Jefes de estado y de gobierno, la ONU, el FMI, la Unión Europea y la Liga Árabe, se reúnen en una conferencia de donantes para apoyar a El Líbano tras la explosión de Beirut que provocó 158 muertos y más de 6.000 heridos. Las protestas dejaron el sábado un polícía muerto y casi 200 heridos y el pirmer ministro anunció elecciones anticipadas.
Duros enfrentamientos entre policía y manifestantes esta tarde en Beirut, que se han saldado con un policía muerto y casi 200 heridos. La explosion del martes deja mas de 150 muertos y 6000 heridos. El primer ministro ha anunciado esta tarde elecciones anticipadas.
El primer ministro de Líbano, Hasan Diab, ha propuesto este sábado la celebración de elecciones parlamentarias anticipadas, en un intento de contener la ola de protestas contra la crisis política y económica, exacerbada por la gran explosión del martes en el puerto de Beirut. Un agente de policía ha sido la primera víctima mortal de esas protestar desatadas esta tarde en la capital de Líbano donde hay más de 140 heridos y se ha llegado a ocupar el Ministerio de Exteriores y otras sedes de Gobierno en la ciudad. Protestas que se suceden en el día de luto por la gran explosión del martes que ha dejado 158 muertos y más de 6.000 heridos.
Cientos de personas se han manifestado este sábado frente al Parlamento de Beirut, para exigir la dimisión de las autoridades libanesas tras la explosión el martes en el puerto de la ciudad que ya ha causado más de 150 muertos y 5.000 heridos. La protesta, convocada bajo el nombre de “Día de la ira”, ha comenzado en la simbólica Plaza de los Mártires y, al grito de “Dimisión”, un grupo ha intentado entrar en el Parlamento a la fuerza. El amplio contingente de fuerzas antidisturbios desplegado en el lugar desde esta mañana respondió con bombas lacrimógenas, mientras que los manifestantes lanzaron piedras.
Junto a ellos, en las labores de búsqueda participa un grupo de perros especializados que han participado en operativos en México, Haití, Ecuador, Chile y Pakistán.
Más de 300.000 personas han perdido sus hogares y hay unos 5.000 heridos, algunos en estado crítico. Mañana habrá un conferencia internacional de apoyo al Líbano en la que participará España.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, participará este domingo en la conferencia internacional de apoyo al Líbano convocada por el presidente francés, Emmanuel Macron, junto con el secretario general de Naciones Unidas. La reunión, según fuentes de Moncloa, se desarrollará a puerta cerrada y por videoconferencia desde primera hora de la tare y contará con la participación de líderes internacionales, como Macron, Guterres o Trump, en represenación de al menos quince países y siete instituciones financieras internacionales, además de la UE y la ONU. El número de muertos y heridos por la explosición del pasado día 4 es alto. El presidente de Líbano habla de una negligencia o intervención extranjera y la población descontenta por la falta de auxiliio y la oposición política también.
La comunidad internacional se moviliza para ayudar a El Líbano tras la explosión de Beirut y se ha convocado una conferencia de donantes para este domingo. En ella participará el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Líbano ha elevado a 154 el número de muertos a causa de la explosión que sacudió el pasado martes el puerto de Beirut, su capital. Entre los más de 5.000 heridos, hay 120 que se encuentran en situación crítica. Las autoridades han realizado una detención y continúa la investigación para determinar los motivos de la deflagración de casi 3.000 toneladas de nitrato de amonio. El Gobierno, a falta de recibir los resultados del informe, no descarta la hipótesis de una "intervención exterior", llegando a mencionar un misil o una bomba en el origen de las explosiones aunque de momento continúan bajo arresto domiciliario los responsables del puerto. Informa Víctor Paredes.
Las autoridades libanesas rastrean, con ayuda extranjera, su principal pista: las 2.700 toneladas de nitrato de amonio que provocaron la terrible explosión. Según la investigación, llegaron a Beirut en 2014 en un barco de bandera moldava. Su capitán cuenta que su misión era llevar la carga de Georgia a Mozambique, pero que el dueño -un empresario ruso- le pidió que hiciera una parada no programada en el puerto de Beirut. Allí estuvieron retenidos varios meses por problemas legales y la carga nunca volvió a salir. Por el momento, las autoridades han detenido a 16 personas, entre ellos, altos cargos de la autoridad del puerto, por su presunta responsabilidad. Además, las explosiones han vuelto a reactivar las protestas contra el Gobierno que se habían detenido por la pandemia de coronavirus.
Para los equipos de rescate que trabajan en la zona cero de la explosión parece el resultado de un terremoto. Este viernes han econtrado más cuerpos entre los escombros pero sigue habiendo, al menos, un centenar de desaparecidos. Gran parte de la ayuda internacional se centra en equipamiento médico porque los hospitales han quedado muy dañados. Además, el mayor silo de grano del país saltó por los aires. El domingo habrá una videoconferencia de países donantes. Por otra parte, las protestas contra el Gobierno, interrumpidas por la pandemia de coronavirus, han vuelto a producirse tras las explosiones en el puerto de Beirut. Este jueves, los manifestantes no consiguieron llegar hasta el Parlamente y se ha convocado a través de las redes sociales una manifestación para este sábado bajo el lema: "¡Colgadlos!".
Los fallecidos por la explosión en el puerto de Beirut ya ascienden a 154. La investigación contempla distintas causas y hay 20 detenidos por presunta negligencia, aunque el presidente del país habla de un posible ataque externo. La población ha retomado las protestas contra el Gobierno del Líbano, al que acusa desde hace años de corrupción. Han convocado en redes sociales una manifestación para el sábado bajo el lema "Colgadlos".
Violentas protestas esta noche en Beirut contra el Gobierno tras la devastadora explosión del martes que deja ya más de 140 muertos y 5.000 heridos. Los manifestantes han lanzado piedras contra la policía y acusan a los políticos de corrupción y negligencia ante una catástrofe que golpea a un país sumido en una larga y grave crisis política y económica.
