El jugador del Albacete, que hace unos meses sufrió una dura caída desde el tercer piso de un hotel, será uno de los 2.000 aficionados que anime a España en el partido contra Rusia. Novo, invitado a este partido por la RFEF, ya está camino de Rusia.
La selección española nunca ha ganado a una anfitriona en un torneo internacional e intentará hacerlo por primera vez este sábado en Rusia, en los octavos de final del Mundial. En el recuerdo del actual seleccionador está el fantasma del partido ante Corea del Sur en el Mundial de 2002.
El partido entre España y Rusia podría jugarse en un campo algo más que pasado por agua, toda vez que los pronósticos del tiempo auguran a Moscú un fuerte temporal con lluvias torrenciales, viento y granizo, que permanecerá hasta última hora de este domingo. El Ministerio de Situaciones de Emergencias ruso ha emitido una advertencia en la que pide a los moscovitas "extremar las precauciones" entre la tarde del sábado y todo el domingo ante la llegada de un frente con "lluvias localmente fuertes, tormenta, granizo y viento con rachas de hasta 22 metros por segundo".
El delantero del Celta, Iago Aspas, reclama su sitio en la selección española. Después de ser protagonista logrando el empate en el partido frente a Marruecos, el delantero gallego espera tener más minutos e incluso marcar un gol que le de a España otro Mundial.