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Obama presenta su propio 'plan de rescate' para la economía y las finanzas del país

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Obama hace su propuesta de plan de choque

Es el momento del cambio y Obama aprovecha su ventaja en las encuestas para apuntillar a McCain. Y lo hace con nuevas propuestas dirigidas directamente a la clase media de Estados Unidos.

Obama cifra en diez mil millones de dólares al mes (unos 7.400 millones de euros) el coste de su plan, una cantidad modesta comparada con los billones que se están inyectando para rescatar el sistema financiero. Pero mucho más rentable electoralmente: son los ciudadanos los que votan el próximo cuatro de noviembre.

De hecho, la campaña demócrata ha decidido ampliar sus propuestas económicas después de que McCain optara el domingo por no presentar nuevas medidas. Y es significativo que Obama haya desgranado su oferta en Toledo, Ohio, una ciudad del cinturón industrial que sufre especialmente la crisis.

Un plan para las familias con guiños a los parados y los pensionistas

El "plan de rescate para la clase media"  empieza por el empleo, en un país que ha perdido 760 mil en lo que va de año. "J-O-B-S" (e-m-p-l-e-o-s), esa ha sido la fórmula deletreada por el candidato demócrata en un acto de campaña esta tarde en Toledo (Ohio, noreste).

Obama propone dar a las pequeñas y medianas empresas un crédito fiscal de tres mil euros por cada puesto de trabajo nuevo que creen en los próximos dos ejercicios. Asimismo, quiere eliminar temporalmente las cargas fiscales sobre las prestaciones por desempleo.

En un contexto más amplio, Obama propone crear 5 millones de puestos de trabajo a través de las energías renovables y otros dos millones mediante la inversión en infraestructuras.

Además, pide que la Reserva Federal y el Tesoro habiliten créditos a las administraciones locales y estatales, similares a los que se están concediendo a las entidades financieras y con el propósito de reactivar la economía desde el sector público.

El segundo paquete de medidas está dirigido a las familias. El candidato demócrata aboga por paralizar los embargos hipotecarios. Quiere conceder una moratoria de 90 días a los propietarios que habiten la vivienda y estén haciendo todo lo posible para pagar su deuda.

El plan tiene también un guiño a los pensionistas para facilitar liquidez a los ahorradores. Los ciudadanos podrán retirar hasta un 15% de sus fondos para la jubilación sin penalizaciones. Y todo esto enmarcado en una rebaja fiscal para el 95% de las familias americanas, todas aquellas que ganen menos de 250 mil dólares al año.

Un conjunto de medidas a poner en marcha de forma inmediata si los demócratas ganan las elecciones. Los asesores de Obama son más precisos y hablan de enero.

Este paquete se sumará a los 700.000 dólares del plan de rescate del presidente Bush, aprobado por el Congreso el pasado 2 de octubre. El anuncio se produce el día en que los mercados han recibido con alivio las medidas anunciadas por los líderes de las potencias mundiales y los mandatarios de la Unión Europea para atajar la crisis financiera. En el caso de Europa, el plan supera ampliamente la cantidad que destinada Estados Unidos.

Eje de la campaña demócrata

Al contrario que su rival republicano, Obama ha centrado su campaña en la economía. De hecho, desde que la crisis se recrudeció con la quiebra de Lehman Brothers, hace un mes, el demócrata se destacó en los sondeos y a tres semanas de la cita con las urnas mantiene una ventaja de unos ocho puntos.

El miércoles, Obama debatirá con McCain por última ocasión, con la economía de nuevo como cuestión principal. De hecho, al contrario que en los anteriores cara a cara, esta vez sí es el tema acordado para el debate.

Para preparar esta cita, el candidato se ha instalado una semana en la ciudad industrial de Toledo, en el estado clave de Ohio. Pretende que se le identifique más con la clase trabajadora y para ello ha hecho campaña puerta a puerta.

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