El Gobierno pedirá a Bruselas que retire parte de la producción de frutas y verduras tras el veto ruso

• Así lo ha anunciado la ministra de Agricultura tras reunirse con el sector
• El objetivo es que no se desplomen los precios de frutas y verduras
• Esta era una de las medidas que pedían los agricultores y exportadores
• Organizaciones como COAG denuncian que se intenta minimizar el problema

El Gobierno pedirá a Bruselas que retire parte de la producción de frutas y verduras tras el veto ruso

El Gobierno de España pedirá este jueves a la Comisión Europea (CE) que se retire parte de la producción de frutas y verduras, "si puede ser de forma retroactiva", tal y como solicita el sector agroalimentario tras el veto ruso a determinados productos agroalimentarios desde la semana pasada, una retirada que "debe ser financiada" por la UE. El objetivo final de la medida es evitar que se desplome el precio de los productos.

Así lo ha asegurado este lunes en rueda de prensa la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, tras reunirse con Cooperativas Agro-Alimentarias, las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA, y la Federación de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex) con las que ha preparado la reunión de este jueves entre la CE y los Estados miembros.

García Tejerina ha señalado que, desde el Ministerio, "lo primero" que quieren es que la Comisión Europea "reaccione de forma urgente" y que las medidas se adopten "a la máxima velocidad" para "evitar en la medida de lo posible cualquier perturbación" de los mercados.

Por eso, ha afirmado que España pedirá "la retirada de las producciones con carácter urgente", centrándose en el sector de las frutas y perecederos, que son los más afectados actualmente. Además, según Tejerina, la retirada "tiene que venir financiada, sin ninguna duda, a través del fondo de gestión de crisis" de la PAC.

Además, el Gobierno analizará "las perturbaciones en los mercados" para adoptar "la batería de medidas que sean necesarias". Según la ministra, el Ejecutivo ya estaba trabajando para la retirada de más de 10.000 toneladas de fruta de hueso con destinos fuera del mercado, como los bancos de alimentos, Cruz Roja o la transformación.

Tejerina ha asegurado que los sectores que han sido vetados en Rusia facturaron en ese país 107 millones de euros de enero a mayo de 2014. Y que el año pasado vendieron productos por valor de 337 millones de euros.

Tras remarcar que el mercado ruso es importante para España, la ministra ha recalcado no obstante que la "mayor preocupación" del Gobierno es que "se cierra a Rusia la exportación de estos productos a todos los Estados miembros (...) que ahora tienen que buscar mercados alternativos". Tejerina ha recordado que la UE es el principal mercado para los productos españoles, lo que perjudicará a nuestro país.

Los afectados piden la retirada del excedente

Por su parte, los representantes de las organizaciones del sector agroalimentario Asaja, UPA, COAG, Cooperativa Agraria y Fepex han coincidido en destacar que la medida de "máxima urgencia" que se debe adoptar desde Europa a causa de la crisis generada por el veto ruso es la retirada del mercado del excedente de producción agrícola.

Las cinco organizaciones presentes en la reunión han destacado la necesidad de reequilibrar el mercado tras el veto de Rusia a los productos agroalimentarios de la UE a través de la retirada del excedente. Según las organizaciones agrarias, el objetivo que persigue esta retirada es el de "evitar el efecto dominó sobre los precios" que tendría el retorno de este excedente al mercado.

A su vez, las organizaciones agrarias han recalcado el carácter político de la decisión del veto ruso. Por ello, piden a la Unión Europea, a través de la ministra de Agricultura, medidas de urgencia, entre ellas la retirada del excedente y la compensación económica a través del fondo de reserva de la PAC.

Antes de la reunión, el secretario general de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Miguel Blanco, cifró en más de 1.200 millones de euros las exportaciones indirectas que se ven afectadas por el veto que ha establecido Rusia. "No son solamente las exportaciones directas, que son unos 340 millones, sino que estamos hablando de más de 1.200 millones que también se van a ver afectadas", ha señalado.

Por su parte, el secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Lorenzo Ramos, ha valorado el "compromiso de reconocimiento del problema real". Asimismo, ha asegurado que la experiencia de las medidas adoptadas con la crisis de la e-coli fueron "muy positivas". "Esperemos que se puedan tomar medidas de ese tipo", añadió.

Mientras, el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha, Angel Villafranca, ha coincidido en pedir medidas de choque urgentes y ha asegurado que "un problema político no puede poner en jaque al sector".