Dos civiles estadounidenses mueren a manos de un soldado afgano

• El ataque se produjo en la base estadounidense de Camp Shaheen
• El Gobierno pide ayuda para prevenir este tipo de actos en el futuro

Un soldado afgano aparece como presunto autor de las muertes de dos civiles de Estados Unidos y otro soldado afgano en la base militar estadouinidense del norte de Afganistán.

También han aparecido dos soldados heridos, uno de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) y otro del Ejército afgano. Después de los disparos, el propio soldado se ha suicidado.

El suceso ha ocurrido este martes en la base estadounidense de Camp Shaheen, cerca de la localidad de Mazar-e-Sharif, durante uno de los ejercicios de manejo de armas.

"Nuestra investigación conjunta hallará como pudo ocurrir algo así, para ayudarnos a prevenir actos futuros", ha afirmado el portavoz del Ministerio de Defensa afgano, el general Zahir Azimi.

Dos ataques en una semana

A falta de los detalles de la investigación, esta sería la segunda vez en una semana que un supuesto militar afgano ataca a extranjeros pertenecientes o relacionados con las tropas internacionales.

El pasado 13 de julio, un soldado renegado acabó con las vidas de tres militares británicos en un tiroteo registrado en una base de la provincia meridional de Helmand, y luego se dio a la fuga.

A pesar de los ataques y de que junio fuera uno de los meses más sangrientos (un total de 102 bajas), las tropas internacionales y afganas mantienen su lucha contra los insurgentes talibanes que tratan de derrocar al Gobierno y lograr la retirada de las fuerzas extranjeras desplegadas en el país.