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Esta apicultora triunfa en TikTok salvando miles de abejas

  • En el Día Mundial de las Abejas, conocemos a la apicultora y activista de las abejas, Erika Thompson
  • Fundadora de Texas Beeworks, ha triunfado en TikTok enseñando cómo salva a las abejas de los lugares más raros
  • A veces sin ningún tipo de protección, saca las abejas a puñados de sus escondites para llevar a un santuario

Por
Erika Thompson y sus abejas
Erika Thompson está dispuesta a salvar a las abejas

Fundamentales para nuestra alimentación gracias a su labor polinizadora, las abejas por fin han alcanzado la fama que merecían. Como lo lees: centenares de abejas, anidadas en los lugares más dispares, desde una taza del váter hasta una furgoneta o un suelo de madera, hipnotizan con su zumbido a los usuarios de TikTok. Pero como en toda buena historia, no podía faltar un héroe, heroína en este caso. Erika Thompson es la mano que salva a las abejas que construyen su casa en los lugares menos apropiados, tanto para los humanos como para ellas.

Fundadora de Texas Beeworks, esta joven tejana dejó su trabajo en comunicación corporativa para empezar un proyecto que nos dejaría a todos boquiabiertos. Erika, cuando le solicitan sus servicios, acude rauda y veloz en busca de las abejas. A veces a piel desnuda y sin ningún tipo de protección, coge las abejas a puñados con las manos y las deposita en cajas de madera para poder trasladarlas cómodamente en su furgoneta.

Pero no todo es tan sencillo: primero deberá encontrar a la abeja reina para que todas las obreras la sigan hacia su nuevo hogar. Para ello, observa con detenimiento esa marabunta de alas y antenas hasta que da con la reina, una abeja que destaca por su gran tamaño. Cuando la encuentra, la atrapa en una especie de pinza y la deposita en la caja. Y entonces, como si fuera arte de magia, las súbditas empiezan a dirigirse junto a su monarca.

Fascinada por los insectos desde pequeña, a Erika le encantaba recoger y examinar cada bichito que se encontraba en el patio trasero de la casa donde creció, en Houston. Su pasión fue creciendo y en 2011, por simple curiosidad, asistió a un curso de apicultura y empezó a cuidar de sus propias colonias de abejas en su tiempo libre. Nada parecía indicar que 8 años más tarde estaría salvando a sus queridas abejas y triunfando en TikTok en un género de vídeos que se ha llamado “de jardín tranquilo” por ese tono relajante y los elementos de la naturaleza que intervienen en ellos.

Muchos de sus millones de seguidores le preguntan si no tiene miedo a las abejas y ella contesta, tal y como lo hizo para Texas Monthly, que para nada y que aunque a veces sí le pican, no le molesta. “Creo que es bueno que la gente tenga un miedo sano hacia las abejas. Debemos respetarlas”.

Erika lleva a cabo este trabajo en Austin y el centro del estado de Texas y lo hace a bajo coste y con los métodos más seguros para no perturbar el bienestar de las abejas, ya suficientemente amenazadas por los daños que hemos infligido al planeta. Luego las trasladará hacia su casa, donde ha construido un santuario para que vivan felices.

Hay mucho que admirar sobre las abejas, desde la forma en la que trabajan juntas como un superorganismo donde nadie piensa de forma individual y actúa para el bien de la colonia hasta la forma en la que construyen sus colmenas, recolectan alimento y crían a las abejas más jóvenes”, contaba Thompson para The Washington Post.

Lo que más le importa de las abejas es que puedan seguir haciendo su trabajo polinizador. Por eso las alquila a campesinos, para que así contribuyan a sus cosechas. Ella se encargará de buscarles un lugar adecuado en su campo y de cuidarlas todo el tiempo que permanezcan fuera de su santuario.

¿Y la miel? “Colmenas antes que miel”, afirma Thompson, queriendo decir que no es lo importante de su trabajo. De hecho, no comercializa la miel que producen las abejas, aunque sí la recolecta en muy pequeñas cantidades para consumo propio, ya que es consciente que las abejas la necesitan para sobrevivir. “Nuestro objetivo es incrementar la población de abejas y concienciar sobre las abejas mieleras mediante educación, activismo y comunicación”.