Enlaces accesibilidad

La Policía intercepta la entrega de 248 kilos de cocaína en un centro comercial de Barcelona

  • Detenidas cuatro personas y se han  intervenido dos coches y 3.000 euros
  • Operación conjunta con la DEA, el FBI y la  Fiscalía General de Colombia

Por

Agentes de la Policía Nacional han interceptado una entrega de 248  kilos de cocaína en un centro comercial de Barcelona, en una  operación en la que han sido detenidas cuatro personas y se han  intervenido dos vehículos y 3.000 euros.

Se trata de una intervención conjunta con la DEA, el FBI y la  Fiscalía General de Colombia. El estupefaciente, remitido desde este último país por tres grupos narcotraficantes, iba a ser recogido por  el representante en España de una de las bandas.

La investigación comenzó el pasado mes octubre cuando los agentes  españoles tuvieron conocimiento, a través de las agencias  norteamericanas de la DEA y el FBI, además de la Fiscalía General de  Colombia, de la presencia en España de una organización que pretendía  hacerse cargo de una importante partida de cocaína enviada a España.

Este grupo proveedor de la droga estaba formado a su vez por la  unión de tres bandas criminales. Los narcos habían logrado reunir 248  kilos de cocaína, estupefaciente que una vez remitido debería ser  recogido por el representante en España de una de las bandas. Este,  una vez tuviera la droga en su poder, debería distribuir una cantidad  de cocaína a cada "oficina delegada en España" de los otros dos  grupos.

En el curso de la investigación los policías identificaron a tres  miembros de la organización española, todos ellos de origen  colombiano, responsables de la recepción de la droga. Además de los  vínculos entre ellos se comprobó que recientemente habían viajado a  Colombia.

Furgoneta con 248 kilos de cocaína

Los investigados mantuvieron diversos contactos en Cataluña y,  tras ultimar los detalles del envío con los proveedores del  estupefaciente, seleccionaron el parking de un establecimiento  comercial en Barcelona para entregar la cocaína.

Los policías establecieron un dispositivo para frustrar esta  transacción y consiguieron arrestar a uno de los narcotraficantes  cuando accedía a una furgoneta en la que se localizaron 248 kilos de  cocaína.