Enlaces accesibilidad

Trump veta la fusión entre las tecnológicas Qualcomm y Broadcom por motivos de seguridad nacional

  • Broadcom opera en el mercado estadounidense, pero cuenta con inversores de Singapur
  • Qualcomm es el mayor fabricante de microchips para móviles en EE.UU.
  • Broadcom lanzó una opa hostil por 117.000 millones a finales del año pasado

Por
Logo de Qualcomm en su campus de la ciudad californiana de San Diego
Logo de Qualcomm en su campus de la ciudad californiana de San Diego.

El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha prohibido la fusión de las empresas tecnológicas Qualcomm y Broadcom por motivos de seguridad nacional. El presidente estadounidense ha alegado que la operación, que de realizarse sería la mayor del sector tecnológico, "amenazaba con perjudicar la seguridad nacional estadounidense".

"La absorción propuesta de Qualcomm queda prohibida, y cualquier fusión, adquisición o absorción equivalente en el fondo, ya sea directa o indirecta, también queda prohibida", ha advertido Trump en una orden presidencial.

Broadcom es uno de los principales fabricantes de circuitos integrados para comunicaciones de banda ancha de los Estados Unidos, pero cuenta con participación de inversores de Singapur y tiene gran parte de su producción deslocalizada en países asiáticos como India, mientras que Qualcomm es la mayor compañía estadounidense de fabricación de microchips para teléfonos móviles.

La toma de control de Qualcomm por parte de Broadcom habría dado lugar al tercer mayor fabricante de microchips del mundo, sólo por detrás de Interl y Samsung.

La carrera por la tecnología 5G

Este sector vive una carrera contrarreloj para desarrollar los circuitos para la tecnología 5G de los móviles y, en esa competición, Qualcomm figura destacada por delante de Broadcom y la china Huawei.

Según los analistas, el liderazgo de Qualcomm se explica por su clara apuesta por la I+D, mientras que Broadcom es más débil en ese campo y sus avances se van produciendo mediante la compra de activos y de empresas especializadas más pequeñas. Por ese motivo, la fusión entre Qualcomm y Broadcom daría a Huawei la ocasión de ponerse en cabeza en los próximos años.

Broadcom lanzó una opa hostil sobre Qualcomm en noviembre del año pasado a un precio de 70 dólares por acción y en febrero elevó la oferta a 82 dólares. Ese precio supone valorar la empresa estadounidense en más de 117.000 millones de dólares.

La dirección de Qualcomm rechazó las ofertas de Broadcom y, a principios de este mes, el Gobierno de Trump ordenó a la compañía californiana retrasar una junta en la que los accionistas podían haber nombrado a nuevos directivos afines a la operación.

Al mismo tiempo, sigue abierta la investigación de esa operación por parte del Comité para Inversiones Extranjeras en EE.UU., un organismo integrado por varias agencias federales y presidido por el Departamento del Tesoro, que se encarga de revisar las implicaciones para la seguridad nacional que tienen operaciones empresariales entre entidades extranjeras y estadounidenses.