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El cine español hace autocrítica y lava su cara en la recta final de los Premios Goya

  • Álex de la Iglesia pone voz a los nominados para los Goya
  • "Este año nuestro trabajo no ha conectado tanto con el público", reconoce

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Los nominados a los Goya se reúnen

Sábado por la mañana en la sede de la Comunidad de Madrid, Casa de Correos en la Puerta del Sol, gala de candidatos a los Premios Goya. Una nube de periodistas. Alfombra roja con parte de los nominados, discurso del presidente de la Academia y fotos de familia. Vino español y croquetas al final.

"Tal vez no lo hayamos hecho demasiado bien, este año nuestro trabajo no ha conectado tanto con el público como querríamos, lo sentimos muchísimo", ha señalado Álex de la Iglesia, presidente de la institución, en sus breves palabras.

Parte del discurso del presidente de la Academia de Cine, Álex de la Iglesia, en la gala de nominados de los Goya 2011.

Un discurso autocrítico muy alejado de la autocompasión que hace no tanto reinaba cuando la taquilla del cine español sufría un mal año.

Juan Gordon, productor de Morena Films, empresa responsable de Celda 211 o También la lluvia, nos lo decía recientemente. 2010 ha sido un mal año en taquilla para el cine español por la crisis, por la piratería... y porque no se han hecho películas que hayan gustado lo suficiente al público español.

El de De la Iglesia no es un enfoque nuevo. Ya en la ceremonia de los Premios Goya 2010, sus primeros premios del cine español como presidente de la Academia, el cineasta bilbaíno fue el suyo un tono conciliador, humilde, contenido, cercano al público: "Nunca reconocemos nuestros errores", afirmó entonces.

Había sido 2009 un gran año para la taquilla del cine español y la gala de los Goya batió récords de audiencia en TVE. Ahora que 2010 ha sido el peor año de recaudación en mucho tiempo, el discurso cobra mayor relieve.

La gala en la Casa de Correos, ya un clásico, sirve para dar visibilidad a los premios que se entregarán el 13 de febrero en el Teatro Real. Los candidatos presentes en el evento suelen ser una mezcla de novatos o primerizos en eso de las candidaturas, emocionados por sus nominaciones, y candidatos ya veteranos voluntariosos que se entregan a la promoción de las películas, sabiendo que de eso (también) va su trabajo: Luis Tosar quizá sea el más claro ejemplo., uno de los primeros en llegar a la cita.

Presencia desigual de películas favoritas

Por la sede de la Comunidad de Madrid ha llamado la atención el equipo al completo de Pa negre (Pan negro), que todavía no se ha repuesto de la sorpresa de tantas nominaciones: Laia Marull y Nora Navas, uña y carne en este tipo de encuentros (ya se las vio emocionadas en los Premios José María Forqué); Agustí Villaronga, tranquilo y querido por su gente; la pequeña Marina Comas, actriz revelación en su pimer trabajo que nos cuenta -bajo la atenta mirada de su padre- que lo primero son lo estudios, ella es una chica de buenas notas; Isona Passola, la productora, feliz y encantada con tanto halago, aunque alguien cercano le diga que la adulación es lo propio de estos saraos...

Los chicos y chicas de También la lluvia, bajo la batuta productora de Gordon, Álvaro Longoria y Pedro Uriol, y junto a la directora Icíar Bollaín, también dan la cara. Tosar y Karra Elejalde se prodigan en entrevistas... Y todos esperan con las uñas listas el anuncio de las candidaturas al Oscar del martes 25. Tienen vivas esperanzas de acudir al Kodak Theatre el 27 de febrero.

El actor gallego, nominado por 'También la lluvia', cree favorito como mejor actor en los Goya a Javier Bardem.

Rodrigo Cortés, el más joven del cuarteto de directores nominados, repite incansable su discurso. ¡Tantas entevistas obligan a ello!, se defiende con gracia, y reconoce que tiene pensada la cara por si gana (sorpresón sería), pero que la que realmente tiene ensayada es la de la derrota.

El director de 'Buried (Enterrado)' asegura que tiene más ensayada la cara si pierde en los Goya que si logra el galardón como mejor director.

Por el lugar, pululan los jóvenes productores de Versus Entertainment, artífices del milagro de Buried (Enterrado), Adrián Guerra y Alejandro Miranda, y el humorista Miki Nadal, que también ha participado.

Se echa de menos a Bardem, Iñárritu, Rodrigo Prieto... La gente de Biutiful (del reparto sólo Ana Wagener hace acto de presencia). ¿Una respuesta por quedarse fuera de las grandes candidatas?

Mientras, Reyes Abades, nominado a efectos especiales por Balada triste de trompeta(tiene 8 Goyas en su haber), reconoce medio en broma, medio en serio, que espera disputarle a Amenábar el récord de Goyas, que le arrebató en 2010.