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Cientos de ingenieros del ejército estadounidense y dos enormes grúas trabajan para quitar los primeros escombros del Puente de Baltimore, Estados Unidos, después de que se derrumbara el pasado miércoles tras el choque de un carguero. Mientras el acceso marítimo y el tráfico siguen bloqueados, así como la búsqueda de cuatro trabajadores desaparecidos que se encontraban sobre la infraestructura en el momento del choque y, cuyos cuerpos se estima que estén atrapados entre el acero. Foto: REUTERS/Julia Nikhinson

La ciudad de Baltimore guarda silencio por las víctimas del derrumbe del puente. Eran seis migrantes que estaban ayudando a construir Estados Unidos. Estaban tapando baches en el puente de madrugada cuando el buque chocó y cayeron al agua. Todos eran hispanos. Llegaron a la ciudad en busca de trabajo y enviaban dinero a sus familias en sus países de origen. Los hispanos son los que más mueren en accidentes laborales en Estados Unidos.

Foto: AP Photo/Mark Schiefelbein)

La grúa más grande de la costa este, que puede levantar hasta 1.000 toneladas, ha sido transportada a Baltimore y las cuadrillas han comenzado este viernes a retirar los restos del puente colapsado.

La búsqueda de cuatro trabajadores que aún están desaparecidos días después del desastre continúa detenida y el funcionamiento del vital puerto de la ciudad permanece bloqueado.

El impacto económico también se va a sentir lejos de la ciudad de Baltimore. La reconstrucción del puente puede ascender a los mil millones de dólares y sumado al bloqueo del puerto puede dejar pérdidas de 2.000 a 4.000 millones.

El roto que deja el colapso del puente amenaza con ser histórico para un incidente marítimo. Las reclamaciones a las aseguradoras pueden llegar a duplicar la factura que dejó hace doce años el Costa Concordia, aquel crucero italiano que encalló frente a las costas de la Toscana, en Italia, y donde murieron 32 personas.

Sobre todo, se verá afectada la industria del automóvil. Se salvan fabricantes europeos como Volkswagen y BMW que tenían sus plantas justo antes de llegar al puente colapsado. Muchos otros como Ford y General Motors, tendrán que descargar sus coches y camiones en otros puntos de la costa este de Estados Unidos, como Norfolk, Nueva York y Filadelfia.

Israel, cada vez más aislada internacionalmente, trata de rebajar la tensión con su principal aliado, Estados Unidos. Finalmente, el país enviará una delegación a Washington D.C. para discutir los detalles de una posible invasión de Rafah, donde se refugian más de un millón y medio de palestinos. La resolución de la ONU no ha funcionado e Israel continúa atacando la Franja y asediando hospitales.  

La investigación del accidente del puente de Baltimore, en el que el carguero Dali impactó con uno de los muros de carga y provocó el colapso de la estructura, se centra ahora en esclarecer los motivos de la colisión.

La gran incógnita es saber por qué el carguero sufrió dos apagones poco antes de impactar en uno de los pilares de carga del puente. El responsable del centro marítimo de Massachusetts asegura que "es de las peores cosas que puede ocurrir porque afecta a la propulsión, no controlas el movimiento del aparato ni las comunicaciones, dependes del viento y las corrientes".