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El Banco de España estima que la economía podría crecer un 1,4% en 2014

  • Este cálculo supera en una décima la última previsión del Gobierno
  • En el último trimestre, el PIB habría aumentado un 0,6%
  • El supervisor prevé un alza del 2% en 2015 pese a la debilidad de la eurozona
  • Adelanta que el IPC seguirá en negativo "en la parte inicial" del año que viene

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El Banco de España cree que la economía española cerrará el año con un avance del 1,4%

La economía española podría crecer un 1,4% en todo 2014, según la previsión preliminar incluida por el Banco de España en su último boletín económico del año. Ese avance se habría producido, según el órgano supervisor, "en un entorno de mejora continuada de las condiciones financieras, aumento de la confianza y evolución favorable del mercado laboral". Esta estimación supera a la última previsión del Gobierno, que en septiembre calculaba un alza del 1,3% para el conjunto del año.

Según sus primeras estimaciones -y a falta de muchos datos del cuarto trimestre-, adelanta que en el año que está a punto de acabar, el empleo habría aumentado un 1% -"focalizado en el empleo temporal, si bien desde el segundo trimestre se observa un aumento gradual del empleo indefinido"- y el sector exterior habría restado en el cálculo del PIB "por primera vez desde 2007" (-0,8%).

Además, prevé que el consumo de los hogares crezca un 2,3% en el conjunto de este año, que la inversión empresarial mejore un 2,8% y que el gasto público repunte un 0,7%.

En ese informe, el banco central estima que el producto interior bruto español "estaría creciendo a una tasa intertrimestral del 0,6% en el último trimestre del año, lo que, de confirmarse, situaría la tasa de variación interanual del PIB en el 1,9%".

Repuntes del consumo y la inversión

Según el boletín, este crecimiento trimestral de la actividad "se estaría apoyando en la fortaleza de la demanda interna privada, mientras que la demanda exterior neta mantendría una contribución al producto ligeramente negativa".

Así, prevé que el gasto de los hogares subió en el cuarto trimestre, tanto en su componente de consumo (con un alza del 0,6% respecto al trimestre previo) como en el de inversión residencial, "que podría haber experimentado un pequeño incremento, tras la tasa positiva que experimentó en el tercer trimestre" y que fue la primera desde 2007.

También habría crecido la inversión empresarial, con un incremento en la inversión en bienes de equipo y un leve repunte de la inversión en construcción.

Precisamente en el sector de la construcción, el Banco de España cree que en 2014 podría haber terminado su ajuste, "después de seis años de contracción que han reducido su peso en el PIB en algo más de un 50% respecto a los datos de 2006, cuando se alcanzó el último máximo de la serie". Sin embargo, advierte de que se trataría de "una recuperación muy moderada, no exenta todavía de algunas incertidumbres".

Además, considera que la caída de los precios de la vivienda "podría haber tocado suelo igualmente en 2014", ya que ha registrado "pequeños incrementos" en dos trimestres consecutivos. De esta forma, el boletín calcula en un 36% la bajada de esos precios desde su nivel máximo, marcado en el tercer trimestre de 2007.

Por último, constata que la parte correspondiente al gasto público de la demanda interna "habría mantenido en el tramo final de 2014 el tono de contención que marca el proceso de consolidación presupuestaria que está en marcha".

Defiende la reforma laboral "para absorber de forma rápida" el alto paro

En cuanto al mercado laboral, el organismo público asegura que "la creación de puestos de trabajo netos ha proseguido a buen ritmo en los meses finales" de 2014, aunque admite que el descenso en la tasa de paro también ha estado influido "en alguna medida" por la disminución de la población activa.

Así, en el cuarto trimestre estima un avance de la ocupación del 0,5% respecto al trimestre anterior, similar al del período de julio-septiembre, aunque "con una contribución cada vez mayor de las ramas que se han incorporado más tardíamente a este proceso: la industria y la construcción".

Esa primera estimación lleva al supervisor a prever un aumentado del 1% en 2014, "en marcado contraste con el descenso del 3,3% del año pasado".

A juicio del organismo supervisor, la posibilidad de recurrir a contratos temporales y/o de jornadas a tiempo parcial permite "mayor capacidad para adecuar las condiciones laborales a las diversas situaciones económicas de las empresas y los sectores", y está siendo "un elemento decisivo del comportamiento de la ocupación en el año en curso".

Por eso, considera que "consolidar estos mecanismos de flexibilidad y diversificación que se han ido configurando mediante las reformas introducidas resulta fundamental para absorber de forma rápida el elevado número de desempleados todavía existente".

Aportación negativa del sector exterior por primera vez desde 2007

Respecto a la demanda exterior, el Banco de España recuerda que aún cuenta con muy poca información del último tramo del año, pero adelanta que "el sector exterior habría contribuido negativamente al PIB en 2014, por primera vez desde 2007", y la corrección del déficit con el exterior "se habría ralentizado".

Así, los datos disponibles del cuarto trimestre apuntan a "un aumento moderado de las exportaciones de bienes -en un contexto de depreciación del tipo de cambio del euro, crecimiento débil en la UEM y moderado empeoramiento de algunas áreas emergentes- y la continuación de la trayectoria favorable de los flujos de turismo".

Sin embargo, las importaciones habrían aumentado por el mayor dinamismo de la demanda interna, pero en menor medida que en trimestres previos.

El Banco de España concluye que parte de la desaceleración del sector exterior "obedece al significativo debilitamiento de nuestros mercados de exportación", pero alerta de "la elevada sensibilidad de nuestras importaciones a los cambios en la demanda final" y, para mitigarla, reclama "la necesidad de profundizar en la mejora de la competitividad de nuestra economía".

Pese a la debilidad del entorno, España crecerá un 2% en 2015

En lo que se refiere a su previsión para el año 2015, el Banco de España espera "que continúe la recuperación, previéndose un crecimiento del 2%, similar al estimado en los últimos ejercicios". Esa estimación se mantiene a pesar de que, como recuerda el supervisor, "en los últimos meses ha proseguido el empeoramiento del entorno exterior, singularmente de la UEM [Unión Económica y Monetaria], lo que ha llevado a revisar a la baja las perspectivas de actividad de numerosos países en 2015".

Sin embargo, para apoyar sus cálculos, el banco central estima que "el previsible debilitamiento de nuestros mercados de exportación a lo largo del año que viene se verá compensado por la prolongación de la mejoría de las condiciones de financiación, la depreciación del tipo de cambio del euro y el nivel considerablemente más reducido de los precios del petróleo que se proyecta en la actualidad".

Estas previsiones están sometidas "a riesgos de desviación" tanto al alza como a la baja, y a "un elevado grado de incertidumbre, ligado, en buena medida, a las dudas en torno a la trayectoria futura del precio del crudo, tras su desplome en las últimas semanas".

Entre los riesgos negativos, el Banco de España destaca "una eventual evolución menos favorable de los mercados exteriores", mientras que los factores que podrían influir en una mejora cita "una mayor moderación de los precios del petróleo, una depreciación más acusada del tipo de cambio del euro y una mejora adicional de las condiciones financieras", como consecuencia de las actuaciones de política monetaria del BCE y de los resultados de la evaluación global del sector bancario europeo.

Como resultado, revisa al alza su previsión anterior para la demanda nacional privada -por "el mantenimiento del buen tono reciente del empleo y una cierta mejora adicional de las condiciones de financiación del sector privado"-, mientras que incorpora "un empeoramiento del contexto exterior, que se refleja en una revisión a la baja del crecimiento esperado de las exportaciones".

Además, la entidad avisa de que habrá que hacer un "seguimiento continuo" de la evolución de la recaudación pública de 2015 dada la incertidumbre que rodea habitualmente a los cambios impositivos, con el objetivo de anticipar y reaccionar a tiempo a posibles desviaciones sobre los objetivos de recaudación.

Así, aseguraque será necesaria una ejecución presupuestaria "muy estricta" por parte de todas las administraciones, así como la materialización de los ahorros esperados de las distintas reformas, sobre todo, la de la administración local.

Rebaja de la previsión de inflación

Respecto a la tasa de inflación, el boletín constata que el descenso "se ha intensificado en el cuarto trimestre, más allá de lo que era previsible hace unos meses, como derivación de la aceleración de la caída del precio del crudo en el tramo final del año y de su impacto sobre los precios de los productos energéticos".

El Banco de España señala, sin embargo, que esa bajada ligada al petróleo "ha coincido con una tendencia más generalizada hacia una inflación más baja, o incluso negativa, que afecta a prácticamente todos los componentes del índice general, como revela la inflación subyacente [el índice que excluye el precio de la energía y los alimentos no elaborados], que ha mantenido crecimientos nulos o levemente negativos desde el mes de mayo".

Además, añade la entidad, el descenso de los precios en los últimos meses "ha sido más intenso que la desaceleración de la tasa de inflación en la UEM", y "en estas circunstancias, las previsiones de inflación se han revisado a la baja", tanto para el cierre de este año como para el año que viene.

Así, mientras el Gobierno preveía terminar 2014 con una tasa de inflación positiva, el Banco de España ya da por hecho que se cerrará con caídas de precios y adelanta que, "si se mantiene la fuerte moderación del coste del crudo, la inflación continúe en terreno negativo durante la parte inicial de 2015".

"Un cierto aumento" del crédito

Sobre las condiciones de financiación, el supervisor considera que "se ha prolongado la tendencia favorable", aunque se ha visto "interrumpida por algún episodio puntual de inestabilidad", como el derivado de la fuerte caída del precio del crudo sobre algunas economías productoras.

Así, asegura que "las entidades de crédito han seguido trasladando gradualmente el abaratamiento de sus fuentes de financiación al coste de los préstamos bancarios a empresas y familias" y observa "un cierto aumento de las nuevas operaciones de crédito al sector privado".

Eso ha llevado, continúa el informe, a que se atenúe el ritmo de retroceso de la deuda de empresas y familias, "de forma más acusada" en el caso de la deuda de los hogares. Según el organismo público, "todo ello contribuye a sanear la situación patrimonial de empresas y hogares, y resulta favorable para las decisiones de gasto e inversión del sector privado".