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El nuevo papa debe hacer frente a un mundo cada vez más complejo como jefe de Estado del Vaticano, el país más pequeño del mundo, pero con enorme influencia geopolítica. Ha aprovechado su primer mensaje dominical para poner el foco en la necesidad de acabar con las guerras, como hacía Francisco.

León XIV inicia su papado en un mundo de conflictos, hay más de 50 guerras. No es casualidad su llamada a la paz.

El Vaticano es, en teoría, neutral. Algunos criticaron -otros aplaudieron- algunos gestos del papa Francisco hacia el pueblo palestino en plena invasión israelí. Ahora los ojos están puestos en León XIV. "No se puede olvidar que entre la población palestina hay un número de cristianos y de católicos de una cierta entidad que, por todas estas violencias, no hace sino disminuir", explica Diego Alonso Lasheras, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Pontificia de Comillas.

Después de una reconciliación histórica, la guerra de Ucrania separó a Kiril y Francisco. El patriarca de la iglesia ortodoxa rusa bendijo la invasión de Putin. León XIV hereda la tensión y tendrá que gestionar un posible futuro acercamiento.

Pero si hay un asunto sensible y polémico dentro de la Iglesia es el acuerdo con China, por el que los obispos chinos se eligen de mutuo acuerdo entre el Vaticano y el régimen de Xi Jinping: "Es un acuerdo que a muchos católicos chinos no les ha agradado. Bueno, habrá que ver si se renueva o no se renueva", indica Lasheras.

León XIV decidirá si le da continuidad, es una incógnita. Hay otras cosas que sí parecen más seguras. "Ciertamente, no va a ser una persona que le diga a Trump a todo que sí. Este hombre ha sabido decir cuándo está en desacuerdo con el Gobierno de los Estados Unidos", apunta el profesor.

Como cardenal, criticó las deportaciones masivas, confrontando directamente al vicepresidente JD Vance.

Foto: FILIPPO MONTEFORTE / AFP

La sorpresa aún sigue entre los vecinos de la localidad de Genazzano. León XIV se acercó sin previo aviso este sábado al santuario agustino de la Santa María del Buen Consejo, lo que que supone la primera salida del pontífice desde que el jueves fuera elegido jefe de la Iglesia Católica. Un equipo de TVE se ha acercado hasta allí, donde los ciudadanos le han relatado su experiencia. Foto: Francesco Sforza/Vatican Media/Handout via REUTERS

Gran despliegue de seguridad desde muy temprano. Para miles de fieles y turistas es un domingo especial en el Vaticano.

Expectación y deseos de ver más de cerca a León XIV en su primera oración desde el balcón de la Basílica de San Pedro, la Regina Coeli, que reemplaza al Ángelus desde la Pascua hasta el domingo de Pentecostés.

Ha destacado que su primer domingo como obispo de Roma es el del Buen Pastor y con firmeza ha clamado por la paz, recordando a Francisco, que hablaba de escenario de tercera guerra mundial. "Nunca más la guerra", ha pedido a los líderes mundiales.

Por una paz justa y duradera en Ucrania y llamamiento al alto el fuego en Gaza, y que se brinde ayuda humanitaria a la agotada población. Ha reclamado también que se liberen a los prisioneros de ambos conflictos.

León XIV comenzó la jornada oficiando una misa en las Grutas Vaticanas junto a la tumba de San Pedro y rezando donde descansan sus predecesores.

Foto: EFE/EPA/ALESSANDRO DI MEO

El presidente ruso, Vladímir Putin, ha comparecido ante los medios de madrugada sin dar margen a preguntas. Ha propuesto una nueva negociación directa con Ucrania, sin condiciones previas, que comience este 15 de mayo en Estambul. El objetivo es eliminar las "causas profundas del conflicto" y alcanzar una paz duradera.

El mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan, se ha mostrado dispuesto a acoger las conversaciones. Ha hablado con Putin y con el presidente francés, Emmanuel Macron, quien ha dicho que "no puede haber diálogo si al mismo tiempo se bombardea a civiles".

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha dicho que la propuesta del líder ruso es "un primer paso" porque empieza a considerar poner fin a la guerra, pero ha insistido en que primero debe haber una tregua a partir de este lunes. Alto el fuego que fue acordado con varios líderes europeos en consenso con una treintena de dirigentes, entre ellos, el estadounidense, Donald Trump, que ha celebrado la propuesta de Putin. Pero las hostilidades no cesan. Kiev acusa a Moscú de lanzar un centenar de drones esta noche tras el fin de la tregua temporal.

Foto: EFE/EPA/GAVRIIL GRIGOROV/SPUTNIK

Roma suena a fiesta popular. En cada plaza, un sonido diferente pero igualmente festivo nos recuerda que estamos en año Jubilar, motivo de peregrinación a Roma en busca de indulgencia general, como marca la tradición cristiana.

El azar ha querido que el primer domingo de León XIV como papa sea lo más parecido a una fiesta, gracias al Jubileo de las Bandas Musicales.

Foto: Jubileo de las Bandas (EFE/EPA/ALESSANDRO DI MEO)

Alrededor de 7.500 españoles fueron deportados al campo nazi de Mauthausen. Muchos de ellos habían entrado en la resistencia francesa, esperando que, tras vencer al nazismo, los aliados les ayudarían a recobrar la democracia en España. De ellos, 4500 fueron asesinados o sometidos a trabajos forzados, torturas, hambre y enfermedad. Este domingo se conmemora el 80 aniversario de la entrada de las tropas americanas en las instalaciones y la liberación de sus prisioneros. Foto: Jan Kowalski / Getty Images.

"Las gaviotas también lloran. Porque beben agua del mar y, a través de las lágrimas, eliminan la sal que han ingerido. En el interior de la Capilla Sixtina los cardenales esperaban una paloma, pero sobre sus cabezas, en el tejado, la que se posó fue una gaviota para alimentar a su polluelo." Conocemos la 'cara B' de la semana con Juan Carlos Soriano.

A José Enrique Escardó le cambió la vida el día que se acercó al Sodalicio de Vida Cristiana. Sin darse cuenta, le fueron anulando, humillando y una tarde fue víctima de abusos sexuales por parte de un líder del Sodalicio.

Pasó el tiempo y, hace ya 25 años, se convirtió en la primera víctima que denunció al Sodalicio. Entonces nadie le creyó y se acumularon las amenazas. Sufrió un verdadero calvario hasta que un día tuvo un encuentro con el papa Francisco, que no le habló de religión. Sabía de sobra que José Enrique era ahora ateo. Seguramente lo sabía porque un tal cardenal Prevost se lo había contado. Con él se reunió Escardó ese mismo día.

Foto: José Enrique Escardó en la plaza San Pedro del Vaticano (EFE/Daniel Cáceres)