Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Las 'maquiladoras' son fábricas de propiedad extranjera, sobre todo, estadounidense, que se han instalado en México por los bajos impuestos y salarios. Hay cientos de ellas a lo largo de toda la frontera y muchas de siguen abiertas pese a la pandemia. Sus trabajadores denuncian presiones para que se mantengan abiertas a pesar de los contagios y las condiciones de hacinamiento en las que trabajan. Coronavirus: última hora en directo

En México, la cuarentena no es obligatoria y los criminales han optado por no quedarse en casa. Con 99 asesinatos diarios, marzo fue el segundo mes más violento en décadas, abril pinta aún peor, ya que el lunes hubo 114 homicidios. La lucha entre cárteles se habría recrudecido en un contexto de fronteras cerradas y calles vacías que dañan tanto al mercado internacional como al local.

Trabajar en la sanidad durante esta pandemia del coronavirus se ha convertido en una profesión de riesgo, no solo por el cuidado de enfermos y la batalla al virus, sino por el rechazo social que muchos profesionales sufren. En México, la policía protege los accesos y salidas de hospitales.  A Luis Gerardo, un enfermero de Reynosa, le rociaron con cloro en una tienda cuando iba camino del hospital. En las últimas semanas, las redes sociales se han llenado de denuncias parecidas: la enfermera a la que tiraron café ardiendo desde un coche, a la que partieron dos dedos en un forcejeo o los que pegaron a los médicos que les impidieron ver a un familiar muerto con COVID-19. [Coronavirus: última hora en directo

Los ciudadanos mexicanos que huyen del país estos días se han encontrado con todas las fronteras cerradas. Además, no están siendo acogidos en los refugios que se les tiene habilitado por miedo al contagio de coronavirus COVID-19, lugares que se han convertido en posibles focos debido al gran número de personas y la falta de medidas de higiene. Estados Unidos ha suspendido cualquier trámite de solicitudes de asilo y devuelve a los que intentan cruzar la frontera.

La diabetes y la obesidad son las otras epidemias de México además del coronavirus. La primera afecta al 14% de su población, la segunda al 75%, ya que tres de cada cuatro de los 127 millones de mexicanos tienen sobrepeso. La pandemia aterriza sobre estas emergencias epidemiológicas previas. Las personas con diabetes con mucho más propensas a desarrollar COVID-19. El problema es tan grave que neutraliza la ventaja de tener una población más joven que la europea o la estadounidense.

El gobierno mexicano ha empiezado a tomar medidas para evitar la expansión del coronavirus por lo que ha llamado a la población a que se quede en casa durante un mes. Mientras, en el centro del país, se ha producido una oleada de saqueos en los comercios, aunque las autoridades considera que se trata de grupos organizados que intenta aprovecharse de la situación.

Hasta hace dos días el presidente de México, López Obrador, seguía repartiendo abrazos, presumía de amuletos 'anti-virus' e invitaba a la gente a salir a la calle. Su gobierno insiste, sin embargo, en que están actuando a tiempo. Se apuesta a una epdemia larga pero contralada.