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Cáceres Abierto 2019

Emisión 16 de septiembre de 2019 · La 2

Por
Metrópolis - Cáceres Abierto

Metrópolis dedica un programa a Cáceres Abierto, un proyecto bienal de arte y cultura contemporánea concebido por Jorge Díez y co-comisariado con Julio C. Vázquez, que ganó la convocatoria lanzada en 2016 por la Junta de Extremadura con el fin de fortalecer el tejido artístico y cultural en la región.

Cáceres Abierto se compone de intervenciones en el espacio público, exposiciones, talleres y debates, con el objetivo de fomentar el diálogo entre presente y pasado, entre los espacios urbano y rural, y entre sus habitantes y los creadores contemporáneos. Metrópolis ofrece un resumen de la primera edición celebrada en 2017 a través de los videos de Víctor Sarabia, Guillermo Luna/Roberto Fernández, Rodrigo Rivas y Virginia Rivas, los realizadores encargados de reflejar cada uno de los proyectos con total libertad artística; y un recorrido por la edición de 2019 celebrada entre abril y junio en torno al concepto de “vacío” como eje temático.

Cáceres Abierto 2019

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Cáceres Abierto 2017 se organizó alrededor de doce proyectos centrales de muy diversa índole. El mural Quisiera subrayar realizado por Daniel Muñoz en la fachada lateral del nº 2 de la calle de San Antón reflejó el carácter efímero de la publicidad irregular y precaria que van dejando por la ciudad sus habitantes como contrapunto al culto arquitectónico propio del turismo cacereño. Los proyectos Unofficial Tourism y Postal Freek Cáceres de Iñaki Larrimbe promovieron, tanto entre los turistas como entre los ciudadanos, itinerarios alternativos e imágenes de la ciudad distintas a las ofrecidas por las industrias del turismo. La acción participativa La Virgen de Guadalupe no viene a verme de Maite Cajaraville tuvo como objetivo la creación de un mapa de Extremadura realizado por una impresora 3D, que se alimentaba con los impulsos eléctricos extraídos de materiales orgánicos e inorgánicos de producción extremeña dispuestos en la Plaza Mayor. Gustavo Romano presentó su proyecto nómada Time notes: Oficina móvil, una reflexión sobre el sistema de intercambio de tiempo y dinero, que se manifiesta en una oficina de banco que ofrece servicios como Reintegro del tiempo perdido o Préstamos de tiempo. La acción colectiva Rastros fue resultado de una serie de talleres impartidos por Isabel León y llevada a cabo en diversos espacios culturales y públicos de la ciudad, donde unas 50 personas equipados con objetos cotidianos dejaron huellas abstractas sobre los lugares ocupados. Dionisio Cañas también impartió un taller preparatorio para la ManifesACCIÓN LUJO PARA TODOS que recorrió el Paseo de Cánovas, itinerario habitual de las manifestaciones en la ciudad, para reclamar la felicidad colectiva y cuestionar qué se entiende como tal en el mundo actual. La gran bola de libros titulada Conciencia, que Alicia Martín instaló en una esquina del Palacio de la Generala, hace referencia al mito de Sísifo y representa un organismo vivo y endogámico que ha sido abandonado a caer por su propio peso, pero que al haber sido frenado en la caída representa un instante eterno. Juan López presentó la intervención Ojo, realizada sobre la fachada del Edificio de Servicios Múltiples, cuyas ventanas se iluminaron para formar la palabra “ojo”, en alusión a ciertas estrategias publicitarias que ocupan edificios enteros en los centros urbanos. Recuerdo de Cáceres de Noaz se centró en la recuperación de la memoria reciente de la ciudad a través de los testimonios de sus habitantes, plasmados en tres sellos conmemorativos, que en su versión en papel fueron pegados en distintos lugares de la ciudad. Azucena Vieites desarrolló el proyecto Coloring Book con 20 niños y niñas de 5º de primaria, cuyos dibujos y collages realizados a partir de un material propuesto por la artista acabaron formando una serie de libros no convencionales que se expusieron bajo el título Producciones low-fi en el Museo de Cáceres. El Aljibe almohade del museo acogió el ambiente inmersivo Microuniverso de Diana Larrea, que convertía el espacio abovedado en un universo íntimo y abordable, pero igualmente mágico. Y el grupo de artistas compuesto por Beatriz Castela, Lou Germain, Jorge Gil y Marcos Polo estableció una conexión recíproca entre el pueblo de Malpartida y el vecino Museo Vostell mediante la instalación Sinergias, que retransmitía en cada uno de los espacios lo que acontecía en el otro.

Para la segunda edición de Cáceres abierto se invitó a doce artistas a proponer una reflexión sobre el “vacío” a partir de las ideas recogidas en los libros La era del vacío de Gilles Lipovetsky y La España vacía de Sergio del Molino. Gema Rupérez reflejó, en su instalación interactiva 2202 ubicada en el mirador del Baluarte de los Pozos, los datos estadísticos sobre la pérdida de población en Extremadura, según los cuales en el año 2202 el último habitante abandonará la región. El proyecto La fuga de Fermín Jiménez Landa consistió en la construcción de una estructura en círculo llevada a cabo desde su interior; el resultado es una forma escultórico-arquitectónica que no encaja muy bien en el conjunto de esculturas expuestas en el Parque del Príncipe, tanto por su estilo como por la situación que la produjo, aún presente a través de algunos vestigios. Escif pintó una enorme sábana sobre la pared de un edificio de la Calle Plasencia que forma parte de un conjunto de 150 viviendas sociales construidas en 1959; el título  Las cosas que no son remite a la frase de Wolf Vostell “Son las cosas que no conocéis las que cambiarán vuestra vida”. La incerteza del vacío es un poema holográfico instalado en el Aljibe árabe del Museo de Cáceres, que forma parte de la serie La apariencia de la realidad – La realidad de la apariencia, con la que Pepe Buitrago interroga, desde hace treinta años, nuestra percepción y nuestras certezas. En el jardín del museo Ana H. del Amo presentó una de sus dos intervenciones escultóricas, que al igual que la realizada en el Callejón de Don Álvaro invitaba al público a atravesar el vacío. Dos proyectos giraron en torno al granito, material utilizado abundantemente en la construcción tanto de la ciudad de Cáceres como otras edificaciones como la que ahora alberga el Museo Vostell: Piedra-Piedra de Maider López consistió en el traslado de cinco bloques de granito de su entorno natural a la zona monumental para poner en relación y contraste la piedra original y la transformada por el hombre; Rosell Meseguer expuso, en el Museo de Cáceres y en el Museo Vostell, Guía de mano (petrográfica), una serie de finísimas láminas de granito producidas a lo largo de su investigación petrográfica y textural de muestras procedentes de diversas canteras, y que permiten la identificación del tipo utilizado en construcciones concretas. Otras dos propuestas se adentraron en las Hurdes, zona cuya percepción desde el exterior ha sido fuertemente condicionada por la controvertida película de Luis Buñuel. Los escenarios de la película fueron revisitados por Raúl Belinchón quien resume esta experiencia en el audiovisual Viaje a las Hurdes de Buñuel proyectado en el Museo de Cáceres al lado de Vida Hurdana. Pinofranqueado por los niños, resultado de una serie de talleres llevados a cabo por Carme Nogueira con niños hurdanos durante los que éstos plasmaron sus circunstancias vitales en una serie de dibujos. Con su proyecto Espigar la memoria,  María Jesús Manzanares enlazó pasado y presente, tradición y arte contemporáneo, mediante las acciones llevadas a cabo alrededor de dos instalaciones compuestas de sacos de trigo bordados por ochenta alumnos de secundaria de Plasencia y un grupo de danzantes de Jaraiz de la Vera, respectivamente. En el Archivo Provincial Andrés Talavero presentó, bajo el título Cambiar el mundo. NARBÓN ha vuelto, toda la documentación generada a lo largo de en una serie de acciones artísticas llevadas a cabo a lo largo de 2018 y dirigidas a reivindicar la figura de Narbón y la apertura permanente de su museo de Malpartida; esta presentación se completó con una instalación en el patio inspirada en un poema del artista. La revista La Más Bella produjo la edición especial La Más Bella MOCHA a partir de las connotaciones del término “desmochar”, singularmente unido a la ciudad de Cáceres a través del acontecimiento conocido como El Desmoche de las Torres de 1476.

Otra de las múltiples vías de diálogo abiertas por Cáceres abierto se manifestó en la exposición ¿Pintas o dibujas? Un paseo por el arte de la mano del comic en la Avenida Ruta de la Plata, que reunió historietas protagonizadas por el arte y los artistas de, entre otros, Mauro Entrialgo, Max, María Hesse, Laura Pérez Vernetti, Fermín Solis o Pablo AuladellCáceres abierto 2019 se cerró en el Museo Vostell con la proyección del documental No escribiré arte con mayúsculas en presencia de Isidoro Valcárcel Medina, protagonista de la película y referente fundamental del arte contemporáneo en España.