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Pedro Sánchez, un mismo líder para dos congresos del PSOE muy diferentes

  • Sánchez fue proclamado líder en 2014 y tras una dura travesía vuelve a Ferraz
  • Entre ese congreso, al que llegó de la mano de Díaz, y este, media un abismo
  • No saldrá de este cónclave sólo como líder, se postulará para La Moncloa
  • El saludo con Diaz, el plasma de González, la actitud de los 'barones': los momentos
  • Ningún líder histórico lo arropará en su primer discurso como nº1

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Pedro Sánchez, líder del PSOE.
Pedro Sánchez, líder del PSOE.

Mismo líder pero muy diferente liderazgo. Mismo partido pero diferentes equilibrios de poder. Mismo secretario general con diferentes equipos, referentes, proyectos, objetivos y estrategias. El Pedro Sánchez de 2017 frente al Pedro Sánchez de 2014. Dos congresos socialistas entre los que el nuevo número uno de Ferraz ha vivido una muerte política y una resurrección.

El último congreso del PSOE celebrado hace tres años y el que se celebra este fin de semana ratifican al mismo secretario general pero en nada se parecen.

Quien fuera actor protagonista en el Congreso de 2014 con una actriz secundaria que le hizo sombra, Susana Díaz, será la estrella indiscutible en este 39º Congreso Federal del que quiere salir sin más hipoteca que "cumplir con la palabra dada a la militancia".

Líder en 2014 gracias a Díaz, líder en 2017 derrotando a Díaz

Sánchez fue líder hace tres años gracias a Susana Díaz. Lo vuelve a ser ahora tras derrotarla en una guerra que ha durado nueve meses y en la que sólo ha contado con el apoyo de la militancia y unos pocos fieles que serán quienes le acompañen ahora en una Ejecutiva muy diferente- comandada por Adriana Lastra y José Luis Ábalos- que la que tuvo que configurar entonces, de mayoría 'susanista'.

Ahora el sector de Díaz brillará por su ausencia en la dirección federal de Ferraz, aunque sí estará el otro rival de Sánchez en estas primarias, Patxi López.

Más diferencias entre cónclaves: Díaz fue la presidenta del Congreso de 2014, anunció la ratificación de Sánchez como líder, presentó uno a uno los miembros de la Ejecutiva y acompañó/apadrinó a un entonces desconocido y manejable diputado madrileño que había llegado de rebote al Congreso de los Diputados. El papel de este año será de pura presencia, aunque muchos focos se posarán en ella, y su sector puede dar la batalla en el debate de las ideas de cada ponencia.

Tres años después, sin escaño y contra todo el aparato, Sánchez se ha hecho con las riendas de Ferraz donde, ahora sí, tomará las decisiones con su equipo propio, alejado de las cuotas y las familias.

El secretario general ha dicho en reiteradas ocasiones que pocos meses después de ese congreso de 2014 comenzó a sentir la "deslealtad" de los suyos. Ahora pide "lealtad" por parte de todos hacia el candidato que han elegido los afiliados. Y todos, incluida Díaz, han dicho que se ponen a su disposición, con más o menos entusiasmo.

Pedro Sánchez, en un mitin de la campaña de primarias.

Pedro Sánchez, en un mitin de la campaña de primarias. EFE

Morbo en el saludo entre Sánchez y Díaz o el vídeo de González

Uno de los momentos clave y con más morbo del congreso socialista será el saludo, beso o abrazo entre Sánchez y Díaz. Para que este cónclave socialista se vea como el de la reconciliación, el de la paz, ambos saben que esa fotografía debe producirse, forzada o no.

Todas las miradas estarán también puestas en el mensaje que desde Colombia dé el expresidente del Gobierno Felipe González que, vía plasma, estará en este cónclave. Días antes del fatídico Comité Federal del 1 de octubre, González y Sánchez se cruzaron duros reproches- el primero habló de "engaño" y el segundo dijo estar en un "bando" diferente al del histórico socialista- y el feeling entre ellos es nulo.

Sí estarán presentes en la inauguración del congreso el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y el exlíder Alfredo Pérez Rubalcaba, firmes defensores de Susana Díaz, a la que acompañaron en su macroacto de presentación de candidatura a las primarias.

Pero no estarán al lado de Sánchez en el acto más importante de este cónclave: el primer discurso del proclamado secretario general, que será el domingo junto a 8.000 militantes de toda España. El "PSOE del siglo pasado", tal y como ha definido el secretario general a esas figuras históricas, no acompañará al "PSOE del siglo XXI".

Líder que quiere ser candidato a La Moncloa con mayor autonomía

Otra de las diferencias entre congresos es que en 2014 ni se mencionó la posibilidad de que el nuevo secretario general fuera candidato a La Moncloa, que finalmente lo fue, porque Díaz no se descartaba para esa batalla; y a este cónclave Sánchez llega habiéndose postulado ya para liderar la lista electoral y no sólo eso, amagando con la posibilidad de buscar una moción de censura con el apoyo de Podemos y Ciudadanos para derrocar a Mariano Rajoy del Gobierno, aunque no a corto plazo, como dijo este viernes en RNE el próximo secretario de Organización, José Luis Ábalos.

En 2014 Sánchez se debía a un poderoso 'aparato' que le había hecho secretario general frente a Eduardo Madina, pero ahora el lider sabe que su autonomía es total con unos órganos de dirección que dominará, sin 'baronías' de por medio. Salvo la presencia de López en la nueva Ejecutiva, la dirección la componen íntegramente cargos de su máxima confianza.

Ábalos incluso ha dicho que la integración no es el requisito indispensable a la hora de establecer la nueva Ejecutiva, sino la capacidad.

No tendrá 'fuego amigo' metido en casa directamente, lo que no quiere decir que no lo vaya a tener desde las direrentes comunidades autónomas, que se meterán ahora de lleno en sus respectivos congresos regionales, donde el sector 'sanchista' podría presentar candidatos propios en cada proceso de primarias.

Tras lo vivido en el comité de octubre, Sánchez tomará precauciones que dejará cerradas en el congreso. No podrá volver a repetirse lo que desencadenó su dimisión. Entonces, la renuncia de 17 miembros (la mitad más uno) de su Ejecutiva, todos 'susanistas', para forzar su salida, provocó una riada de acontecimientos internos que acabaron con su derrota en una votación dominada por el sector de su rival.

Eso ya no se podrá volver a dar porque aprobará unos estatutos en los que el líder sólo puede ser censurado y revocado por el acuerdo del 51% de todo el Comité Federal y aprobada por la militancia en una consulta.

Equilibrio para tender la mano a Podemos y disputarle la izquierda

Pero las direferencias del nuevo PSOE de Sánchez no sólo son muy diversas en lo interno en estos tres últimos años. Ganó el liderazgo en 2014 en un momento en el que Podemos no era una realidad.

Ahora, sale del Congreso Federal con un partido que en las dos últimas elecciones generales le disputó de tú a tú el liderazgo de la izquierda y con el que seguirá batallando por ese flanco.

El equilibrio entre buscar las posibles alianzas postelectorales con Pablo Iglesias y reivindicarse como la "izquierda real y de Gobierno" es la tarea principal de este PSOE y del nuevo Pedro Sánchez que poco tiene que ver con aquel líder de 2014.

Del entendimiento con Podemos, de la redifinición de la socialdemocracia, de la pérdida de votos en los últimos procesos electorales, de la plurinacionalidad, del modelo de partido...de todos estos asuntos y muchos más debatirán este sábado durante horas en diferentes comisiones.

  • Marco estratégico, Ponencia Política y Social. Ponentes: Cristina Narbona, Josep Borrell, Eva Bueno, Carmen Calvo y Altamira Gonzalo.
  • Economía, Empleo y Sostenibilidad Ecológica. Ponentes: Luis Ángel del Hierro, Consuelo Rumí y Nuria Parlón.
  • Modelo de Partido. Ponentes: José Félix Tezanos y Ana Sánchez.