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¿Cómo se hace una fumata blanca o negra?

  • Este martes se verá la primera fumata del cónclave en El Vaticano
  • Cientos de fieles mirarán hacia el cielo pendientes del humo negro o blanco
  • Habrá dos estufas: una para quemar papeletas y otra para 'colorear' la fumata

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Dos bomberos colocan la chimenea por la que saldrá la "fumata blanca" que anunciará al mundo que la Iglesia Católica tiene nuevo papa, en el techo de la Capilla Sixtina.
Dos bomberos colocan la chimenea por la que saldrá la "fumata blanca" que anunciará al mundo que la Iglesia Católica tiene nuevo papa, en el techo de la Capilla Sixtina.

Todos los días, hasta que haya un acuerdo sobre la elección del nuevo papa, se harán cuatro votaciones -salvo en la primera jornada, con solo una votación-. En cada jornada se hacen dos fumatas, una por la mañana y otra por la tarde. Las papeletas de los cardenales se queman en una vieja estufa de hierro fundido, de un metro de altura y 45 centímetros de diámetro. 

Tiene una portezuela inferior donde se enciende el fuego y una superior, donde se introducen los documentos para quemar. El humo sale por una chimenea instalada en la Capilla Sixtina. 

Si algunos de los candidatos ha obtenido la mayoría necesaria y, por tanto, es elegido papa, saldrá humo de color blanco: la fumata blanca. Si, por el contario, la votación no ha tenido éxito, el humo será negro, la llamada fumata negra.

El humo negro se produce cuando la combustión es incompleta (porque no hay suficiente oxígeno para quemar) y se forma hollín como producto secundario, que son partículas en suspensión de color negro. El humo blanco se produce cuando la combustión es completa y los productos son vapor de agua y dióxido de carbono, que combinados producen un gas blanco. Tradicionalmente los papeles se quemaban con paja húmeda para ahogar la combustión y se añadían pigmentos como el negro de humo o la brea para obtener el humo negro, y se quemaban simplemente con paja seca para obtener humo blanco.

En esta ocasión y por primera vez se hará con dos estufas: una para quemar las papeletas y otra independiente que emita humo negro o blanco para evitar las confusiones de otros cónclaves, como las elecciones de Juan Pablo II y Benedicto XVI, cuando el humo salió gris. En el momento en el que se queman las papeletas se activa un dispositivo  electrónico en la estufa auxiliar que pone en marcha una especie de  cartucho que contiene cinco cargas con la mezcla adecuada al color de la  fumata. Las cargas se van activando una tras otra durante un tiempo total de siete minutos.

Ayudas químicas

Para poder distinguir mejor el color de las fumatas, se utilizará un aparato auxiliar con fumígenos además de la estufa tradicional donde se quemarán las papeletas de las votaciones. Este aparato está instalado al lado de la estufa, y tiene un compartimento donde -según el resultado de las votaciones- se colocan cajetines que contienen fumógenos de diferente composición.

El encendido se realiza mediante una centralita electrónica, y dura varios minutos, a la vez que en la estufa se queman las papeletas. En cualquier caso, para evitar dudas sobre su tonalidad,  si es blanca el Vaticano hará repicar al mismo tiempo las campanas de la Basílica de San Pedro.

Según explica el Vaticano, para conseguir el color negro de la fumata, la composición química de los fumígenos es: perclorato de potasio, antraceno y azufre. Para la fumata blanca se usa clorato de potasio, lactosa y colofonia. La colofonia, llamada también ‘pez de Castilla’, es una resina natural de color ámbar obtenida de las coníferas.

Las chimeneas de la estufa y del aparato auxiliar se unen en un único conducto que desde el interior de la Capilla Sixtina desemboca cerca de la cumbrera de la cobertura del edificio. Para mejorar el tiro, las chimeneas se calientan con una resistencia eléctrica. Además tienen un ventilador de reserva.

Una estufa histórica

Según ha explicado el portavoz vaticano, Federico Lombardi, en una rueda de prensa, en la tapa superior de la estufa de hierro están escritos con un punzón los años y meses de los cónclaves en los que ha sido utilizada: 1939/III, elección de Pío XII; 1958/X, elección de Juan XXIII; 1963/VI, elección de Pablo VI; 1978/VIII, elección de Juan Pablo I; 1978/X, elección de Juan Pablo II y 2005/IV, elección de Benedicto XVI.