Enlaces accesibilidad

La ONU avisa de que Siria podría perder su integridad por el desgaste de la guerra

  • El enviado de la ONU, Sttafan de Mistura, avisa del "riesgo de partición" del país
  • Rusia inició sus ataques aéreos en Siria el 30 de septiembre, pretendidamente contra el EI
  • Según la OTAN, muchos de esos ataques han golpeado posiciones opositoras a Asad
  • Después de 4 años de conflicto, en Siria han muerto más de 240.000 personas

Por
Las fuerzas del régimen de Al Asad logran avances en el oeste del país gracias al apoyo Rusia

Si la situación en Siria sigue deteriorándose existe una posibilidad de participación del país, ha alertado este lunes el enviado especial de la ONU para Siria, Sttafan de Mistura. "La participación del país sería el peor escenario. Los sirios de todos los lados han dicho desde el principio que luchan por mantener la soberanía y la integridad territorial del país. Pero si la situación sigue deteriorándose, la realidad podría ser la partición", ha señalado.

Es por ello que el diplomático italo-sueco reiteró la importancia de seguir manteniendo la presión diplomática para encontrar una solución política al conflicto lo antes posible. Un recurso, el de la diplomacia, que se ha tambaleado desde que Rusia iniciara el día 30 de septiembre su campaña de ataques aéreos sobre la zona.

Declarados por Moscú como acciones contra el Estado Islámico, sus bombardeos desde el aire también han golpeado a efectivos de la oposición moderada y derivado en violaciones del espacio aéreo turco.

Limitar a Rusia, evitar a al Asad

Este lunes, los ministros de Exteriores de la Unión Europea han instado a Rusia para que detenga todo bombardeo contra la oposición moderada en Siria y coordine sus ataques contra los terroristas del Estado Islámico (EI) o Daesh con la coalición internacional que los combate militarmente.

"Los recientes ataques militares de Rusia, que van más allá de Daesh y de otros grupos terroristas designados por la ONU y contra la oposición moderada, suscitan gran preocupación y deben detenerse inmediatamente", ha subrayado el Consejo de Ministros de la UE.

La UE ha pedido a Rusia "que centre sus esfuerzos en el objetivo común de lograr una solución política al conflicto" y le instó a "presionar por una reducción de la violencia", al mismo tiempo que condenó "las violaciones por parte de Rusia del espacio aéreo soberano de países vecinos", en alusión a la reciente intrusión de cazas rusos en el espacio aéreo turco.

Los ministros dejaron claro que apoyan los esfuerzos de la coalición global contra el EI en Siria e Irak y consideraron que, "como consecuencia de sus políticas y acciones", el régimen sirio de Bachar al Asad "no puede ser un socio en la lucha contra" los terroristas.

La ambigua disposición de Rusia y su efecto impredecible

Este lunes, dirigentes del moderado Ejército Libre Sirio (ELS) han condicionado entablar algún tipo de negociación con Rusia, aliada del régimen del presidente Bachar al Asad, al cese de su campaña de bombardeos.

"No vamos a hablar con Rusia a menos que cese su ocupación del suelo sirio", ha dicho a EFE por internet el comandante del ELS en la provincia de Latakia, general Ahmed Rahal. Por su parte, el portavoz del Frente Sureño del ELS, Esam Rayes, ha apuntado por teléfono que no van a iniciar ningún contacto con los rusos "si no detienen de inmediato sus ataques".

Steffan Mistura ha señalado que la implicación rusa en el conflicto sirio ha contribuido a cambiar la dinámica sobre el terreno, por lo que ahora es aún más difícil hacer predicciones sobre lo que puede ocurrir a corto plazo en el país. "Hacer predicciones o especular sobre lo que puede ocurrir es ahora mucho más difícil".

El diplomático sostiene que las acciones militares y las implicaciones de actores exteriores no van a resolver el conflicto, sino que lo van a exacerbar, por lo que pidió ayuda para "desescalar" el conflicto y no multiplicarlo.

Estados Unidos afina en los entrenamientos y provee de armamento

Por otro lado, Estados Unidos ha entregado por vía aérea 50 toneladas de munición a grupos rebeldes en el norte de Siria, en un intento urgente de reformular el fallido programa de entrenamiento de milicias opositoras, según han informado funcionarios estadounidenses a la cadena CNN.

La entrega se hizo la noche del domingo con el lanzamiento en paracaídas de 112 palés, según ha confirmado un funcionario en condición de anonimato. Un avión de transporte C-17, escoltado por cazas, lanzó toneladas de munición, granadas y otro tipo de material en un punto de la provincia de Hasakah a un grupo rebelde apoyado por Estados Unidos conocido como la Coalición Siria-Árabe.

Las fuentes estadounidenses aseguraron que todo el material fue recuperado con éxito por los rebeldes aliados de los estadounidenses.

La semana pasada, Estados Unidos anunció el fin del plan de entrenar a miles de milicianos rebeldes moderados sirios que debían luchar sobre el terreno contra los yihadistas del Estado Islámico (EI) y eventualmente convertirse en una alternativa al líder sirio Bachar al Asad.

El destino poco claro de las bombas rusas en Siria

Moscú se ha mostrado este lunes dispuesto a coordinar sus acciones militares en Siria tanto con la coalición internacional -integrada por EEUU, Turquía, Arabia Saudí y otros países- como con la oposición moderada del país.

Las autoridades rusas han insistido desde el comienzo de los bombardeos que estaban dispuestas a cooperar con grupos como el ELS, pero mantienen que todas aquellas organizaciones armadas sirias que se ocultan entre núcleos de población son terroristas.

El dirigente del opositor ELS Rayes ha destacado a EFE que "si Rusia quiere acabar con los terroristas de verdad debería centrarse en su origen, el régimen de Bachar al Asad, por lo que debería ayudar a expulsarlo".

Ha agregado que, por el momento, ningún responsable ruso se ha puesto en contacto con dirigentes del ELS y ha afirmado que, si Moscú es serio, "debería buscar una solución política al conflicto en Siria sin Al Asad".

Gracias al apoyo de los bombardeos de Rusia, las fuerzas del régimen de Al Asad ha logrado avances en el oeste de Siria. Según la OTAN, muchos de esos ataques rusos se han dirigido contra posiciones rebeldes y no contra el autodenominado Estado Islámico.

El país árabe es desde hace más de cuatro años escenario de un conflicto que ha causado más de 240.000 muertos, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.