  • Minera, bombera o piloto son profesiones donde aún son pocas las mujeres
  • Coinciden en que se sienten "sobreprotegidas" y "más observadas" que ellos
  • Este domingo se celebra el Día Internacional de la Mujer

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Mercedes, en la cabina del avión antes de despegar.
Mercedes, en la cabina del avión antes de despegar.

"Cuando bajé por primera vez al pozo me sentí como si estuviera desfilando en una pasarela de modelos. Eran todo hombres y puestos a ambos lados de un camino. Todos en silencio y observándome. Me impresionó", cuenta Silviana González. Esta minera asturiana recuerda así su primera impresión al trabajar en un sector en el que la mujer representa una minoría.

Minera, bombera, piloto de aviones o militar son algunas de las profesiones en las que la presencia del hombre sigue siendo mayoritaria. Muchas coinciden en que se sienten "sobreprotegidas" y en que a menudo tienen que demostrar que son capaces de desempeñar su trabajo mejor que ellos, pero luchan día a día por desterrar mitos y por ser más visibles.

Es el caso de Silviana que lleva trabajando 16 años en la minería. Estuvo ocho como cargadora de baterías en el pozo de San Nicolás, en Asturias, y ahora lleva otros ocho en control ambiental. Con motivo del Día Internacional de la Mujer, que se celebra este domingo, la asturiana explica que cuando comenzó eran solo tres mujeres y se sentía "muy integrada".

Dificultades a la hora de ascender

Sin embargo, ahora cuenta que está teniendo más problemas. "No tengo voz ninguna. Soy la que más años lleva y no importa. Valoran más lo que hacen mis compañeros hombres mineros que lo que hago yo", afirma a RTVE.es Silviana.

Esta minera relata que a la hora de ascender profesionalmente, sí que cree que hay diferencias entre hombres y mujeres y recalca que no reconocen su trabajo. "Soy la más antigua de mi equipo y sí que me correspondería ascender y no me lo van a dar. Es algo que no entiendo ni entenderé en mi vida, pero es lo que hay", explica.

En ese sentido, la Directora General por la Igualdad de Oportunidades, Carmen Plaza, señala que a día de hoy todavía se duda de la "propia capacidad de las mujeres". "Tenemos que hacer un doble esfuerzo por demostrar nuestras competencias. Se nos está continuamente examinando todavía", añade. Aún así, explica que son "muchas" las iniciativas que se están llevando a cabo para "abordar esta segregación".

Entre los proyectos que está llevando a cabo el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad Plaza destaca 'Más mujeres, mejores empresas', que está dirigido a fomentar la presencia de mujeres en los puestos de responsabilidad y ya participan 73 empresas.

Unos estereotipos marcados desde la infancia

Nadia Curiel, capitán de la escala de oficiales y destinada en el 43 grupo de las Fuerzas Aéreas, también forma parte de la minoría de mujeres que hay en su profesión. Esta madrileña lleva pilotando hidroaviones para la extinción de incendios desde el año 2010. Asegura que una de las razones por las que aún la mujer no es visible en su sector es porque hay "estereotipos que nos marcan desde la infancia". "Siempre nos lo han inculcado de niños, incluso en los mismos dibujos animados: La 'princesita' es la chica y el guerrero es el chico", afirma.

Además, admite que muchas no dan el paso porque saben que estarían en minoría. Lo más "difícil" para ella fueron los cinco años que pasó en la academia. "Siento que mis años de academia fueron más duros que si me hubiera ido a una universidad", relata. En ese sentido, dice que siempre ha tenido que "sobreactuar un poco" para aparentar ser más fuerte de lo que realmente es.

La capitán cree que hay "bastante igualdad" aunque el mayor problema está en los mandos veteranos que continúan con la "mentalidad de antes". "Es más fácil trabajar con gente joven. A los viejos del lugar no les puedes cambiar de la noche a la mañana. Es cuestión de tiempo", añade.

Asimismo, cuenta que al ser mujer siente que tiene más ojos encima cuando realiza su trabajo, pero explica que hay que saber gestionar ese aumento de estrés. Curiel afirma que la gente te observa más y que sí que han podido tener dudas y miedos, pero "al final se han acostumbrado".

Más observadas que ellos

Macu es bombera en Manilva (Málaga) y fue la primera mujer que aprobó las oposiciones en la Diputación de Cáceres. Coincide con Nadia e indica que también ha tenido más ojos encima observándo cómo lo hacía. "Mi actitud cuando trabajo no es de demostrar nada a nadie, pero sí sientes los ojos en la nuca clavados para ver cómo lo haces. Me hace gracia", sostiene.

La bombera mantiene que el proceso para que se las vea va a ser "muy lento" ya que históricamente no llevan tantos años. Cuenta que costó "mucho" que entrara la mujer en este sector: "Muchas dependencias no estaban diseñadas para que hubiera mujeres. Estabas obligando a ese jurado a reformar sus instalaciones si entrabas".

También coincide con Nadia en que es "más fácil" trabajar con gente joven porque tienen una mentalidad más actual.

Macu afirma que las oposiciones deberían de tener los mismos baremos tanto para hombres como para mujeres, ya que cree que se "discrimina" a la mujer cuando son diferentes. "Yo hice las mismas pruebas y cuando terminé, vinieron los sargentos y me felicitaron porque no creían que una mujer fuera a pasar las pruebas", matiza.

"Me felicitan más que a mis compañeros"

Por su parte, Mercedes González, de 43 años y piloto de aviación comercial, asegura que aún son solo un 5% las mujeres que trabajan en su sector. "La gente se sorprende, se dan codazos y se ríen. Incluso me felicitan más que a mis compañeros hombres", bromea.

Mercedes afirma que en su sector "no hay diferencias" entre hombres y mujeres y que lo más importante es ser responsable y saber tomar decisiones.

La Directora General por la Igualdad de Oportunidades sostiene que "en el equilibrio está la virtud" y las medidas que están impulsando fomentan el que ya desde niñas se interesen por estudios de carácter técnico y no "solamente piensen en carreras de ámbito social". "El sexo no es un elemento para conseguir la promoción, es el mérito y la capacidad", insiste. No obstante, indica que "se ha avanzado mucho pero todavía queda un buen trecho".