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La Comisión Europea y el Banco Central Europeo cuestionan que España pueda cumplir los objetivos de déficit en 2015 y 2016. Para conseguir ese objetivo, dicen en su informe, además de que crezca la economía harán falta considerables esfuerzos adicionales. Aunque reconocen que el sector bancario da muestras de mayor dinamismo tras el rescate de la banca al tiempo que la economía consolida su recuperación.

El ministro de Economia y Competitividad se ha felicitado por las previsiones económicas de la Comisión Europea porque certifican que a partir del año que viene, "por primera vez desde el inicio de la crisis, prácticamente desde el año 2008, la economía española va a crecer más que la media de la zona euro y va a crear más empleo que la media de la zona euro". Respecto al déficit, el titular de Economía ha respondido que esa cifra responde a una "proyección inercial del déficit público" y que posteriormente se corregirá.

  • Es menos optimista que el Gobierno sobre el PIB en 2014 y más en 2015
  • El resto de las estimaciones de la CE, algo peores a las del Ejecutivo español
  • La tasa de paro se situaría en el 25,5% y bajaría al 24% el año que viene
  • Bruselas cree que este año ya comenzará a crearse empleo en el país
  • El déficit se reduciría al 5,6% en 2014, pero se dispararía al 6,1% en 2015
  • La deuda pública superaría el 100% del PIB este mismo año

El Gobierno habla de la creación de 600.000 empleos entre este año y el próximo y dice que estas estimaciones siguen siendo prudentes y conservadoras. Además, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, estima que este año el déficit cerrará en el 5,5%, tres décimas menos del objetivo fijado por Bruselas. En 2015, el déficit se situará en el 4,2%, para bajar del 3% en 2016. El ministro de Hacienda ha insistido en que la reforma fiscal incluirá una rebaja en los tipos de IRPF y Sociedades. Por este motivo habrá una reducción neta en la recaudación por IRPF "de unos 5.000 millones de euros entre 2015 y 2016", ha dicho Montoro.

El Gobierno de Manuel Valls mantiene su objetivo de reducir el déficit francés al 3% el año que viene, con un ahorro sin precedentes en el gasto público de 50.000 millones. Y lo hacen confirmando la anunciada congelación de las prestaciones sociales y en el salario de los funcionarios, sin de momento cláusula de revisión, tal y como pidió al primer ministro un grupo de diputados socialistas críticos con este ajuste. En la Seguridad Social, el aumento del gasto se limita a un 2% cada año hasta el 2017, con niveles de finales de los 90.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido este lunes que España cumplirá con los objetivos de déficit exigidos por Bruselas sin subir impuestos o hacer más recortes. "Vamos a seguir cumpliendo los objetivos de déficit y creo que podremos hacerlo sin tener que subir los impuestos ni hacer mayores recortes de los que ya hemos hecho", ha afirmado Rajoy, que ha asegurado que se podrá hacer porque la recuperación económica ya está permitiendo aumentar la recaudación tributaria.

Canarias, Baleares y Castilla y León son las comunidades que más han reducido el déficit. Pero en ese pelotón están también otras ocho entre ellas Asturias, Andalucía y Madrid.

Un total de seis comunidades autónomas incumplieron el objetivo de déficit asignado para el año 2013, Aragón, Castilla-La Mancha, Cataluña, Murcia, Navarra y la Comunidad Valenciana. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha recordado que, en conjunto, las regiones tuvieron un déficit del 1,54%, por encima del objetivo del 1,3% fijado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).

El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha asegurado este lunes que España logró en 2013 un superávit estructural primario del 1,1%, es decir, que sin tener en cuenta la deuda pública, el pago de intereses ni el efecto de la crisis en la economía española, los ingresos superaron a los gastos en ese porcentaje. Este dato contrasta con el déficit público del 6,62% -en términos nominales y sin contar la ayuda a la banca- con el que se cerró el año pasado, un 0,12% por encima del objetivo marcado por la UE.