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De los 214 nuevos contagios de coronavirus en las últimas horas, 36 están en Cataluña, pero preocupan también las situaciones de los brotes en Ordizia (Gipuzkoa) y A Mariña (Galicia). Los 14 brotes en Lleida mantienen en alerta a las autoridades sanitarias, que esperan que los casos vayan en aumento. Unos 260 sanitarios se han ofrecido como refuerzo porque los profesionales locales empiezan estar al límite. [Coronavirus: última hora en directo]

Alfredo Llano, alcalde de Burela, ha mostrado en 24 horas de Radio Nacional su preocupación con que las elecciones a la Xunta de Galicia sigan en marcha y ha pedido su aplazamiento ya que "no estamos en las mismas condiciones que otros ayuntamientos de Galicia": "Cuando se convocan las elecciones,  lo primero que se dice es que va a haber todas las garantías sanitarias y en A Mariña no las tenemos". "Es curioso porque los confinamientos, que normalmente duran 14 días, aquí durarán cinco", ha añadido el regidor socialista, "Luego, un día de reflexión y a votar. No hay gente para controlarlo: si vamos a votar la gente se concentra y aumentan las posibilidades de contagio".

Si bien el alcalde gallego señala que el brote, tras mucho esfuerzo, parece estar controlado, Pere Puiggròs, alcalde de Artesa de Lleida, señala que en su comarca la situación es bien distinta: "Día a día va aumentando el número de contagios y la situación se complica por momentos". Asimismo, el catalán ha salido en defensa de los agricultores de la zona, asegurando que "todos los temporeros que vienen con contrato tienen un sitio para vivir con las condiciones de higiene y sanidad" necesarias: "Hay un albergue expresamente construido para ellos. Otra cosa es la gente que no viene con contrato, esa es otra historia".

Los responsables sanitarios que están gestionando el brote de COVID-19 de Ordizia, en Guipúzcoa, creen que el paciente cero llegó desde Lleida. Esta es su principal hipótesis. Los contagios son ya 30 y siguen haciendo pruebas PCR a vecinos para detectar posibles positivos.  Este martes por la tarde hay una reunión para estudiar si hace falta aplicar más medidas de contención.

El brote de coronavirus empeora: suma 74 nuevos positivos en las últimas 24 horas. Los sindicatos médicos denuncian que los ambulatorios están desbordados y el hospital podría comenzar a derivar pacientes sin coronavirus a otros centros para evitar la saturación.  [Coronavirus: última hora en directo

En el Segrià hay un 20 % más de incidencia de nuevos casos que en el resto de Cataluña.  Ante la situación del brote, el Govern quiere obligar a llevar siempre la mascarilla, una decisión que se tomará en las próximas horas.

En ‘Las mañanas de RNE’ analizamos la relación que existe entre la pobreza y la expansión del coronavirus fijándonos en el ejemplo de lo que está ocurriendo en Mauritania, uno de los países del Sahel más afectados por la COVID-19, y en Lleida, donde las precarias condiciones de los trabajadores irregulares del campo han provocado varios rebrotes que han obligado a confinar la comarca del Segrià.

El doctor José Luis Casado, médico adjunto del servicio de enfermedades infecciosas del hospital Ramón y Cajal de Madrid, forma parte del equipo de sanitarios españoles que está en Nuakchot en una misión de apoyo al sistema sanitario de Mauritania. Casado ha asegurado que el país tiene una estructura sanitaria muy buena, pero necesitan recursos y protocolos más claros. “Tiene menos de 30 camas de UVI y en algunos hospitales sólo hay uno o dos respiradores”. Casado ha explicado que la población tiene bastante interiorizado el uso de la mascarilla y el lavado de manos, pero que les cuesta más entender la importancia de mantener la distancia de seguridad. “Le cuesta asumir, por ejemplo, que tienen que dejar a un familiar solo en urgencias”. Además, ha reconocido que es imposible controlar que las personas que se montan en un cayuco hacia España no tengan la enfermedad. “Es gente desesperada que se lanza al mar, que han estado hacinados y que están en una situación legal. La única solución pasa por controlar la epidemia en todo el país”, ha explicado Casado, que subraya que “la pobreza acarrea más riesgo de contraer cualquier enfermedad y en este caso más evidente”.

Además, hemos hablado sobre la situación de los temporeros de Lleida con Fernando García Benavides, catedrático de Salud Pública de la Universidad Pompeu Fabra y expresidente de la Sociedad Española de Epidemiología, que ha asegurado que es fundamental regularizar la situación de esos trabajadores. “No pueden seguir siendo irregulares, necesitan estar identificados, tener papeles, porque eso les abrirá las puertas del resto del sistema. Que las personas duerman en la calle no es de recibo en un país como el nuestro”, ha asegurado García Benavides, que considera que “la primera fase puso de manifiesto la situación de las residencias de ancianos y la segunda está sacando a la luz la situación precaria de los trabajadores irregulares.” García Benavides ha insistido en que es fundamental potenciar los servicios de prevención de riesgos laborales sobre todo en las empresas donde se producen contactos prolongados en espacios cerrados. “Tenemos que prevenir, hay muchas líneas de transmisión abiertas, la medida puede ser el confinamiento de nuevo”, ha concluido.

Los 14 brotes detectados en Lleida preocupan "mucho" a Sanidad, especialmente la situación en la comarca del Segrià. La Generalitat asume que hay transmisión comunitaria, por lo que no descarta tener que optar por el confinamiento domiciliario o por ampliar el confinamiento perimetral a otras zonas. Resignados, los vecinos de la comarca aseguran que les costaría volver a quedarse en casas después de entrar en la nueva normalidad. [Coronavirus: última hora en directo

Los expertos aseguran que un brote de coronavirus se ha descontrolado cuando el número de casos (superior a tres) exigiera un rastreo que no sea suficiente y que no se puedan relacionar los contagios con los focos iniciales. A partir de aquí, confinar un territorio o no está en manos de las comunidades autónomas, una decisión que depende del número de contagios, de la velocidad y de que medidas previas de rastreo fracasen. [Coronavirus: última hora en directo

La comarca del Segrià vive desde este fin de semana confinada por los brotes de coronavirus. En estas fechas, la población, de unos 500 habitantes, se duplica por la campaña de recogida de la fruta. Algunos vecinos muestra su preocupación por la llegada de personas en las primeras fases de la desescalada. El Ayuntamiento asegura estar desbordado y pide asistencia al Ministerio de Sanidad.  El alcalde de Lleida también acusa al Gobierno de permitir la entrada de temporeros en la región, un colectivo donde hay más de 60 positivos y que defiende que siempre usan la mascarilla. [Coronavirus: última hora en directo

Resignación de la población de la comarca de la Segrià, Lleida, que viven un nuevo confinamiento por nuevas infecciones de Covid-19, donde la mascarilla se vuelve a imponer, se limita la movilidad y las reuniones, sin descartar como dijo la Consejera de Sanidad que ese aislamiento pueda ampliarse pasadas las dos semanas. El hospital de Arnau de Vilanova abrirá una segunda sala y más plazas UCI para atender el esperable aumento de casos y las residencias de ancianos vuelven a la fase anterior, con restricción de visitas y sin que los residentes puedan ir a casa de sus familiares. Se da la circunstancia de que casos positivos investigados en otros puntos de Cataluña, algunos en Girona y en la zona central, resultaron hber estado en Lleida o algún otro lugar de la Segrià.

Las últimas cifras dadas ayer indicaban 155 nuevos casos en 24 horas. Siete hospitalizados más, en total 28 la mayoría jóvenes de entre 30-40 años.

Los más de 200.000 vecinos de la comarca leridana del Segrià han pasado sus primeras 24 horas bajo el confinamiento perimetral ordenado por la Generalitat ante el incremento de casos de coronavirus en la zona, donde hay nueve brotes activos de la enfermedad. El incumplimiento de estas restricciones puede conllevar sanciones de entre 100 y 600 euros en función de la gravedad, según ha asegurado el conseller de Interior, Miquel Buch. En total 25 controles de los Mossos controlan el cumplimiento de las restricciones [Coronavirus: última hora en directo]

El nuevo confinamiento en la comarca del Segrià ha pillado por sorpresa a los leridanos. Muchos de ellos pensaban irse este fin de semana de vacaciones, algunos con reserva hecha, pero llegó el cierre en las maletas se quedaron en el pasillo, según ha podido contrastar nuestro compañero Jesús Riverola que ha hablado con ellos. Resignación es lo que se impone entre estas 200.000 personas que han pasado su primera noche de nuevo confinamiento y acatar las medidas de prevención que les dicten las autoridades porque se exponen si no lo hacen a pagar multas desde 100 a 600 euros.

La Consellera de Sanidad Alba Vergés ha insistido en que es básico reducir la actividad social en la zona confinada para controlar los rebrotes y ha advertido que no se puede descartar en ningún momento un confinamiento más drásticos. El número de casos en la zona es de 149 por cada 100 mil habitantes en los últimos 15 días. En estos momentos están ingresadas en el hospital Arnau 27 personas, cuatro de ellas en la UCI. En dos clínicas privadas hay otras once personas que están siendo tratadas con síntomas leves.

Los más de 200.000 vecinos de la comarca leridana del Segrià han pasado sus primeras 24 horas bajo el confinamiento perimetral ordenado por la Generalitat ante el incremento de casos de coronavirus en la zona, donde hay nueve brotes activos de la enfermedad. El confinamiento no implica el cierre de la actividad comercial ni de los establecimientos de hostelería, sin embargo, ha provocado la cancelación de vacaciones y la suspensión de los eventos que estaban previstos en la zona, que había pasado a la nueva normalidad el pasado 19 de junio, dos días antes de que finalizara el estado de alarma en España. [Coronavirus: úlima hora en directo]

La comarca del Segrià pasa su primera noche confinada. Unos 200 efectivos de los Mossos en 25 puntos de control, vigilan las salidas y accesos para evitar desplazamientos no justificados. También se han colocado en la estación de Lleida. Entre la población, mucho desconcierto. A algunas personas les ha pillado justo antes de comenzar sus vacaciones; otros ya lo habían hecho y se habían desplazado a sus segundas residencias. En la zona, el periodo de rebajas en los comercios está activo. El Ayuntamiento ha aclarado que la guardia urbana velará para que no haya más de 10 personas en estos establecimientos.

Aragón y Cataluña se mantienen en contacto por la movilidad en la franja que separa las provincias de Huesca y Lleida por los brotes detectados allí. Aunque los brotes de Aragón están aparantemente controlados, el Gobierno regional considera este fin de semana decisivo para decidir cuándo los territorios que retrocedieron a Fase 2 volverán a la "nueva normalidad". El confinamiento decretado en la comarca del Segrià afecta a las comarcas aragonesas y sus ayuntamientosven lógico aplicar medidas similares para contener la propagación del coronavirus. [Coronavirus: última hora en directo

El confinamiento de la comarca del Segrià se limita de momento a 15 días después de que el titular del juzgado de instrucción número 4 de Lleida haya avalado la medida, que podrá prorrogarse en función de la evolución de la pandemia. Durante estas dos semanas solo se podrán realizar actividades esenciales y estarán prohibidas las reuniones de más de diez personas. La restricción de la movilidad en la comarca del Segrià se aplica desde las 16:00 horas de este sábado excepto por "causas de fuerza mayor" y laborales incluyendo el transporte, la prestación de servicios, el comercio, y las actividades empresariales. [Coronavirus: última hora en directo

Manel Ezquerra es el alcalde de Alcarràs en la provincia de Lleida. Es un pueblo limítrofe con Aragón con 10.000 habitantes censados y que desde esta tarde está sellado por las nuevas infecciones de Covid-19 y su alcalde nos cuenta en el Diario 20 horas fin de semana Diario 20 horas fin de semana que "estamos en lo que en principio parece la zona más afectada". Están tranquilos según dice pero entiende la medida adoptada por la Generalitat "es evidente que con esto casos el departamento de sanidad, la conselleria, ha tomado esta determinanción para intentar cortar la cadena de transmisión"

No esconde que, pese a ello, están algo sorprendidos porque "ayer mismo nos reunieron a los alcaldes de la comarca, los de la zona de más producción agrícola, pero nos dijeron que no daríamos ningún paso atrás y al final lo hemos dado". Según los datos que nos ofrece Ezquerra, actualmente tienen 133 casos, acumulados desde el inicio de la pandemia "pero claro teníamos 50 casos, era un índice muy bajo en proporción a l apoblación tenemos en Alcarràs que son unos 10.000 habitantes empadronados. Lo que sí es verdad es que en el último mes sumamos otros 80 casos". Les preocupa haber llegado a esas tasas tan altas, cuando creían que ya habñía osado todo "esta percepción de la gente es la que nos habrá llevado a estas circunstancia que no la esperábamos"

La Conselleria de Sanidad no ha pasado por alto la presencia de los temporeros en una zona agícola, pero el alcalde de Alcarràs no comparte totalmente esa observación, como mucho afirma que sería al 50 %, pues la población crece hasta los 15.000 habitantes en esta época, y muchos de los infectados permanecen allí todo el año "nosotros no vemos el brote tan centrado en los temporeros, si en cambio, en este relajamiento"