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El jugador de la selección española Cesc Fábregas ha afirmado, con respecto a la titularidad de Iker Casillas, que el seleccionador Vicente del Bosque es "un entrenador honesto" y que "nunca se ha casado con nadie", por lo que si ha apostado por él en el debut de la Copa Confederaciones, detrimento de Víctor Valdés y Pepe Reina, lo ha hecho "en beneficio de la selección".

  • Valdés y Casillas pugnan por un puesto en la portería, con Reina al acecho
  • Si Del Bosque opta por un '9' nato, Villa, Soldado y Torres igualan en goles
  • Cesc y Pedro son dos opciones con gol para usar el 'falso nueve'
  • España debuta contra Uruguay en la Copa Confederaciones el domingo 16

El jugador del Barcelona Cesc Fábregas ha alertado de la importancia del partido de vuelta contra el Málaga de cuartos de final de la Copa del Rey 2013, que ha calificado de "final".

  • Se confirma la lesión del bíceps femoral del azulgrana en el partido ante el Betis
  • Cesc Fábregas se perderá los tres partidos del Barça en lo que queda de año
  • El jugador del Málaga, Jeremy Toulalan, también sufre lesión del bíceps femoral

La selección española ha entrenado en el estadio Rommel Fernández, en el que este miércoles a las 22:30 (hora peniinsular española) disputará un partido amistoso contra la anfitriona, Panamá. Vicente del Bosque, seleccionador español, matiza las declaraciones de Cesc sobre la importancia del choque y de Susaeta sobre su lío de "la cosa".

El 17 de agosto de 2011 Cesc y Messi volvían a juntarse en el mismo equipo después de ocho años. Y el primer pase entre ellos acabó entre palmas: una jugada de gol, Clásico y Supercopa. No fue un reencuentro cualquiera en la historia muchas veces contada de dos futbolistas nada comunes. Compañeros de la quinta del 87, como Piqué, hasta que Fábregas se fue al Arsenal crecieron juntos en la cantera del Barça. A principios de la pasada década formaron un equipo cadete que lo ganó todo. Uno de sus entrenadores aquellos años fue Tito Vilanova. Él dirige ahora una película en la que Riazor pudo ser un escenario clave. Para muchos fue el primer partido del Barça de Cesc, más vertical y arriesgado que el de Xavi. Al toque o a toda velocidad, Messi siguió haciendo y repartiendo goles y, de regreso al mediocampo, donde triunfó en Londres, el 4 sirvió otros tres en 45 minutos. Superada en Sevilla una sequía de siete meses sin marcar, Cesc encontró primero el gol y el sábado el juego.